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“Es un fracaso institucional”

Urrutia lamenta el deseo de Llorente de irse del Athletic y afirma que no le venderá por menos de su cláusula, 36 millones

Llorente celebra un gol en el encuentro de la Liga de Europa frente al BSC
Llorente celebra un gol en el encuentro de la Liga de Europa frente al BSCReuters

A Fernando Llorente puede esperarle una temporada complicada en el Athletic. Tras más de un año de negociaciones para renovar su contrato, que concluye en junio de 2013, el futbolista comunicó hace 10 días al club bilbaíno que no quiere continuar en él, según confirmó ayer su presidente, Josu Urrutia. Sin embargo, pese a que el delantero podrá irse al final de la próxima temporada sin que el Athletic cobre un euro, Urrutia aseguró que no piensa vender a Llorente por un precio inferior a su cláusula de rescisión, que es de 36 millones de euros más IVA.

Urrutia justificó esta decisión por la necesidad de “ser coherentes” con la filosofía del club. Para el dirigente, negociar la venta del internacional y obtener ahora “12, 14 o 16 millones” puede suponer un precedente que ponga en riesgo la particular política deportiva de la entidad. El Athletic prefiere dejar de ganar ahora ese dinero y mandar un aviso a otros futbolistas que se pudieran plantear imitar al riojano, de 27 años.

Pese a todo, la determinación de irse del jugador franquicia del club es, según Urrutia, “un golpe en la línea de flotación” del Athletic: “Que alguien que lleva 17 años aquí se quiera ir significa que algo no se ha hecho bien. Es un fracaso institucional”.

El presidente rojiblanco confirmó que Llorente alegó razones deportivas para tomar esa decisión

El presidente rojiblanco confirmó que Llorente alegó razones deportivas para tomar esa decisión pese a que hasta ahora parecía que las diferencias eran económicas. Había trascendido que el club le ofrecía 4,5 millones de euros netos al año y que él pedía 5,5 y Urrutia ratificó que las cifras se han movido “en esa horquilla”.

Así las cosas, y dado que parece poco probable que algún equipo esté dispuesto a abonar la claúsula de Llorente en estas condiciones, surgen varias dudas. La primera es si el delantero jugará habitualmente esta campaña, en caso de quedarse. Urrutia aseguró que dependerá en exclusiva del entrenador, Marcelo Bielsa. “Espero de Llorente el mismo rendimiento que hasta ahora”, dijo.

La segunda, si conviene alinear a un futbolista que tendrá que soportar la reprobación de la grada. Si una parte del público de San Mamés le silbó hace diez días ante el Slaven por su actitud en la negociación, la situación puede reproducirse. La última, si ambos se mantendrán firmes en sus posiciones hasta el final o si habrá un nuevo capítulo en esta historia.

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