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Nadal-Djokovic, una final sin semifinales

Los dos mejores jugadores del planeta se citan el domingo en el partido decisivo después de que Berdych y Nishikori no se presenten a jugar por una gastroenteritis y una lesión

J. J. MATEO
Nadal, ante Raonic en cuartos.
Nadal, ante Raonic en cuartos. Geoff Burke (USA Today Sports)

Rafael Nadal y Novak Djokovic, los dos mejores tenistas del planeta, se enfrentarán el domingo (20.30, Tdp y C+) en la final del Master 1.000 de Miami sin haber golpeado una pelota en semifinales. Primero anunció que no competiría el japonés Nishikori, que era el rival del serbio, lesionado en las ingles. Luego fue el checo Berdych, que debía enfrentarse con Nadal, quien se dio de baja por una gastroenteritis. Así, el número uno y el número dos del mundo disputarán una final de la categoría por 11ª ocasión. Será, además, su pulso número 40, lo que les pone en la senda de construir una rivalidad única en términos de partidos disputados (el español domina 22-17 y ha ganado seis de los últimos diez precedentes). Para el torneo fue un golpe brutal. Se quedó sin semifinales de un plumazo. Lo nunca visto.

“Esto es muy triste”, admitió Nishikori, que se retiró después de completar un magnífico torneo en el que celebró victorias contra el prometedor Dimitrov, David Ferrer (que tuvo cuatro puntos de partido) y el mismísimo Roger Federer. “Desgraciadamente, no me puedo mover de un lado al otro. Intenté calentar para el partido y ni me podía mover”.

El español manda 22-17 en los enfrentamientos con el serbio y ha ganado seis de los últimos diez

“Quizás esta sea la primera vez que se retiran dos oponentes míos en el mismo torneo”, dijo Djokovic, que ya se benefició de un abandono en una ronda anterior. “Hay que adaptarse a ello mentalmente. Me he entrenado, he encontrado un buen ritmo y he intentado continuar con las buenas cosas que estoy haciendo. Ganar en Indian Wells me dio mucha confianza. He jugado muchos partidos y es la hora de beneficiarse de ello”.

El partido mide a los mejores tenistas de 2013, que protagonizan un inicio titubeante de 2014. Nadal empezó como un tiro, ganando el primer torneo que disputó (Doha) y llegando a la final del Abierto de Australia, donde sufrió una lesión de espalda que le ha tenido en ascuas hasta hace bien poco, pese a que levantara los brazos en Río. Nole, por su parte, cedió en cuartos de Melbourne, su torneo grande preferido, y protagonizó su peor comienzo de curso en cuanto a títulos ganados hasta que conquistó la semana pasada el de Indian Wells, donde su oponente se inclinó en tercera ronda. La final, en consecuencia, es de esos partidos que puede condicionar un buen tramo de la temporada. Con los mejores tenistas del planeta nadando entre dudas (Federer alternando grandes momentos con otros malos; Murray buscando ritmo tras operarse de la espalda; Delpo lesionado; Ferrer con entrenador nuevo…), el título reforzará al campeón como el líder del circuito. El trofeo, además, servirá de catapulta para afrontar la gira de arcilla europea, donde Nadal y Djokovic se jugarán muchas de sus opciones de acabar el año como número uno del mundo. Antes, la final de Miami. Un partido decisivo sin semifinales.

Séptimo título para Serena

La tenista estadounidense Serena Williams agrandó su leyenda en el torneo de Miami, de categoría Premier para el circuito de la WTA, conquistando este sábado su séptimo título en Crandon Park, donde batió en dos sets (7-5, 6-1) a la número dos del mundo, la china Na Li.

En su novena final en Florida, la menor de las Williams impuso su poderío y presencia sobre la pista para remontar un 2-5 en contra en el primer set. La ganadora del pasado Abierto de Australia puso contra las cuerdas a la yanqui, pero se desinfló ante la reacción de la número uno y reina de Miami.

Y es que Serena dio la vuelta a los dos 'breaks' en contra con los que empezó la final con cinco juego consecutivos que le dieron el primer parcial. En el segundo, poco tardó la número uno de la WTA en apretar a la número dos, y en el cuarto juego logró una rotura decisiva (3-1).

Con otro 'break' más, Serena Williams se hizo más grande en Miami, su torneo fetiche con un récord de nueve finales y siete títulos, además de alargar su supremacía sobre Li a un severo 11-1 en enfrentamientos entre ambas.

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Sobre la firma

J. J. MATEO
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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