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Un líder absoluto y austero

El Elche rentabiliza al máximo sus goles para regresar a Primera 24 años después tras una temporada de récord con Escribá al mando

Jugadores y aficionados del Elche celebran en su hotel de concentración, en Almería, el ascenso.
Jugadores y aficionados del Elche celebran en su hotel de concentración, en Almería, el ascenso.Carlos Barba (EFE)

La aspiración al ascenso del Elche, quedó formalizada desde la primera jornada en la que se aupó al liderato, ratificada con cinco victorias consecutivas en los cinco primeros encuentros. El Elche se mantuvo invicto 20 jornadas alcanzando, con 49 puntos, el récord de puntuación de Segunda División en una primera vuelta que concluyó aventando en 11 puntos a sus perseguidores Girona, Almería y Alcorcón. A pesar de la distancia adquirida, Escribá observó que la carencia del equipo estaba en el ataque. En el mercado invernal regresó a la entidad franjiverde el delantero Ángel, cedido por el Levante y Aarón Ñíguez del Almería al que Escribá conocía de la escuela del Valencia donde se inició como técnico. Se da la circunstancia de que Ñíguez, el único jugador nacido en la ciudad de las palmeras, es hijo de Boria, futbolista del Elche de los años 80 presente en los dos últimos ascensos a Primera. El equipo franjiverde vuelve a la máxima categoría 24 años después tras una temporada de récord. El empate del Alcorcón ante el Barça B le hace subir antes incluso de jugar su partido en Almería (2-1).

La prudencia ha sido el mensaje que ha trasmitido Escribá durante toda la segunda vuelta. Llegado el mes de enero, la euforia que se respiraba en Elche quedaba equilibrada por la sensatez, serenidad y pragmatismo del técnico valenciano. “Una de las claves de nuestro éxito fue demostrar desde el primer día la idea de ir partido a partido. Nosotros desde el principio independizamos todos los partidos unos de otros”, reflexionó Escribá sobre la filosofía impuesta en el vestuario.

El colchón conseguido en la primera mitad de campeonato le ha valido al Elche para mantenerse líder en una segunda parte de la temporada más discreta cuya clasificación no pasaría del séptimo lugar si la Liga hubiese comenzado en enero. El Villarreal de Marcelino sería el primero en el hipotético caso.

De los 22 partidos ganados, 15 de ellos han sido por la mínima

De sobras conocedor de los entresijos de una categoría en la que ha militado las últimas 14 temporadas, El Elche se ha mostrado como un equipo más sólido y efectivo que brillante. Sin alardes, el conjunto de Fran Escribá ha resultado competitivo. Con tan solo 49 goles a favor, hasta 11 equipos han superado a falta de cuatro jornadas sus registros anotadores. Su delantero más prolífico ha resultado Corominas con 11 dianas. 12 delanteros de la categoría han tenido más puntería en la meta rival. Llegado en el mercado invernal cedido por el Levante, Ángel ha conseguido cuatro goles en apenas tres meses de competición superando en uno a Powel, el delantero holandés fichado para ser el referente en ataque y del que apenas ha dispuesto Escribá. La carencia anotadora de los delanteros ha sido suplida por Edu Albácar. El lateral izquierdo ha anotado ocho goles, cinco de ellos de penalti y otros tres de lanzamiento de falta directa. El central Etxeita también ha contribuido con cuatro tantos, incorporándose al ataque en jugadas a balón parado ejecutadas por Albácar, que ha asistido hasta en seis ocasiones a sus compañeros. La segunda línea de ataque también ha contribuido a paliar la escasez de gol. Xumetra con seis goles y Fidel y Carles Gil con cuatro cada uno han democratizado el gol en el Elche.

La austeridad en ataque se ha visto traducida en los parcos resultados. De los 22 partidos ganados, 15 de ellos han sido por la mínima. El 1-0 ha sido el resultado a favor acontecido hasta en nueve ocasiones. Cada gol anotado le ha valido al Elche 1’57 puntos. El Alcorcón con 65 puntos y 51 goles le sigue con 1’25 puntos por cada tanto.

La diferencia del Elche con el resto de equipos de la categoría ha radicado en su fortaleza defensiva, siendo con 23 goles encajados el equipo más fortificado de la categoría, 12 tantos menos que el Villarreal que le precede en el acierto defensivo. Cabe destacar que el conjunto ilicitano es el quinto equipo de Segunda que menos faltas comete. El Elche ha cambiado su imagen. Dos temporadas atrás disputó la promoción de ascenso en la que sucumbió ante el Granada y, entrenado por Pepe Bordalás, técnico actual del Alcorcón, se forjó la fama de equipo agresivo. El conjunto madrileño es tras el Sporting, el equipo que más faltas comete de Segunda.

Para Fran Escribá el orden y el compromiso de todos es su principal máxima de juego y el ascenso justifica el método. “Tenemos una buena plantilla, pero ni éramos el rival a batir ni teníamos la mejor plantilla de la categoría. Los jugadores han ido al límite entrenando y compitiendo. La mejor plantilla la hemos hecho al saber competir, ser un grupo y trabajar desde la unión”, reflexiona Escribá que ya ocupa un lugar destacado en la historia del Elche.

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