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Centenario zurdazo de Forlán

En su partido 100 con Uruguay, el delantero, de 34 años, lidera la victoria de la Celeste ante Nigeria

Forlán, en el momento de marcar.
Forlán, en el momento de marcar.DANIEL GARCIA (AFP)

Diego Forlán celebró a lo grande su partido número 100 con Uruguay: un zurdazo en carrera que entró por a escuadra de la meta de Nigeria. Su 34º tanto con la Celeste, el del triunfo anoche después de que Obi Mikel hubiera empatado la ventaja inicial de Lugano. El delantero del Internacional de Porto Alegre, ex del Atlético, sigue en forma a los 34 años. Fue el mejor del encuentro, actuando casi de volante izquierdo para habilitar a sus otros dos delanteros: Luis Suárez y un Cavani muy desacertado. Tabárez se abrazó con sus ayudantes. Se ve clasificado. Le falta la perita en dulce de Tahití. Satisfecho tras una aceptable segunda parte, mostrando más entidad y pegada. Antes una Nigeria de recursos mínimos, muy supeditada a la presencia de Obi Mikel. Sin ser un virtuoso, el mediocentro del Chelsea es el más técnico del combinado nigeriano, lo que da una idea del nivel del resto.

NIGERIA, 1- URUGUAY, 2

Nigeria: Enyeama; Ambrose, Omeruo, Echiejile, Obonbona; Ogu (M Ba, m. 65), Mikel, Ogude; Musa, Ideye (Akpala, m. 73) y Oduamadi (Babatunde, m. 44). No utilizados: Ejide, Agbim, Egwuekwe, Muhamma, Kwambe, Ujah, Eze, Benjamin, Onazi.

Uruguay: Muslera; M. Pereira, Lugano, Godín, M. Cáceres; A. González, Arévalo, C. Rodríguez (A. Pereira, m. 87); Luis Suárez (Coates, m. 81), Forlán y Cavani. No utilizados: Castillo, Silva, Gargano,, Eguren, Hernández, Aguirregaray, Lodeiro, Pérez, Ramírez y Scotti.

Goles: 0-1. M. 19. Lugano. 1-1. M. 36. Obi Mikel. 1-2. M. 50. Forlán.

Árbitro: Bjorn Kuipers. Amonestó a Babatunde, Akpala, Lugano, Coates,

Unos 25.000 espectadores en el Arena Fonte Nova en Salvador.

Tabárez optó por juntar a sus tres puntas, como en los últimos minutos ante España, para asustar a Nigeria. Lo logró en los primeros instantes. Es difícil prescindir de cualquier de ellos, pues siguen siendo los futbolistas con más calidad de Uruguay, un páramo en el centro del campo. Ese es el inconveniente del conjunto de Tabárez: lleva mucho tiempo descompensado. Tampoco sus defensores pasan por sus mejores días. Y aunque Lugano aprovechó la inercia para rematar de zurda un centro raso de Forlán (previamente pifiado el taconazo de Cavani), Nigeria fue conquistando la medular. Y consiguió meter poco a poco a Uruguay en su campo. Hasta que Ideye sirvió a Obi Mikel intercambiándose las funciones. El mediocentro defensivo del Chelsea se comportó como un nueve de primera fila. Se adentró por el corazón del área y le tiró a Lugano un regate tan sencillo como demoledor. El central del Málaga quedó espatarrado. Ya solo ante Muslera, Mikel le colocó el balón con suavidad por la escuadra.

Confiada Nigeria, Uruguay dio un zarpazo tras la reanudación. Fue una contra dirigida por la potencia en carrera de Luis Suárez, que abrió a Cavani. El delantero del Nápoles siguió abriendo más a la derecha, por donde llegaba Forlán. Cavani reclamaba que se la devolviera. Hubiera sido lo lógico, pues su posición era más centrada para disparar. Pero a Forlán nunca le asustaron los retos, en este caso, un zurdazo desde la esquina convertido en un obús para el meta Enyeama. Un ejemplo de técnica en carrera en el disparo de máxima precisión.

Forlán fue creciendo con el partido, multiplicándose en tareas de volante (un gran pase de 40 metros dejó solo a Cavani, que disparó muy alto) en incluso de lateral izquierdo, ayudando a Martín Cáceres. Para un definidor tan reputado como Cavani, el torneo le está dejando en mal lugar: erró poco después un cabezazo, solo en el punto de penalti, tras otro templado servicio de falta de Forlán. Protagonista de principio a fin, no pasan los años por Forlán.

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