Dos meritorios inesperados

Con las derrotas ante el Madrid en la Copa y Almería y Pamplona en la Liga de fondo, el Atlético afrontó los trascendentales compromisos del Milan y el último derbi liguero sin la participación de Diego y Villa. La decisión de Diego Pablo Simeone de sentar a las dos grandes contrataciones de la temporada en esas dos citas tuvo tanto que ver con lo táctico como con los complejos equilibrios de vestuario que emergen al fiscalizar la toma de decisiones. En ambos casos, y en ese contexto configurado por esos partidos perdidos, Simeone hizo uso de un recurso que ejerce tanto de cortafuegos como de golpe de autoridad en una caseta. Se olvidó de los nombres y se ciñó al rendimiento para afrontar esos dos trascendentales compromisos sin los fichajes estrella del curso. Fue un mensaje contundente, un bocado de realidad para los dos afectados. Para el resto de jugadores y para la dirigencia, una postura que dejaba en el banco al refuerzo por el que el técnico más ha presionado al club.

Simeone se ve obligado a cubrir las bajas de Arda, Diego Costa y Godín

La decisión incluso pasó por encima de algunos de los discursos con los que en alguna ocasión el entrenador se ha referido a Diego y Villa. Cuando este último ha sido cuestionado y Raúl García empujaba con goles y trabajo, Simeone explicaba su titularidad desde la jerarquía y la experiencia para jugar partidos importantes y abordar empresas como la de pelear por la Liga en un equipo que la disputa por primera vez en muchos años.

La realidad es que Villa, como Diego, no disputó ni un minuto en San Siro ni en el reciente derbi. El jugador se lamenta de haber perdido el puesto por lesión cuando quizá atravesaba uno de sus mejores momentos con tres goles consecutivos en tres partidos. Sufrió una elongación tras marcarle un tanto a la Real Sociedad y no regresó al once hasta la derrota en Pamplona: "Contra Osasuna el equipo jugó mal y, a partir de que el equipo no respondió como tal, las individualidades se desvanecen. Estamos convencidos de que las individualidades crecen y han crecido en este último tiempo porque el equipo funcionó. El equipo hace mejor a las individualidades. No creemos que la individualidad de uno solo pueda hacer que se juegue bien y ganes el partido. Creo que no tenemos ese tipo de jugadores en el plantel. Sí necesitamos del equipo. Y mañana [por hoy] aspiramos a hacer un partido fuerte en esta línea", advierte Simeone.

"Seguramente, van a jugar", dijo Simeone de Diego y Villa. Lo harán bajo la presión de una victoria necesaria para poder seguir en la lucha por el título y de demostrar que pueden adaptarse al equipo

En el caso de Diego, avalado por lo que hizo en su primera etapa y por la necesidad de contar con un jugador de sus características ante los planteamientos más cerrados de los rivales, contó con media hora en su debut ante la Real Sociedad y tres titularidades posteriores pese a ser un recién llegado. Cuando fue al banco ante el Valladolid, el entrenador argumentó que tenía una dura competencia y lo señaló como un recurso para ganar o cerrar partidos con un estilo diferente al que caracteriza al equipo. Sin embargo, la primera reacción Simeone nada más empatar Cristiano el derbi fue sacar del terreno de juego a Arda Turan y meter al Cebolla Rodríguez. La segunda respuesta al gol del Madrid fue una advertencia a sus jugadores. El técnico les pidió que jugaran los ocho minutos que restaban con cabeza. Lo hizo a voces y gesticulando. Temía que un exceso de ímpetu por ganar el partido acabara en un fatal descuido defensivo. El empate aún permitía al Atlético seguir a un partido del Madrid y optó por cerrar el encuentro reforzando al equipo desde lo físico antes que con la capacidad de Diego para aguantar la pelota. "Entendía que íbamos ganando el partido, que el ritmo con el que se estaba jugando para el que esté afuera es muy difícil involucrarse rápidamente y lo veía bien. Por eso interpreté que Cristian Rodríguez tiene características de intensidad y agresividad y era lo que nos servía", explicó.

En ese paisaje, se presentan Villa y Diego en Balaídos como meritorios inesperados. Las ausencias de Arda y Diego Costa por acumulación de tarjetas —el Comité de Apelación desestimó ayer el recurso por el hispanobrasileño y el club no recurrirá—, les ha concedido la titularidad. Godín, el otro sancionado, será sustituido por Alderweireld.

"Seguramente, van a jugar", dijo Simeone de Diego y Villa. Lo harán bajo la presión de una victoria necesaria para poder seguir en la lucha por el título y de demostrar que pueden adaptarse a un equipo cuya manera de jugar apenas ha asimilado fichajes desde que El Cholo llegó al cargo hace dos años.