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Nadal congela la tensión

El español, ya en octavos tras ganar a Dodig, es el mejor del top-5 en los puntos de ‘break’ a favor y en contra ● Después de tres partidos, todavía no ha cedido el saque en Nueva York

Juan José Mateo
Nadal, ante Dodig
Nadal, ante DodigSTAN HONDA (AFP)

“Si yo lo hice, muchos pueden”, dice Rafael Nadal cuando le preguntan qué posibilidades tiene un padre de conseguir que su hijo tenga éxito en el tenis. “Soy una persona normal”, concluye antes de descarrilar 6-4, 6-3 y 6-3 a Ivan Dodig en tercera ronda del Abierto de EE<TH>UU. La realidad de las pistas y la frialdad de los datos le retratan de otra forma. El número dos del mundo domina las dos estadísticas más decisivas del tenis. Ningún competidor del top-5 convierte más puntos de break a favor que él (46%). Ninguno de sus compañeros en el exclusivo club de los cinco mejores defiende con más acierto los puntos de rotura que tiene en contra (69%). Esos dos porcentajes fotografían un momento dulce de juego. También cuentan algo más. Técnicos y jueces de silla han concluido que el Nadal más analítico aparece en esos puntos calientes. Que entonces apura el reloj para buscar esos segundos preciosos que le permitan congelar la tensión y domar el miedo con la brida de su mente y el látigo de su raqueta.

“Son puntos muy psicológicos, de decisión y cabeza fría”

“En los momentos importantes, Rafa tiene un añadido, un extra de intensidad en sus golpes”, observa Àlex Corretja, el seleccionador español, que fue número dos del mundo y maestro de maestros, y que sabe que el español todavía no ha cedido el saque tras tres partidos en Nueva York. “En esos peloteos es capaz de meter una marcha más. Lo hace muy bien en los puntos de break, en los tie-breaks”, añade. “Es un jugador que entonces sube todavía más la intensidad con la que está jugando. Está con la quinta marcha y mete la sexta. Se concentra mucho. Hay que darse cuenta: muchas veces le meten un warning en los momentos importantes [advertencia del juez de silla por tomarse más del tiempo permitido entre punto y punto: 20 segundos en los grandes y 25 en los torneos ATP]. ¿Por qué? Porque está pensando en lo que quiere hacer, se está tomando tiempo para recuperarse y coger fuerza con la que jugar bien el punto”, subraya el técnico. “Entre comillas, le compensa que le den un warning a expensas de jugar con más intensidad”.

La observación del seleccionador queda validada por la estadística. Según pudo saber este diario, Nadal es el tenista del top 30 al que más veces han advertido los jueces de silla por tomarse más tiempo del debido. Al llegar a Nueva York le habían pedido que se diera más prisa en 24 ocasiones, amenazándole con la pérdida de un primer saque y hasta de un punto en caso de reincidencia, por las 11 del estadounidense John Isner y las 10 del argentino Juan Martín del Potro, los siguientes en la lista que recoge las estadísticas de los 30 mejores.

Apura el reloj y por eso es el más advertido por los árbitros. Salva el 80% de roturas

“Son puntos muy psicológicos, que uno juega bien cuando está con confianza y mal cuando está con desconfianza”, describe el mallorquín, que en los partidos que ha disputado sobre cemento este verano suma un 49% de oportunidades de break convertidas y un estratosférico 80% de opciones de break negadas a sus contrarios. “Cuando vienes con mala dinámica, tienes la sensación de que el otro te mete el golpe del siglo en ese momento, de que justo entonces fallas… Es la dinámica”, prosigue Nadal, que jugará por los cuartos contra Kohlschreiber. “Cuando las cosas van de cara, parece que la fortuna está más de tu lado. Los mejores tienen la capacidad de darse más oportunidades que los demás. Ahí está la gran ventaja. Se fabrican más oportunidades. Si están con confianza aprovechan todas las oportunidades”, advierte. “Los puntos de break en contra son algo similar. Son momentos psicológicos, de habilidad y decisión de jugarlos bien o no. Es importante tomar las decisiones con la cabeza fría… Y jugar con decisión”.

Nadal compite en Nueva York a lomos de la mejor racha de su vida sobre cemento. En un grande sobre pista rápida nunca había cedido tan pocos juegos en un partido como en segunda ronda (tres ante el brasileño Silva) ni se había plantado en la segunda semana disputando tan pocos minutos (ninguno de sus partidos ha llegado a las 2h 10m). Ha ganado los 18 encuentros que ha disputado en 2013 sobre la superficie. En consecuencia, ha celebrado tres Masters 1000 en pista rápida (Indian Wells, Montreal y Cincinnati) y opta a auparse al número uno. De lograrlo, Nadal sería el tenista que ha vivido más tiempo entre su descenso del trono y su vuelta al pináculo de su deporte. De conseguirlo, el mallorquín habría empleado tres años en un viaje que pasaría a ser un capítulo más en la lista de imposibles protagonizada por un tenista inasequible al desaliento, eternamente hambriento y listo siempre para transformarse y continuar compitiendo. Dodig es testigo de eso. Tuvo dos bolas de break, y Nadal se las negó congelando la tensión y el tiempo.

Resultados

3ª ronda. Hombres. D. Ferrer-M. Kukushkin, 6-4, 6-3, 4-6 y 6-4. Mujeres. A. Ivanovic (Ser.)-C. McHale (EEUU), 4-6, 7-5 y 6-4. S. Halep (Ru.)-M. Kirilenko (Rus.), 6-1 y 6-0. A. Riske (EEUU)-P. Kvitova (R. Ch.), 6-3 y 6-0. F. Penetta (It.)-S. Kuznetsova (Rus.), 7-5 y 6-1.

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Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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