Martino necesita a Messi

Aunque su fútbol se define propiamente a partir de los centrocampistas, jugadores que aseguran el toque y el pase, la vida del Barcelona gira desde hace tiempo alrededor de Messi. La institución le tiene un respeto reverencial, mayoritariamente admirado y a veces también temido, como si la salud del club dependiera del semblante del 10. Nada nuevo, por otra parte, si se tiene en cuenta que de forma continuada ha sido el número 1 y aspira a mantenerse en el trono después de no ganar el último Balón de Oro conquistado por Cristiano Ronaldo.

El Barça ha encadenado dos partidos sin marcar, cosa que no pasaba desde el estreno de Guardiola, y la crítica se ha puesto a mirar a Messi. El argentino se ha quedado seco después de resolver desde el punto de penalti el derbi y el clásico del Bernabéu. Los últimos goles azulgrana llevan la firma de Messi (7), Neymar (3), Iniesta (1) y Figueras, que marcó en su propia portería, la del Betis. Alexis y Pedro, decisivos en diciembre cuando el 10 estaba lesionado, se han quedado parados desde la goleada a Osasuna (7-0, en la jornada 28) y Cesc no marca desde Sevilla (jornada 23), ambas antes de pasar por el Bernabéu.

El ‘10’ ha sido muy fiable en las finales que ha disputado porque ha ganado 8 sobre 10

El protagonismo de los extremos ha menguado desde que Martino confió para los partidos más exigentes en los cuatro medios: Xavi, Busquets, Iniesta y Cesc. Aunque la fórmula no funcionó en los cuartos de final de la Champions contra el Atlético, fue exitosa ante el Madrid, derrotado en el Camp Nou (2-1) y Chamartín (3-4). Messi no tuvo una actuación decisiva en la ida y en cambio resultó determinante en el Bernabéu. La duda está en saber qué más le conviene al futbolista y al equipo en un terreno neutral como será mañana Mestalla.

El debate sobre el estilo de juego del Barça ha acabado por afectar al 10, que ya no solo ejerce de falso 9 sino que en determinados momentos ha regresado a su posición original de 7. Igual de discontinuo que el equipo, Messi ha sido muy fiable en las finales disputadas hasta ahora porque ha ganado 8 de 10: perdió la Supercopa de 2006 con el Sevilla y, curiosamente, la Copa de 2011 contra el Madrid en Valencia.

Messi se encontrará con Casillas, imbatido en esta Copa. A pesar de la rotura muscular que le tuvo prácticamente un par de meses de baja, Messi es el máximo goleador barcelonista en la Liga, con 25 tantos, por delante de Alexis (17) y Pedro (14), mientras que en la Champions suma 6 por 4 en la Copa.

La aportación de Neymar fue capital en la Supercopa de España y en los triunfos contra el Madrid y el Espanyol, protagonista el brasileño de dos penaltis que marcaron la suerte de los dos encuentros. El 11 y el 10 tienen plaza segura para la final contra el Madrid. La duda parece estar entre Cesc y Alexis. El reencuentro con el gol se presenta decisivo para el Barcelona después que en 13 partidos haya empezado perdiendo y solo haya remontado en cinco. El poder ofensivo, en cualquier caso, se concentra en los delanteros y no en los medios y los defensas, excepción hecha en determinadas situaciones del físico de Piqué y de los latigazos de Adriano.