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Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

El espíritu del genial Cesc

Ramon Besa
Cesc trata de irse de Bergantiños.
Cesc trata de irse de Bergantiños.Lalo R. Villar (AP)

Anoche no hubo tiempo ni para pestañear en Riazor. El vértigo se apoderó del partido por decisión sobre todo de Cesc Fàbregas, cuya determinación e influencia en el juego recordó a sus mejores tiempos en el Arsenal. La fiebre del 4 es contagiosa y los azulgrana actuaron con una verticalidad asombrosa, como si cada jugada tuviera que acabar con un remate a la portería de Aranzubia, de la misma manera que cada llegada del Deportivo finalizaba con un tiro al marco de Valdés, especialmente vulnerable, por bajo y por alto, muy parado, poco rápido.

Cesc fue decisivo en los cuatro goles del Barça. Asistió con precisión a Jordi Alba en el 0-1; generó el espacio necesario para la conducción de Messi, quien habilitó a Tello, en el 0-2. Taconeó para el 10 en el 0-3; y filtró un pase decisivo también para Messi en el 2-4. El protagonismo de Cesc, absoluto con independencia del momento del partido y del electrónico, aumentó ayer por la suplencia de Xavi, un futbolista decisivo para dar pausa al equipo, masticar la jugada, controlar el fútbol.

Ocurre que al centrocampista solo le interesa la posesión del cuero para dañar al adversario y no para entretener el juego

Ocurre que a Cesc solo le interesa la posesión del cuero para dañar al adversario y no para entretener el juego. Al volante le puede el espíritu box to box [de área a área], la intensidad y vitalidad que aprendió como capitán gunner, una fórmula que es del agrado de Messi. La sociedad Cesc-Messi fue tan profunda como fructífera en ataque para el Barça.

El juego directo propuesto por la pareja azulgrana propicia, por el contrario, la pérdida reiterada del balón y por tanto las rápidas transiciones del adversario, ayer afortunado por la sorprendente colaboración del guardameta azulgrana y favorecido también de forma puntual por el colegiado. Tito Vilanova no tuvo ningún reparo en sustituir a Cesc. La majestuosa actuación del volante catalán no había servido para resolver el partido: 3-4.

Disparado en ataque, habían vuelto a fallar los mecanismos defensivos del Barça y el técnico optó por cambiar el guion del partido después de la expulsión de Mascherano. Xavi salió a escena para gobernar el choque con la ayuda de Iniesta. Los azulgrana conservaron el cuero y maduraron el encuentro hasta dormir al Deportivo. El vínculo con el gol, sin embargo, continuó siendo el mismo. Las diferencias las marca siempre Messi. El argentino se asocia por igual con Xavi que con Cesc.

El Barça ha perdido fluidez a cambio de ganar pegada. Hoy es un equipo que va a rachas, deslumbrante al inicio o al final, descompuesto a veces en el intermedio

También las concesiones son las mismas en cada partido sin importar que defiendan Song, Mascherano, Adriano, Alves o Montoya. El Barcelona no encuentra la manera de cerrar los partidos con independencia del rival, del campo y del torneo, porque toma goles con una facilidad pasmosa (11), a veces en su propia portería, como anoche pasó con Jordi Alba.

Juegue al espacio, como ocurrió con Cesc, o al pie como es costumbre con Xavi, a los azulgrana les falta continuidad en su fútbol. Han perdido fluidez a cambio de ganar pegada. Hoy es un equipo que va a rachas, deslumbrante al inicio o al final, descompuesto a veces en el intermedio, como si se hubiera perdido en la cancha. Ha menguado el juego de posición y ha aumentado el arrebato porque parece concebido solo para atacar. El cambio se explica no solo por la presencia de Cesc o Xavi, sino seguramente también por las ausencias de Piqué y Puyol y por el nuevo papel de Messi. Aunque pueda jugar diferente, los partidos del Barça los resuelve Messi.

El partido de ayer fue el compendio de una temporada por la cantidad de sucesos que se acumularon en Riazor. El espíritu de Cesc resultó una bendición para el espectador.

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Sobre la firma

Ramon Besa
Redactor jefe de deportes en Barcelona. Licenciado en periodismo, doctor honoris causa por la Universitat de Vic y profesor de Blanquerna. Colaborador de la Cadena Ser y de Catalunya Ràdio. Anteriormente trabajó en El 9 Nou y el diari Avui. Medalla de bronce al mérito deportivo junto con José Sámano en 2013. Premio Vázquez Montalbán.

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