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El Athletic se multiplica por dos

Casi todos los futbolistas rojiblancos han jugado con Bielsa en posiciones distintas

Marcelo Bielsa, dando indicaciónes durante el entrenamiento
Marcelo Bielsa, dando indicaciónes durante el entrenamientoLUIS TEJIDO (EFE)

Sabido es que Marcelo Bielsa tiene una alineación titular que todo el mundo se sabe de carrerilla y que por detrás tiene cuatro suplentes que adquieren su protagonismo cuando las lesiones, las sanciones o el desarrollo del partido lo exigen. No hay ningún misterio en torno al Athletic, salvo algún que otro ataque de entrenador extemporáneo. Bielsa apenas utiliza 15 jugadores, pero no es menos cierto que todos menos tres tienen asignados al menos dos puestos, multiplicando por dos la potencialidad táctica del equipo.

Si se descuenta a Iraizoz, portero, Iraola y Llorente, el resto de futbolistas han ido ocupando hasta ahora al menos dos posiciones distintas. En defensa, Javi Martínez ha sido central, centrocampista y lateral derecho ocasional; Amorebieta, el otro central titular, ha sido lateral izquierdo; y Aurtenetxe, el lateral izquierdo, también ha jugado como central, el puesto en el que Bielsa, a su llegada a Bilbao, le adivinaba más posibilidades. En el centro del campo, Iturraspe también ha sido central cuando el partido lo ha requerido; Herrera media punta; y De Marcos, lateral de ambos lados. En punta, Susaeta y Muniain han alternado las bandas con la posición de delantero centro o media punta.

Incluso los suplentes se han mostrado polivalentes: Toquero, por dentro y por la banda; Íñigo Pérez, mediocampista, lateral y extremo; San José, central y lateral; e Ibai Gómez, exterior y delantero.

Casi todo el mundo en el Athletic tiene dos posiciones en el zurrón. Una alineación que se multiplica por dos para hacer frente a tres competiciones, la Liga, la Copa, y la Liga Europa, disputadas de forma frenética, a ritmo elevado y que en el fondo refleja el espíritu dinámico que Bielsa quiere otorgar a su equipo. De ahí que el técnico argentino varíe notablemente las posibilidades de sus jugadores en el transcurso de los partidos, aunque tácticamente apenas sean dos las variantes que utiliza. Cuando a su esquema básico (4-3-3) le falta profundidad, el recurso a los tres centrales le permite, con unos u otros futbolistas, adelantar a los laterales para buscar nuevas vías de penetración.

Pese a la ventaja de la ida (2-4), los locales temen a Raúl y al irascible Huntelaar

El manual es aparentemente sencillo. Siempre se parte del mismo lugar, los 11 de siempre, y las modificaciones están mecanizadas, aunque el resultado no sea siempre satisfactorio. Ante el Schalke 04, hoy, no variará el guion. La ventaja (2-4 en la ida) no es una salvaguarda y Bielsa opondrá al conjunto de Raúl a su equipo futbolístico habitual. El técnico holandés del Schalke, Huub Stevens puede hacer sus planes sin esperar sorpresas. En San Mamés se encontrará a los mismos que se encontró en el Veltins Arena hace una semana.

El Athletic sin duda teme a Raúl, su habitual killer que suele acudir con puntualidad a las citas con el gol frente al conjunto rojiblanco, y al irascible Huntelaar, que en Gelsenkirchen pasó poco menos que desapercibido.

A pesar de la fecha y el resultado, San Mamés se llenará una vez más. Apenas se han puesto a la venta 2.000 entradas, una vez que los socios han retirado las que les correspondían y descontadas las enviadas al club alemán, que ya protestó por el alto precio de las mismas, 90 euros. Una pancarta de los seguidores del Schalke lo denunciaba en el partido de ida: “90 euros es a euro el minuto. El fútbol no es sexo telefónico”. Es que la política en Alemania es la contraria que en España: bajar el precio de las entradas para que se llenen los estadios. La Bundesliga es hoy por hoy la competición con mayor número de espectadores. Pero el problema es que San Mamés se llena siempre.

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