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Diez capítulos de una rivalidad

Toni Nadal repasa los duelos más importantes entre su pupilo y Federer, que se cruzan este viernes por una plaza en la final

Juan José Mateo
Roger Federer y Rafael Nadal durante un partido.
Roger Federer y Rafael Nadal durante un partido. LUTTIAU (PRESSE SPORTS)

Tras ganar 6-3, 6-7, 7-6 y 7-6 a Berdych, Stan Wawrinka espera en la final del Abierto de Australia. Este viernes (9.30, Eurosport), Rafael Nadal y Roger Federer se enfrentan para medirse con el suizo por el título. El español, que domina 22-10 los cara a cara, martilleó su derecha y su servicio en el entrenamiento de ayer con una tirita ovalada como toda protección para la ampolla que tortura su mano izquierda. Mejorado. “Contra Federer, jugará con vendaje porque si juega sin cubrirla y va mal a lo mejor no tiene remedio”, explicó Toni Nadal, su tío y técnico, que luego repasó los episodios clave del pulso más grande de la historia del tenis. Son los 10 grandes capítulos de una rivalidad de 10, que se ha repartido 30 de los últimos 42 grandes (13 para el español; 17 para el suizo).

2004. Miami. “Sin presión". Primer partido y primera victoria de Nadal (6-3 y 6-3). “Me sorprendió : él era el número uno y Rafael un chico de 17 años”, cuenta Toni, que lo vio por la tele. “Supongo que le afectó jugar con un joven que salió pegándole muy bien. Sabía que Federer tenía un muy buen drive y un revés no tan bueno, y más en aquel tiempo, porque después ha mejorado. Sabía que tenía que atacar por allí, aunque entonces ni tan siquiera se planteaba la posibilidad de ganar: iba a jugar bien, alegremente. No tenía ninguna presión”. 

2005. Miami. “Sin coraje para remontar”. Primera final, primera victoria del suizo (2-6, 6-7, 7-6, 6-3 y 6-1). “Rafael tuvo muy mala suerte. El torneo debería haber sido nuestro”, asegura el técnico. “Con el Ojo de Halcón hubiéramos ganado: recuerdo que en el tie-break a Federer se le escapó una bola muy clara que le pilló al árbitro con Rafael en medio. Fue decisiva. Creí que Federer nos ganaría fácil, y se le complicó. Le dio la vuelta. Por algo es uno de los mejores, si no el mejor de todos los tiempos. ¿El 1-6 final? Rafael tenía 18 años y no estaba preparado para asumir que estando tan cerca de la victoria se hubiera puesto a perder.

 2005. Semifinal de Roland Garros. “El punto de inflexión”. El primer pulso en los grandes, para Nadal (6-3, 4-6, 6-4, 6-3). “Federer supo que Rafael dejaba de ser un joven, porque se convirtió en el más fuerte en tierra y la rivalidad ya empieza a ser diferente”, dice. “Ya no era él mirando desde arriba”.

2006. Roland Garros. “A Federer le entraron dudas”. La primera final grande, para Nadal (1-6, 6-1, 6-4, 7-6) “Federer salió a jugar agresivo. Muy bien”, valora Toni. “Rafael no conseguía tomarle el ritmo al partido. Todo cambió en el segundo juego del segundo set. Con 30-0, Federer hizo dos fallos, se lio un poco en un partido que tenía muy controlado… y break. Le entraron las dudas. Se igualó el juego y Rafael se fue sintiendo mejor. Ese año le había ganado en Montecarlo, en Roma”.

2006. Wimbledon. “Sin convicción”. La primera final en la catedral, para Federer (6-0, 7-6, 6-7 y 6-3). “Sin convicción”. “Ni él, ni yo, ni nadie del equipo nos veíamos preparados para ganar. Eso nos costó la derrota”, lamenta. “Luego, reaccionó, igualó el marcador… Fue un error nuestro salir así. Él era mejor, pero nosotros jugamos mal”.

2007. Final de Hamburgo. “Se le acabaron las pilas”. Primera victoria de Federer en tierra y fin a la racha de 81 victorias del español en esta superficie (2-6, 6-2 y 6-0). “En el segundo set a Rafael se le acabaron las pilas. Llegó cansado, porque venía de ganar en Montecarlo, Barcelona y Roma y con la presión de la imbatibilidad”, reflexiona. “La intensidad que tenía que meterle no fue suficiente. No nos cambió nada de cara a Roland Garros. ¡Tan clara fue la derrota!”.

2008. Final de Roland Garros. “De tú a tú”. Federer solo gana cuatro juegos. “Rafael venía jugando muy bien. Llegó con mucha moral. Recuerdo que le dije: ‘¿Jugamos de tú a tú? Estás preparado para no tener que jugar pensando en el juego de Federer”, dice. “Al final nos decidimos por lo mismo, que nos había ido bien (atacar contra el revés), pero en el partido hubo partes en las que jugó de tú a tú sin problemas. Rafael jugó muy bien y Federer no se vio con coraje para ofrecer gran resistencia”, añade.

 2008. Final de Wimbledon. “Una cabeza muy buena”. Primera victoria de Nadal en hierba (6-4, 6-4, 6-7, 6-7 y 9-7). “Rafael sabía que era un partido decisivo en su carrera. Estaba preparado”, advierte. “Se puso dos sets a cero. En una interrupción por lluvia, yo me quedé dormido. Rafael se fue a tratarse en un pie y la tensión acumulada me pudo. Me equivoqué totalmente. Le dije: ‘Si tienes punto de partido, no lo pienses, sube con decisión sobre su revés’. Llegó el momento, subió, y él nos metió un gran passing paralelo”, añade. “Ganó porque su cabeza es muy buena. Tuvo dos sets de ventaja, dos match-points… y cuando el partido se interrumpió otra vez, con 2-2 en el quinto set, pensé: ‘Hemos perdido’. Llegué al vestuario, y me lo encontré muy calmado. Me dijo: ‘Tranquilo, no voy a perder. A lo mejor él me gana, pero yo no perderé. Y si me gana, el año que viene volveré”.

2009. Abierto de Australia. “Si alguien te apuntara con una pistola...”. Primer grande de Nadal en pista dura. (7-5, 3-6, 7-6, 3-6 y 6-2). “A Rafael le dolía todo, porque venía de 5h 14m de semifinal con Verdasco”, dice. “En el calentamiento, se mareó. Todo iba mal. Le dolía el hombro, el gemelo. Le hice parar. A media hora de salir a la pista, me decía: ‘No puedo correr’. Yo le contestaba: ‘No me engañes ni te engañes. Todos podemos más. Es cuestión de motivación. Si alguien te apuntara con una pistola, seguro que podrías’. En el quinto set, estuvo más fresco que Federer”.

2010. Final de la Copa de Maestros. (6-3, 3-6 y 6-1). “El tenis fácil de Federer”. “Rafael pagó el esfuerzo de la semifinal contra Murray”, valora de la primera opción que tuvo su sobrino de ganar el gran título que le falta. “Federer fue mejor. Me gusta verle jugar, por su forma de golpear, su técnica, su clase. Me gustaría un poco más de intensidad en su juego. Un poco como Nastase”.

¿Y 2014? “Tiene un tenis muy fácil, fluido. Creo que tiene cuerda para rato… la que él quiera tener”.

Final femenina, mañana: Li Na (China)-Dominika Cibulkova (Eslovaquia).

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Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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