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BALONCESTO | FINAL DE LA LIGA ENDESA

Asalto final bajo el efecto Djordjevic

Barcelona y Madrid deciden hoy el título en el quinto partido en el Palau, como pasó en el 2000 con la victoria blanca

Faustino Sáez
Djordjevic, junto a Nacho Rodríguez en la final del 2000
Djordjevic, junto a Nacho Rodríguez en la final del 2000CORDON PRESS

El quinto y definitivo asalto decidirá esta noche (19.00, TVE-1) el campeón de una de las batallas más reñidas de la historia. La ACB no vivía un desenlace semejante desde 2005, cuando el triple de Herreros selló el 2-3 del Madrid ante el Caja Laboral en un final de película en el Buesa Arena de Vitoria. Para encontrar un pulso parecido entre los dos grandes del baloncesto español hay que remontarse todavía más atrás. Fue en el año 2000 y también salió victorioso el Madrid en el quinto partido disputado en el Palau Blaugrana. Para el álbum de recuerdos de la Liga queda la imagen de Djorjevic celebrando brazos en alto la victoria ante los reproches y empujones de Nacho Rodríguez. “Las finales entre los grandes siempre tienen un encanto especial y esta está siendo apasionante. Tras el triunfo del Madrid en la Copa hay cuentas pendientes. Los de Laso tienen a muchos jugadores que llegan en un estado óptimo de forma, como Llull, Sergio Rodríguez, Velickovic, Carroll o Felipe. Y el Barça tiene a Navarro, siempre Navarro. Él tiene la clave de todo lo bueno y lo malo que le pase a su equipo”, resume Djordjevic,el base que vistió la camiseta del Barcelona entre 1996 y 1999 y la del Madrid entre 1999 y 2002.

“En esta serie ha habido de todo: triples imposibles, remontadas, palizas…Ya no vale ningún pronóstico. Ahora tenemos el título ahí, a un paso, pero sabemos cómo se las gasta el Madrid y no será fácil. Somos los dos mejores equipos y hemos demostrado que podemos ganar en cancha rival. Ojala que no ocurra como en el año 2000”, contaba Navarro, al término del cuarto partido después de que su equipo se levantara de la lona tras el k.o. del Madrid en el tercer round de la final. Sorteada la afrenta de la derrota por 26 puntos, el Barça recuperaba la ventaja de campo y con ella la condición de favorito en una serie de altos vuelos. Pero el Madrid ha demostrado conocer la fórmula para triunfar contracorriente. Desde que conquistara la Liga 1992-1993 en el antiguo Palacio de los Deportes en el quinto partido de la final ante el Joventut, el conjunto blanco ha sellado todos sus títulos ligueros en territorio enemigo. En los últimos 19 años los blancos han sumado cuatro ligas a su palmarés. Tres logradas en Barcelona (1994, 2000 y 2007) y una en Vitoria (en 2005 con el triple de Herreros). De la última conquista en territorio azulgrana en 2007, con Joan Plaza como técnico, tan solo Reyes y Llull permanecen en la plantilla blanca.

En el bando madridista, solo el capitán madridista y Sergio Rodríguez han disputado alguna vez el quinto duelo de la final. En los azulgrana, Navarro y Sada repetirán la experiencia de 2004 cuando derrotaron al Estudiantes. Un duelo con muchas cuentas pendientes. Territorio conocido para Pete Mickeal,que ha disputado las últimas cinco finales de liga (dos con el TAU y tres con el Barça). “Esta es diferente, ha sido un año durísimo y en este playoff han pasado muchísimas cosas y no todas buenas para nosotros. Ahora estamos a 40 minutos de tocar otra copa”. Los de Xavi Pascual no cierran en blanco una temporada desde 2008 y a la espera del desenlace de la Liga ya suman ocho títulos en los últimos cuatro años. El Madrid aspira a un doblete que no alcanza desde hace 19 años. Será el noveno enfrentamiento entre blancos y azulgrana en lo que va de curso. El balance no puede estar más igualado con cuatro victorias para cada equipo. Será la 17ª liga azulgrana o la 31ª de los blancos.

En el primer capítulo, Marcelinho Huertas dinamitó el duelo sobre la bocina con un triple estratosférico que tumbó a un meritorio Madrid que llegó a ir venciendo por 17 puntos. En el segundo, los blancos se rearmaron y fueron ellos los que remontaron una desventaja de nueve puntos en los últimos minutos. Para el tercero quedó la exhibición madridista con su excelsa victoria por 26 puntos, la segunda mayor diferencia de la historia de las finales ligueras. En el cuarto, el Barça apretó los dientes y liderado por Lorbek (24 puntos: 73 puntos entre los cuatro partidos disputados, superando los 20 puntos en el 2º y en el 4º) se rearmó a lo grande. “El nivel de los dos equipos es muy parecido, hemos demostrado que podemos ganar allí y ellos lo mismo. El que esté más fuerte mentalmente será el que se lleve la victoria”, apunta Felipe Reyes. No va más. La liga en un partido.

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Sobre la firma

Faustino Sáez
Es redactor de deportes del diario EL PAÍS, especializado en baloncesto. Además del seguimiento de ACB y Euroliga, ha cubierto in situ Copas, Final Four, Europeos y Mundiales con las selecciones masculina y femenina. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS.

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