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"Hay que cambiar la mentalidad lo antes posible", avisa Guardiola

A 10 días del duelo contra el Madrid, el técnico del Barça asegura que hay cosas que mejorar y poco tiempo para hacerlo

El toque de atención que el Manchester United le dio al Barça en el primer partido de su gira americana (2-1) se transformó ayer en una advertencia más seria, al caer goleado el conjunto azulgrana ante el Chivas de Guadalajara, mexicano (4-1). Es solo un amistoso, pero no deja de ser la derrota más abultada que sufre el Barça desde que Pep Guardiola ocupó su banquillo en 2008. En esas circunstancias, el técnico fue categórico a la hora de sacar conclusiones: "Vamos a tener que cambiar nuestra mentalidad lo antes posible".

A 10 días del primer gran duelo de la temporada, la ida de la Supercopa ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu, Guardiola reconoció que su equipo tiene poco tiempo para trabajar y cosas que mejorar, como la defensa de los contraataques rivales y, sobre todo, la mentalidad. Aun así, como es habitual en él, dejó claro que confía en sus futbolistas y en su capacidad para solucionar las carencias. "Estamos atrasados en algunas cosas, por muchos motivos", afirmó; "pero creo tanto en estos jugadores que sé que jugaremos bien en la Liga y en las otras competiciones. La Supercopa de España y la de Europa están muy cerca y la cabeza nos tiene que ayudar a mejorar. Lo que marca la diferencia es la mentalidad de los jugadores. Necesitamos un tiempo que ahora no tenemos, pero lo solucionaremos".

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También lamentó la derrota el central Gerard Piqué, que volvía al equipo tras su ausencia contra los red devils. El zaguero, que jugó la primera mitad, en la que el Barça acabó ganando 0-1, achacó parte de la derrota al calor. "No era lo que esperábamos, pero hay que reconocer que el calor nos ha afectado", opinó. No obstante, y a pesar de reconocer que "se pueden sacar pocas cosas positivas cuando se pierde 4-1", Piqué apostó por intentar aprender de la derrota y "seguir trabajando de cara al futuro".

Si en el bando azulgrana reinaba la consternación, en el de su rival se vivían sensaciones totalmente opuestas. "He sentido una triple emoción por enfrentarme a un ídolo como Guardiola", confesó el técnico, José Luis Real; "le tengo admiración como persona, futbolista y entrenador". Y más emocionado todavía estaba el joven centrocampista Marco Fabián, autor de dos goles. "No era algo en lo que pudiera pensar, mi gran ilusión era hacer un buen partido, disfrutar ante los grandes jugadores del Barcelona e intentar que como equipo pudiésemos ganar. Ha sido un gran sueño para mí", celebró.

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