“Lo de Kaká ha sido espectacular”

A la pérdida de su único futbolista irreemplazable, el que más minutos ha jugado tras Casillas, el técnico del Madrid, José Mourinho, respondió diciendo que no le echará de menos porque le sobra plantilla para cualquier contingencia. Fueron las palabras justas para evitar el derrotismo ante las dificultades que sobrevendrán. “Xabi [Alonso] no es un problema”, dijo sobre la sanción del mediocentro, que no podrá jugar el próximo partido. “Es un gran jugador, importante para nosotros. Pero no vamos llorar por que Xabi no juegue la ida de los cuartos de final. Estaremos bien. No habrá problemas para que juegue Lass, Khedira o... Sahin, ahora que estamos intentando darle no minutos, porque no ha sido posible, pero sí más ánimo. ¡No vamos a estar llorando! Que Xabi descanse. Así jugará todos los partidos de la Liga y descansará en la Champions”.

A Mourinho le pareció que el Madrid dominó ampliamente al CSKA, pero Casillas se vio mano a mano con Doumbia en tres ocasiones. “Ellos han tenido una buena oportunidad al inicio del partido y a partir de ahí siempre lo hemos controlado”, dijo; “Pepe y Ramos siempre han jugado en la línea del centro del campo. Presionábamos cada balón que perdíamos. Ellos no han podido llegar. No ha sido un partido espectacular, pero lo jugamos con gran madurez. Después, con el 3-0, todos pensaron que estaba acabado y el equipo se ha parado un poco. La gente ha dejado de trabajar al mismo nivel y ellos han marcado el 3-1. Los últimos minutos estuvimos un poquito preocupaditos. Dejamos de apretar, de juntar las líneas y de estar compactos”.

Fue novedoso escuchar a Mourinho elogiar a Kaká, un futbolista para el que no reservó palabras amables en los últimos meses. “Kaká ha hecho un partido espectacular”, dijo; “ha hecho los mejores años de su carrera en Italia y nunca ha trabajado tanto como ahora. Trabaja fantástico para el equipo. Es normal que llegue al minuto 70 y que las piernas le fallen en alguna acción. Pero en el primer tiempo ha sido desbordante. Las mejores ocasiones las han creado Özil y él. Estoy contentísimo con él”.

“Iré con todo en cada partido”, avisó Mourinho sobre la Liga; “pero es normal que, de partido en partido, haga un poco de rotaciones. Sería normal que contra el Málaga dos o tres de los que jugaron frente al CSKA cedan su lugar a dos o tres que no jugaron. Descansarán. Pero la Liga continúa siendo para mí la competición más importante. Para la autoestima de un entrenador y de un jugador, lo más importante es un campeonato a pesar de que la Champions es El Dorado”.

Mourinho querría 80.000 ultrasur colmando el Bernabéu en cada partido. El técnico siente un afecto especial por estos fanáticos porque son los que le entonan cánticos de apoyo cada vez que le ven. Sin embargo, la mayoría de la hinchada no suele parecerse a esos incondicionales. Es gente severa, de una solemnidad distante, y no repara en reproches aunque el destinatario sea Mourinho. El portugués lleva mal esta frialdad. Ayer quiso agradecer el apoyo a Ultrasur tras el partido contra el CSKA dedicándoles un aplauso mientras los muchachos hondeaban sus banderas con hachas de doble filo, símbolo ancestral del sentimiento de superioridad racial celta.

“No tengo por qué estar contento ni descontento con la afición”, dijo Mourinho al oír que le preguntaban por su opinión sobre la afición. “Hay muchos clubes que tienen sus estadios vacíos. No meten 80.000 personas. Y eso hay que agradecerlo. Luego están las cuestiones culturales: si estás más o menos con tu equipo, si apoyas con más o menos entusiasmo… Yo no soy nadie para criticar. Además, son ellos los que me pagan. Yo no critico el apoyo de la grada. Pedir... he pedido, y continuaré pidiendo. Pero ni criticaré ni comentaré nada. Hemos sentido claramente que nos han pitado alguna vez y que un grupito de detrás de la portería nos ha apoyado siempre. Cuando sientes ese apoyo, es bonito y educado agradecerlo”.