_
_
_
_
_

Los penaltis acaban con el sueño español en el Mundial sub 20

El equipo de Ginés Meléndez no supo definir ante una República Checa que aprovechó la única ocasión de gol de la que dispuso

Los penaltis castigaron hoy a España en los cuartos de final del Mundial sub 20 de fútbol en los que el equipo de Ginés Meléndez no mereció perder.

En un partido disputado sobre un césped impropio de un acontecimiento de esta envergadura, las futuras estrellas del fútbol español empezaron a entender que es eso de la maldición de los cuartos de final que persigue a sus mayores. Lo hicieron además siguiendo los cánones de este tipo de derrotas: España jugó mejor, pero perdió.

Hoy, más que ser España superior, fue la República Checa la inferior. No obstante, los centroeuropeos tenían una idea y fueron fieles a ella hasta el final. Había que estar encima de los jugadores que vestían de rojo e intentar dejar pasar el tiempo a la espera de una jugada de fortuna, que si llegaba probablemente iba a ser a balón parado o de penalti.

De inicio ya se vio que el terreno de juego, muy lento e irregular, iba a dificultar mucho la elaboración del juego, por lo que el choque se puso rápido por donde quería la República Checa. Es decir, un encuentro sin ritmo y muy trabado.

España intentaba buscar a sus medias puntas, sobre todo a Granero y Mata, que tenían siempre un hombre encima y alguno más en la ayuda. Además, la estrechez del campo tampoco permitió aperturas de juego ni explotar una de las principales armas de los de Ginés Meléndez en todo el campeonato: la velocidad de Capel en la banda.

Así, el choque fue transcurriendo anodino, sin que pasase apenas nada especialmente reseñable. Si acaso un par de acercamientos checos en el primer cuarto de hora y un par de jugadas españolas que crearon peligro a la meta de Petr.

La primera, a la media hora de choque, fue una larga cabalgada de Crespo desde el lateral izquierdo al área que el sevillista terminó con un fuerte disparo. Se le fue un poco el blocaje al meta checo, pero no lo suficiente como para que Adrián pudiera superarle en el rechace. La segunda ocasión roja, ya con el descanso encima, fue un lanzamiento desde un poco más allá de la frontal de Mata que salió rozando el larguero.

El segundo tiempo comenzó con la clara ocasión de Granero y la única oportunidad clara de gol checa exceptuando el tanto de Kalouda.

A partir de ahí, insistencia española sin demasiada chispa y aguante checo. Los acercamientos sobre la meta de Petr se sucedían, pero España no definía. La gran ocasión fallada por Adrián López pareció dejar claro que el marcador no quería moverse y se dio paso a la prórroga.

Prórroga, penaltis y a casa

Marcó Mata en el minuto 110, al recoger el rechace de un disparo de Bueno al palo; pero también lo había hecho Kalouda ocho minutos antes de fuerte remate en una mala salida de Adán.

Así que decidieron los penaltis. Y en ellos, los checos fueron mucho más eficaces. Con marcar cuatro, todos impecables en la ejecución, les valió. Entre medias, Marc Valiente mandó el balón al travesaño y después Petr hizo innecesario la décima pena máxima al detener el disparo, muy flojo, de Piqué.

La derrota de España, una de las grandes favoritas, posibilita una inesperada semifinal centroeuropea entre los checos y el combinado de Austria.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_