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Contador: "Lo normal es que no gane el Tour"

El ciclista español, "castigado por los esfuerzos", admite que le costará coger el ritmo en la carrera francesa

Poco antes de las siete de la tarde, Alberto Contador ha cruzado las puertas del aeropuerto de Barajas, rumbo a Nantes, rumbo al reto más duro de su año más difícil. Rodeado de ruido mediático desde que se destapara su presunto dopaje en la edición de 2010 del Tour de Francia, el arrollador campeón del Giro afronta la de 2011 sabiendo que su preparación no es la mejor para batirse con unos rivales más duros de los que le plantaron cara en Italia. "Sé que lo normal es no ganar", ha asegurado con convicción poco antes de facturar su equipaje; "para nada sería un fracaso". No obstante, el campeón, con una voluntad de hierro, tiene claro que si va, es para intentarlo. "Hay que ir motivado y pensando en luchar por la carrera, pero siendo prudente y sabiendo que desde hace 13 años nadie consigue Giro y Tour [Pantani en 1998]".

Pendiente de que el TAS tome una decisión sobre su futuro, a principios de agosto, Contador tardó mucho en saber que podría correr la ronda gala. Así que su gran objetivo del año se ciñó al Giro. Allí, mientras vencía a sus rivales etapa a etapa con una superioridad incontestable, supo que se le abrían las puertas del Tour. Tardó algunos días en confirmar su presencia. Poco tiempo para preparar semejante reto. "La principal incógnita que tengo es cómo me voy a ir recuperando de los esfuerzos. Por ejemplo, el otro día hice un buen Campeonato de España, pero estos días he estado bastante fatigado, también un poco por las altas temperaturas", ha explicado el de Pinto. "Los primeros días a lo mejor me cuesta un poco más", ha vaticinado; "estarán mejor otros corredores que vengan de participar en la Vuelta a Suiza o en la Dauphiné, típicas pruebas de preparación del Tour, pero espero ir cogiendo el golpe de pedal en la primera semana". En cualquier caso, Contador ha apuntado que se encuentra algo mejor y más descansado que en el momento en que, junto a Bjarne Riis, director del Saxo Bank, tomó la decisión de correr.

El gran rival a batir para el tres veces campeón de la ronda gala será, como el año pasado, el luxemburgués Andy Schleck, quien, según ha reconocido el propio Contador, ha podido preparar la prueba mucho mejor que él. "A nivel físico seguro que yo llego más cansado, y a nivel mental también, llego castigado de todos los esfuerzos del año". No obstante, el pinteño no ha querido descartar antes de tiempo a muchos otros corredores. "Favoritos hay muchos", ha señalado; "si tuviera que destacar a uno sería Schleck, pero hay un grupo de veteranos como Evans, Leipheimer, Vinokourov, Basso, Samuel Sánchez, Kloden, y otros jóvenes... Hay un abanico grande y tendrán sus opciones según cómo transcurra la carrera". Por su parte, muchos corredores del Tour tienen claro quién es su favorito. No han faltado los que en los últimos días, como si fuera un extraterrestre inmune a los kilómetros acumulados en las piernas, no han dudado en señalarle a él.

Alberto Contador, en el aeropuerto de Barajas antes de viajar para el Tour.
Alberto Contador, en el aeropuerto de Barajas antes de viajar para el Tour.MONDELO (EFE)

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