Un Barça en la penumbra

El Madrid no ha perdido ningún partido esta temporada en la que el Barcelona acumula siete derrotas. El Madrid ha anotado 88,3 puntos y ha recibido 66,7 de media en los 24 partidos oficiales que ha disputado, el Barcelona ha promediado 78,9 puntos en ataque y 71,3 en defensa. El Madrid le ha ganado al Barcelona las dos últimas finales en que se han enfrentado, la Liga y la Supercopa, y también en la semifinal de la Euroliga. La afluencia de público a sus pabellones refuerza la tendencia de la pasada temporada: un promedio de 7.607 en el Palacio de la Comunidad de Madrid y de 4.561 en el Palau Blaugrana. El juego del Madrid es efectivo y atractivo; el del Barça es irregular, inconsistente, a veces insípido y estéril. Así están las cosas ante el clásico de hoy.

Xavi Pascual se atiene a las últimas cuatro victorias consecutivas obtenidas por el Barcelona para hilvanar un discurso estimulante. “En sensaciones vamos creciendo, cada vez hacemos más cosas, estamos más sólidos. Ofensivamente estamos mejor, aunque ante el Gran Canaria (el viernes, en partido que ganó el Barça 62-52) tuvimos problemas con el tiro exterior, pero creo que llegamos correctos al partido ante el Madrid”.

El Barcelona ha recuperado a tres jugadores capitales para sus esquemas. Dos de ellos, Lorbek y Navarro, operados el pasado verano, no pudieron competir en la Supercopa y continúan los procesos de recuperación de su mejor forma física. Oleson, tras una lesión en el peroné, solo lleva disputados tres partidos en la Liga y dos en la Euroliga. Y Lorbek suma seis encuentros oficiales. Pero ante el Gran Canaria, el pívot esloveno ya fue el más destacado de su equipo. Pascual así lo convino: “Lorbek está con confianza, haciendo bien las cosas, ayuda mucho y tiene mucha experiencia”.

Los barcelonistas están a la espera de la recuperación total de Lorbek, Navarro y Oleson

Las carencias del Barcelona se expresan sobre todo por factores relacionados directamente con la fluidez de su juego. El Real Madrid reparte una media de casi tres asistencias más que el Barcelona (18,3 por 15,8), recupera también bastantes balones más (12 por 7,5), pierde incluso alguno menos (11, por 11,6), comete menos faltas (17,7 por 20,1). Y en el rebote están casi a la par (37 del Madrid por 36 del Barcelona).

Los bases del Barcelona, Marcelinho y Sada, no acaban de encontrar el ritmo de juego adecuado y Pascual, en los últimos partidos, ha dado más minutos de juego en esa posición a Pullen, el jugador estadounidense fichado este verano y que jugó su mejor partido con la camiseta azulgrana el pasado domingo ante en Fuenlabrada, donde sumó 24 puntos. Los nuevos fichajes del Barça —Pullen, Nachbar, Papanikolaou, Lampe y Dorsey— no han alcanzado el nivel que se esperaba de ellos y Abrines ha bajado su rendimiento y su anotación, y en cuatro de los últimos cinco partidos de Liga se quedó en dos puntos.

Los bases, Marcelinho y Sada, no encuentran el ritmo y Pascual ha apostado en los últimos partidos por Pullen

Tras ganar al Gran Canaria, Pascual admitió que en varias fases su equipo estuvo muy desacertado en sus tiros. En el cómputo global, el aspecto en el que deja más que desear es en los triples, con un porcentaje del 30%, el mismo que el Valladolid y solo mejor que el Cajasol, mientras que el Real Madrid alcanza un porcentaje del 36,1% desde 6,75 metros.

El Barcelona afronta el clásico en Madrid desde una situación de inferioridad en la clasificación y en el juego desplegado hasta ahora. Pero esa diferencia todavía era mayor la pasada temporada cuando se disputó el primer clásico, en la jornada 15. El Madrid, como ahora, había ganado todos los partidos y el Barcelona sumaba siete triunfos y siete derrotas. Pero aquel clásico lo ganó el Barcelona (96-89) con una majestuosa actuación de Navarro, con 33 puntos y un solo falló en 17 lanzamientos.