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“No interesaba que Leo participara”

Martino defiende el papel del argentino, al que orilló a la derecha para que se midiera a Filipe, y sus jugadores subrayan las oportunidades perdidas: “Dimos la cara”

Messi y Xavi, tras el gol del Atlético.
Messi y Xavi, tras el gol del Atlético.claudio álvarez

El Atlético desnaturalizó al Barcelona en los primeros minutos porque pareció jugar solo, pero también después, por más que los azulgrana acumularan la posesión, casi siempre ausentes en el área rival. Pero que el Atlético le rebasara, que hiciera tres palos y un gol, que le eliminara, pareció no ser suficiente para un Barcelona que defendió su competitividad. “Hemos dado la cara y hemos hecho un buen partido para empatar. Hemos tenido cinco ocasiones clarísimas. Y sí, se nos ha escapado por eso, por no meterlas”, explicó Xavi, que no entendió de autocrítica como tampoco lo hizo cuando se cayó con estrépito frente al Bayern hace un año. Igual se expresó Martino. “Coincido absolutamente en que el equipo dio la cara. Pero si alguien espera que la forma del Barça se asemeje a la del Atlético, no es su manera. Jugará como en los últimos 10 años, que es la única manera en que pueda tener éxito”, señaló el técnico, que agregó: “Me animaría a decir que no hay posibilidad de que incorporemos cosas positivas del Atlético. Somos equipos diametralmente opuestos que nos presentamos al partido de maneras diferentes”. Y ganó el Atlético.

Con el duelo cuesta arriba, Martino sacó del campo a Iniesta. “Sí, me ha sorprendido el cambio, pero es una decisión del entrenador”, aceptó el de Fuentealbilla, que estaba hecho polvo. “Nosotros podemos jugar con variantes y opciones. Es la potestad del entrenador y él es el que mejor ve el partido”, reflexionó Zubizarreta.

Sin Iniesta, el foco se puso aún más en Messi, que estaba a otra cosa. “Independientemente de las grandes individualidades, debemos hacer el análisis de manera colectiva”, dijo Martino. Y, pese a que la ley del fútbol dicta que mejor cuanto más balón toque el mejor, añadió: “No nos interesaba que Leo tuviera participación en el juego. Queríamos lograr que jugara uno contra uno en el lado derecho [no encaró una sola vez a Filipe Luis]. Y tuvo dos opciones de gol muy claras con diagonales. No era prudente que por el tipo de marcaje del Atlético tuviera tanta participación, sino que fuera más bien decisiva”. Lo consiguió Martino: Messi tenía una media de 60 pelotas tocadas por partido y anoche se quedó en 40.

Pareció que el Barça se resignó a la derrota. “Su propuesta le ha salido bien: intensidad alta, juntar líneas, defender y contragolpear tras el gol. Juegan todas sus armas, como dejar el campo seco, que perjudica y ralentiza nuestro fútbol”, comentó a modo de excusa Alves. Más realista se mostró Zubizarreta. “La derrota es justa porque lo dice el resultado. Con eso nos quedamos”. Algo parecido opinó Alba: “En los dos partidos ellos han sido mejores en los primeros minutos. Y luego nos hemos hecho con el control del partido y hemos igualado la intensidad, pero no hemos sabido entrar ahí”. Aunque el más claro, por más que lo dijera en brasileño, fue Neymar: “Ellos defienden mucho y se basan en el contragolpe, pero fueron mejores”.

En un discurso incomprensible por lo conformista, Martino se dio hasta el gusto de bromear. “No me impresionó el ambiente. Estoy acostumbrado y creo que eso es un dato menor”, dijo al tiempo que sonreía. Menos ganas de reír tenía Alves: “Ha sido un día muy duro”. Iniesta tomó la palabra: “El Atlético ha merecido pasar. El deseo de estar en las semifinales era enorme, pero el rival también juega y tiene la ilusión de estar”. Neymar añadió: “Nos queda la sensación de tristeza”. Aunque Alba, por si acaso, recordó: “El equipo ha dado la cara en todo momento”.

Eliminados de Europa aunque aplaudidos por los aficionados del Barça al final del partido y fuera del Calderón, el equipo se conjuró para lo que queda. “Tenemos la final de la Copa y la Liga. El dolor tiene que durar hoy y mañana, y esto es fútbol, pero no debe afectarnos”, concedió Iniesta. “Hay que hacer borrón y cuenta nueva”, solicitó Alba. Y Martino, de nuevo en fuera de juego, como si lo dijera con sorna, añadió: “No puedo decir que es una fiesta el vestuario porque en realidad no lo es. Pero la parte buena de esto es que a 35 días del final del curso el equipo llegó con posibilidades en los tres frentes. No siempre se ganó las tres competencias. Y el sábado hay otra final en Granada”. Y, dado que el último partido de la Liga es contra el Atlético, redondeó: “Los cinco duelos jugados contra este equipo se dieron casi de la misma manera. Hoy [por ayer] por primera vez hubo un ganador. Pero no tengo grandes expectativas de que el próximo encuentro se presente diferente”.

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