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“Este equipo nunca tira la toalla”

Pau Gasol y Scariolo enfatizan el carácter de los jugadores frente a las adversidades

R. Á.
Pau Gasol abraza a Jose Calderón tras el partido.
Pau Gasol abraza a Jose Calderón tras el partido.MIKE SEGAR (REUTERS)

“¡Vamos a jugar relajados, a disfrutar, que somos mejores!” Esas fueron algunas de las frases que se gritaron con furia en el interior del vestuario español en el North Greenwich Arena de Londres durante la tensa media parte de su semifinal ante Rusia, según desveló Pau Gasol. No había funcionado casi nada o nada durante un calamitoso primer tiempo que concluyó con un 20-31 para Rusia. “Entonces nos dijimos que teníamos que jugar con más soltura. Y dio resultado. Es maravilloso poder vivir este momento, formar parte de este grupo de jugadores. Nunca abandonamos, nunca tiramos la toalla”.

Calderón, que en medio de la euforia final se dio cuenta de que los príncipes de Asturias bajaban del palco al borde de la cancha y avisó a sus compañeros para que acudieran allí, se mostró eufórico. “Es alucinante. Este grupo no deja de sorprenderme. Con estos tíos puedes ir a cualquier lado. Volvemos a estar arriba, tras otros cuatro años, jugando siempre las finales, estando arriba, pocos equipos hay como el nuestro”. El base extremeño explicó que, tras el descanso, fue muy importante que empezaran a jugar con más paciencia. “Y también que Marc y Pau han hecho una gran labor, sacando balones fuera en buenas condiciones para que pudiéramos encontrar mejores posiciones exteriores de tiro”.

Pau, el talismán

Pau Gasol es garantía de final. En los últimos seis torneos internacionales en los que el pívot español ha entrado en una convocatoria de la selección, esta ha llegado hasta el último partido. La racha se inició en el Mundial de 2006, en Japón, donde el equipo que dirigía Pepu Hernández se alzó con el oro, aunque el pívot de Sant Boi no jugó el partido decisivo al estar lesionado. El resto de títulos en los que han sido clave fueron las platas del Europeo de Madrid, en 2007 y de los Juegos de Pekín, en 2008, y en el oro de los Europeos de 2009 y 2011.

Sergio Scariolo, el seleccionador, dio por logrado el objetivo del equipo, conseguir una medalla. “Pero nuestra competitividad nos va a llevar seguro a competir al máximo en la final. Haremos lo que esté en nuestras manos, aunque esas manos, a causa de los condicionantes físicos, no sean las de otros años. Pero el equipo disfrutará compitiendo”.

El seleccionador incidió en lo mermado físicamente que compite el equipo en Londres. “Este año tiene mucho mérito haber llegado hasta aquí”, subrayó; “por las lesiones y golpes que han sufrido muchos jugadores y las decisiones arriesgadas que hemos tenido que adoptar. Eso habla muy bien del carácter y de la personalidad de los jugadores. Es bonito que a este grupo se le exija el máximo de lo máximo, con independencia de que no esté Ricky o de que otra vez no haya estado Pau, o de que uno, o dos, o tres, estén lesionados. Pero se le exige la perfección, y eso es de héroes, no de seres humanos”.

El seleccionador español puso a sus jugadores como ejemplo de valores. “Es un equipo modélico”, afirmó. “Son jugadores que saben poner el ego a un lado, en bien del equipo, que saben mantener la disciplina, el respeto al entrenador, que creen en el grupo, que no bajan los brazos. Por eso, por ejemplo, los que estamos dentro del grupo nos dimos cuenta de que la final del Eurobasket de Lituania empezamos a ganarla por la forma en que asimilamos la derrota en el Mundial de Turquía”.

El Príncipe Felipe y doña Letizia felicitan a Pau Gasol.
El Príncipe Felipe y doña Letizia felicitan a Pau Gasol.BRIAN SNYDER (REUTERS)

David Blatt, el seleccionador de Rusia, encajó la derrota con deportividad. “La clave de la victoria de España fue la mejora de su defensa en la segunda parte, algo a lo que no supimos reaccionar. Fuimos mejores en el perímetro y les dejamos en un porcentaje de tiros de dos muy bajo, pero los triples les entraron en la segunda parte y les dimos alas y adquirieron confianza”, subrayó. “Meter 47 puntos en la segunda parte son muchos puntos. Les felicito de corazón”.

Blatt, estadounidense con pasaporte israelí, fue preguntado por la posibilidad de haberse repetido la polémica final de 1972 en Múnich entre la URSS y Estados Unidos, ganada por el equipo soviético tras una extraña decisión de la mesa de anotadores que hizo repetir los últimos segundos cuando el partido ya había concluido.

“Eso es cosa del pasado. Y aquel partido quizá no fue como dicen que fue. El deporte ha cambiado mucho. Allí fue la URSS y ahora es Rusia. Dos equipos amigos. Pero para mí el recuerdo es la masacre de los atletas israelíes”, concluyó.

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Sobre la firma

R. Á.
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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