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Ronaldinho no vuelve ni de penalti

Brasil falla ante una Inglaterra liderada por Wilshere Higuaín marca dos goles a Suecia Cristiano no fue suficiente ante Ecuador

Ronaldinho, tras fallar el penalti ante Hart, no llega a rematar.
Ronaldinho, tras fallar el penalti ante Hart, no llega a rematar.Clive Brunskill (Getty)

Dos años después volvía Ronaldinho a la canarinha. Por la nostalgia del seleccionador, Luiz Felipe Scolari. Fueron campeones del mundo en Corea y Japón 2002. Eran otros tiempos: Scolari, un entrenador de éxito; Ronaldinho, el mejor futbolista del planeta. No se parecen en nada. Tras la destitución en noviembre de Mano Menezes, Felipao regresa a una selección desnortada y sin juego, en permanente búsqueda de una identidad perdida. A expensas de una Inglaterra liderada por el potente faro de Wilshere (2-1), ese mediocentro pequeño y zurdo, dinámico y de muy buen gusto.

Argentina superó con claridad a Suecia (2-3). Higuaín marcó dos veces. El segundo de la albiceleste fue una maravillosa picadita con la izquierda, de primeras, del Kun Agüero. Venía de un pase de Di María, que también sirvió al Pipita en el primer tanto. Messi se quedó con las ganas: tras superar con un globo al portero sueco, este sacó el balón desde la misma línea de gol.

En París, Alemania remontó ante Francia (1-2) con goles de Müller y Khedira tras haberse avanzado los bleus por medio de Valbuena. El rival de España en la clasificación para el Mundial de Brasil se quedó con las ganas de superar a su histórico rival.

Portugal tampoco tuvo su mejor noche en el partido frente a Ecuador. La selección lusa cayó (2-3) a pesar del tanto de su estrella, Cristiano Ronaldo, que acudía al encuentro con algunas molestias físicas. El autogol de Joao Pererira evaporó la reacción de los hombres de Paulo Bento, que consiguieron dar la vuelta al tanto inicial de Valencia, gracias a CR7 y a Nani. Sin embargo, un tanto de Felipe Caicedo decantó el partido de lado de la "Tricolor".

En Wembley, ante 87.453 espectadores y en el 150 aniversario de la federación inglesa, Ronaldinho, de 32 años, quiso volver pero no pudo. Su cuerpo estaba allí, en Londres, con el número 10, vagando por el césped; su espíritu futbolístico quedó sepultado en algún lugar de Barcelona. No consigue resucitarlo. Por mucho que pidiera lanzar el penalti en el minuto 18: lo detuvo Joe Hart en dos tiempos. Sin ese golpe de moral, Ronaldinho ya no levantó la cabeza ni logró asociarse con Neymar ni Luis Fabiano, un trío sin ninguna química. Al joven Neymar, con el pelo teñido de rubio, Wembley no le traía buenos recuerdos: allí perdió hace unos meses la final de los Juegos Olímpicos ante México. También con una actuación muy decepcionante. Lo mismo que Lucas Moura, del PSG, en la segunda parte. En su debut, Scolari no dio con la tecla.

Hollande y Merke, durante el partido entre Francia y Alemania
Hollande y Merke, durante el partido entre Francia y AlemaniaPATRICK KOVARIK (AFP)

Inglaterra, por el contrario, se encontró mucho más cómoda a partir de claridad en las triangulaciones vertiginosas de Wilshere, bienvenido a la selección después de casi dos años ausente por lesión. El joven mediocentro del Arsenal mezcló con Gerrard, más retrasado, y con Cleverley, beneficiados los tres por la velocidad de Walcott y Welbeck por las orillas. De las combinaciones se aprovechó Rooney, en su gol número 33 con la selección inglesa: un disparo raso desde fuera del área. Empató Fred, en el arranque del segundo periodo, tras un error defensivo de Cahill. Pero Lampard puso las cosas en su sitio poco después con un disparo enroscado que golpeó en la parte interior del poste.

En el Amsterdam Arena, Holanda empató con Italia (1-1). Jeremain Lens, el delantero del PSV Eindhoven, marcó un gol de bandera tras burlar con un sombrero a un zaguero azzurro y empalmar a gol ante el asombro de Buffon, muy exigido en la primera parte. La Holanda de Van Gaal presentó un equipo jovencísimo, capitaneado por Strootman, mediocentro del PSV, a punto de cumplir los 23 años. En Italia, el más punzante resultó el lateral Abate, desbordando a menudo por el extremo derecho. Empató Verratti, el medio del PSG, en el minuto 91, pero la pareja Balotelli-El Sharaawy no convenció al seleccionador azzurro, Cesare Prandelli.

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