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Nadal juega con esquíes

Un magnífico pasante de revés del mallorquín desatasca 6-4 y 6-3 su semifinal con Bautista y le cita en la final del torneo de Madrid con Kei Nishikori

Juan José Mateo
Nadal devuelve la pelota ante Roberto Bautista
Nadal devuelve la pelota ante Roberto Bautista PIERRE-PHILIPPE MARCOU (AFP)

Es un juego para tenistas de una pieza. En las semifinales del Mutua Madrid Open, Rafael Nadal y Roberto Bautista compiten el séptimo de la primera manga. Allí se plantan los dos españoles tras intercambiarse breaks (3-3), y empiezan a saltar chispas. Desde el 40-15 con el que domina el castellonense se ven cuatro deuces, dos ventajas para Bautista y dos bolas de break para Nadal, que tras casi diez minutos de idas y venidas, de pulso físico y mental, convierte la segunda después de lanzarse como un caníbal a por una pelota a la que llega resbalando sobre la tierra igual que si calzara esquíes. Tras el revés que le da la rotura, el partido ya nunca vuelve a ser el mismo: el número uno mundial se planta en la final (6-4 y 6-3), donde se medirá a Kei Nishikori (7-6, 5-7 y 6-3 a David Ferrer).

"Roberto está teniendo una progresión impresionante, es de los más jóvenes que vienen y va a acabar este año en un posición bastante alta", dijo el ganador sobre el derrotado, de 26 años. "A mí me venía faltando ritmo sobre tierra, pero aquí me he ido encontrando, y hoy he jugado a un muy buen nivel", cerró tras un partido marcado por el ruido de una manifestación a las puertas del torneo.

Bautista, ante Nadal.
Bautista, ante Nadal.Sergio Barrenechea (EFE)

Bajo el calor de la primavera madrileña, Nadal no se encuentra con ningún regalo. Pasada la impresión de encontrarse en su primera semifinal de la categoría, lo que le cuesta el break de entrada, Bautista aplica algunas de las fórmulas que más hieren al número uno. El castellonense percute con su revés cruzado contra el drive del mallorquín. Castiga con dejadas envenenadas su tendencia a acularse contra la valla, abandonando la línea de fondo. Pega con decisión y juega con valentía, recuperando el primer break (0-1) que cede en el partido (3-3) y un 0-40 en la segunda manga

Frente a eso, el número uno mundial, todo colmillos y todo garras. Aún buscando su mejor versión, Nadal ya tiene piernas para capear temporales sobre arcilla. Si el drive no marcha, como cuando cedió una rotura en la primera manga, ahí están los pies para impulsarle a por una pelota, y a por otra, y a por otra, hasta que aparezca la inspiración. Si no entra la quinta marcha, basta con la tercera, porque pesa mucho su leyenda, el mito del gigante de la tierra, el aura de indestructible campeón de la arcilla. La progresión es ascendente, pero sigue habiendo baches, expresados en esta ocasión con dobles faltas (tres), errores no forzados (21) y fallos de drive en situaciones de tensión (cedió dos breaks), y falta una prueba de fuego: mantener la continuidad y levantar los brazos cuando enfrente esté uno de los mejores jugadores del planeta sobre tierra (Djokovic, Wawrinka, Ferrer…).

Mientras llega ese examen, el defensor del título volvió a ofrecerse la posibilidad de levantar un Masters 1.000, que sería el 27º. Puede ser el trampolín que necesita para volver a impulsar su temporada. El número uno sabe una cosa: a lo largo de su carrera ha sido capaz de pasar de jugar mal a competir muy bien con solo una victoria como asidero

Ferrer cae tras salvar nueve puntos de partido

J. J. M.

Kei Nishikori necesitó diez puntos de partido para derribar a David Ferrer por 7-6, 5-7 y 6-3 en semifinales. "Sí, se puede; sí se puede", gritaba el público, emocionado por el esfuerzo del alicantino, que una y otra vez se mantuvo en el partido y que incluso tuvo tres bolas de break en el juego final para mantenerse vivo.

"Estoy dolido, ha sido un partido muy duro, en el que he tenido mis oportundiades, sobre todo en el primer set, que perdí en tres juegos muy malos", dijo el alicantino, que sacó por ese parcial y lo perdó desde un 5-2 a favor. "Yo le di vida en el primer set. Mañana lo veré en positivo, no por haber estado ahí, sino por haber hecho semifinales. Me duele no estar en la final del domingo", añadió. "Él ha dado un salto de calidad. Pudo caer de mi lado, pero en el tercer set me despisté en un juego y..."

El ganador, además, tuvo el mérito de superar los dolores que sufría en la espalda. Por tres veces atendió el fisioterapeuta al japonés. Por tres veces volvió Nishikori a la pista para demostrar por qué desde el lunes será uno de los diez mejores tenistas del planeta: le sobre ritmo de fondo, suelta latigazos que dejan boquiabierto a cualquiera, y su saque es muy estimable para un competidor que no supea el 1,78m. Frente a eso, Ferrer puso sus restos, su drive y su entrega. No fue suficiente, pero su partido quedó como ejemplo para los tenistas que vienen. Con 2-5 en la tercera manga, el alicantino seguía animándose, dispuesto a sacar las garras, y por poco no mordió el partido.

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Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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