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Millones por vacaciones

Los tenistas participan en lucrativas exhibiciones en América y Asia después de conseguir dos semanas más de parón para descansar y preparar la temporada de 2013

Juan José Mateo
Bebeto y Djokovic se abrazan durante una exhibición en Brasil.
Bebeto y Djokovic se abrazan durante una exhibición en Brasil. REUTERS (RICARDO MORAES)

Es un invierno distinto a todos. Tras años reclamando más tiempo de descanso para paliar los efectos de un calendario extenuante y lleno de obligaciones, con paradas en Australia, África, Europa y América, los tenistas disfrutan en 2012 de dos semanas más de postemporada, para un total de siete. Por fin tienen tiempo de curar sus heridas. Por fin hay horas para que se entrenen. Sin embargo, esas semanas tan deseadas se han llenado también con exhibiciones por las cuatro esquinas del planeta. Roger Federer pidió un millón de dólares [casi 800.000 euros] por cada una de las cinco que le ofrecieron en Sudamérica, cifra parecida a la que podrían sumar de así quererlo Novak Djokovic —que en noviembre ya jugó ante 10.000 espectadores en Río (Brasil) y con Guga Kuerten—, Andy Murray o Rafael Nadal, según fuentes conocedoras de los acuerdos. Los tenistas que van del número 5 al 10 tienen un caché de hasta 150.000 dólares. Aquellos que están fuera de esa elite, como Nico Almagro o Fernando Verdasco, pueden sumar entre 50.000 y 75.000. Para los mejores, dicen los críticos ahora que se negocia un nuevo calendario para 2014, ese ha sido el efecto del acuerdo que rige 2012 y 2013: más descanso y más dinero.

La belleza de esto es que podemos hacer lo que nos dé la gana Roger Federer

“No creo que jugar exhibiciones vaya contra el espíritu de haber prolongado la postemporada para cuidar de nuestra salud”, valoró a final de temporada Federer, una voz de la máxima influencia en las negociaciones por sus títulos y su cargo como presidente del Consejo de Jugadores. “Esa es la belleza de este período, que puedes hacer lo que te salga de las narices. Eso está bien, en lugar de tener un espacio de tiempo limitado en el que casi no puedes lograr el suficiente descanso. Si los jugadores queremos disputar esos partidos, sean donde sean, es nuestra elección. Si quiero descansar durante seis semanas, no hacer nada, también puedo hacerlo, lo que no era posible en el pasado”, prosiguió sobre las decenas de amistosos programados, que se desarrollan especialmente en Sudamérica y Asia, donde el japonés Nishikori también puede llegar a ganar un millón. “Es responsabilidad de los jugadores no cometer errores, pero por lo menos, ahora, es su elección. Sé que voy a jugar exhibiciones, pero mi situación es única. Nunca he ido a Sudamérica como profesional. Para mí, será el inicio de la pretemporada, y sobre todo algo muy divertido. Además, no voy a jugar otras exhibiciones después de esas. Básicamente, me daré el suficiente espacio [para prepararse]. Hay que asegurarse de que organizas el calendario correctamente”, cerró el suizo, que este curso no participará en la exhibición de Abu Dabi, del 27 al 29 de diciembre, donde Rafael Nadal querría preparar su vuelta a la competición tras seis meses lesionado con una rotura parcial de ligamento y una hoffitis en la rodilla izquierda. El entorno técnico del número cuatro juzga “ideal” participar en esa cita, en la que ya se dejaba ver antes del cambio del calendario, para coger ritmo tras tanto tiempo sin jugar.

Según fuentes conocedoras de las negociaciones para 2012 y 2013, hubo directores de torneos que solicitaron que se prohibieran las exhibiciones durante las semanas de descanso. Recordaron que a ellos se les exige entregar con antelación a la ATP los premios que reciben los jugadores; máximas calidades en pistas, estadios y alojamiento; requisitos que no tienen que afrontar los organizadores de las exhibiciones. “La ATP, además”, analizan fuentes perfectamente conocedoras de lo que implica montar un masters 1.000; “no hace demasiado para proteger a los torneos, ni consigue de ninguna forma que los jugadores cumplan sus compromisos”.

El suizo, Djokovic, Murray y Nadal son los únicos que aspirán al millón por partido

“En 2010, cuando se estaba considerando alargar la postemporada, se valoraron numerosas opciones”, le explica a este diario Brad Drewett, el presidente de la ATP. “El resultado fue acortar la temporada en dos semanas, sin ninguna limitación respecto a las exhibiciones”, aclara. “La decisión de acortar el calendario se tomó en respuesta directa a que los jugadores, especialmente los jugadores top, quisieran un mayor tiempo de descanso. Cada jugador comprende el equilibrio que necesita entre descansar, entrenarse y jugar partidos. Depende de cada uno cómo organizar su propio programa de postemporada, y creo que ellos son los que mejor saben cómo aprovechar en su beneficio individual que sea más larga”.

La ATP espera anunciar el calendario de 2014 al final de enero de 2013. Hay voces que plantean de nuevo la posibilidad de prohibir o limitar las exhibiciones. “Los jugadores siempre han reivindicado que haya que aligerar el calendario, acortarlo para que puedan descansar y recuperarse para llegar en las mejores condiciones a los torneos”, explican fuentes conocedoras de las negociaciones. “Los torneos siempre han sabido que en realidad lo que quieren es tener más tiempo para jugar exhibiciones como se está viendo estas semanas”, añaden.

Nunca vivió el tenis un periodo de tanto esplendor: Djokovic, Federer, Murray y Nadal coinciden en la misma época, protagonizando cada semana un nuevo capítulo épico. La expectación es máxima y universal. Se ve en cada esquina del planeta durante noviembre y diciembre: cada semana, una exhibición.

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Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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