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Ansiosos y precipitados

El entrenador del Athletic, Marcelo Bielsa, manifestó que su equipo desarrolló un juego suficiente para "merecer un resultado diferente" al 0-1 encajado frente al Granada, aunque reconoció que en la segunda parte pecó de "ansiedad" y "precipitación" para, al menos, nivelar el marcador.

"El equipo ha defendido bien y en líneas generales no sufrió. En la primera parte tuvimos tres ocasiones, insuficientes para 45 minutos de posesión casi exclusiva, y en la segunda tuvimos la misma posesión pero el equipo fue ansioso y precipitado", reconoció el técnico argentino.

"En los dos tiempos nos faltó que esos ataques tuvieran un punto más de creatividad y de profundidad. Crecíamos bien por los costados pero los centros no se encontraron con el destinatario", añadió Bielsa antes de explicar su punto de vista sobre el rifirrafe entre ambos banquillos en la segunda parte.

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El rosarino señaló que entendía que a sus jugadores les "correspondía" devolver la pelota cuando sus rivales la han tirado fuera para atender a futbolistas aparentemente lesionados, si bien ha asegurado "entender" el comportamiento de sus jugadores. "Si bien el rival no hizo nada que no fuera legítimo y el árbitro es quien tiene que evaluarlo, evidentemente, había un clima especulativo que hace que un futbolista confunda y no resuelva dentro de un margen de deportividad. Sin que signifique un reproche, había un clima enrarecido por este tipo de acciones", afirmó.

Su oponente en el otro banquillo, Fabri, pidió disculpas por esa circunstancia. "Hay momentos en los que uno está muy caliente, pero era la tercera o cuarta vez que el equipo tiraba la pelota fuera y el Athletic no la devolvía. Me consta que Bielsa pedía que tiraran fuera el balón, pero uno se pone un poco nervioso y pido disculpas por ello", explicó.

El entrenador del Granada, se mostró "muy contento" de la victoria conseguida por su equipo en San Mamés, aunque reconoció que tuvieron "un poco más de suerte" que el Athletic.

"Para mí es una satisfacción por los jugadores. Somos un equipo humilde que hace muchos años que no estaba en Primera y vamos rompiendo estadísticas. Lo importante es que conseguimos ser un equipo, tener personalidad y conseguir puntos para mantener la categoría, que es a lo que este equipo aspira", explicó.

El técnico gallego ha recalcado que el 0-1 final ha respondido al "mucho mérito" que ha tenido el Granada frente a un rival que "ha hecho un gran partido". "Hemos sabido tapar los espacios, no les hemos acelerado el juego y hemos defendido con rigor".

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