Ljungberg mantiene viva a Suecia

Con esta victoria, Suecia se lleva el premio de los tres puntos in extremis y mantiene sus posibilidades de ser primera de grupo. Paraguay pierde todas sus opciones de llegar a octavos y sólo le queda un partido de trámite ante Trinidad y Tobago.

Antes del comienzo del partido, el Olympiastadion tenía un claro color amarillo. Unos sesenta mil aficionados suecos invadieron el coliseo berlinés y tiñeron el graderío con el color de sus camisetas. Y el equipo de Lagerback salió contagiado por el ambiente y enrabietado con el resultado de su debut ante Trinidad y Tobago. Así, desde el primer minuto de partido, los suecos trataron de poner cerco a la meta de Bobadilla. Los paraguayos se limitaron a aguantar las acometidas de los nórdicos mientras que Santa Cruz esperaba solo en la punta del ataque.

Todo el primer tiempo fue un dominio sueco abrumador: Källström, Ljungberg, Wilhelmsson y Linderoth estuvieron inmensos y, con triangulaciones rápidas y casi sin conducción, crearon numerosas ocasiones que ni Ibrahimovic ni Larsson acertaban a meter, en parte merced a una grandísima actuación de Bobadilla, en parte debido a la falta de acierto del juventino y del ex barcelonista.

La única respuesta paraguaya pasaba por el 'Toro' Acuña, muy alejado del nivel que le llevó al Deportivo, y por balones largos para que un solitario Santa Cruz se pegase con toda la defensa sueca. El elegido "jugador más guapo del Mundial" hizo lo que estuvo en su mano, pero siempre en solitario y con el compañero más próximo a no menos de 20 metros de su posición.

Cambio de actitud

En el descanso Lagerback sustituyó a un Ibrahimovic completamente inoperante por Ällback. El sustituto del juventino dio otro aire al ataque amarillo y ayudó a abrir un poco más la lata sudamericana. Sin embargo, viendo que los ataque suecos se sucedían, la selección paraguaya decidió tener más el balón y buscar la portería de Isaksson de un modo más ordenado y tocando más el balón.

Suecia mantuvo el tipo y se empleó a fondo para recuperar el balón y tratar de imponer el ritmo que más les interesaba y con el que sabían que podían matar a los de 'El Maño' Ruiz. Poco a poco fueron recuperando el mando del partido, siguieron buscando la meta de Bobadilla (posiblemente el mejor de su equipo) y, con las entradas de Jonsson y Elmander, ganaron una mayor profundidad.

Hasta que llegó el gol a falta de dos minutos para el final. Elmander, que acababa de entrar en sustitución de Källström, centró con mucha rosca al segundo palo donde Ällback tocó con la cabeza para que Ljungberg batiese a Bobadilla con un cabezazo cruzado. Casi sin solución de continuidad llegó el final del partido. Con este resultado, Paraguay se ve fuera del Mundial y Suecia se ve en situación de jugarse el primer puesto del grupo en el último partido ante Inglaterra.