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Nadal remonta a Nadal

Tras ceder un 6-7 y 0-2 por sus errores, el número uno le propina un 12-1 a Youzhny y voltea 6-7, 6-2 y 6-1 para llegar a cuartos, donde espera Murray

Juan José Mateo
Nadal en su partido contra Youzhny.
Nadal en su partido contra Youzhny. Michael Regan (Getty Images)

Rafael Nadal jugará hoy los cuartos del Masters 1.000 de Roma contra Andy Murray tras superar 6-7, 6-2 y 6-1 a Youzhny en un partido que retrató sus miedos y sus certezas. El español, que la víspera ya perdió breaksde ventaja en los tres sets que debió apurar contra Simon, cedió ante el ruso la manga inaugural pese a que tuvo bola de set al resto (3-5) y saque para cerrarlo (4-5, cometió dos dobles faltas). El número uno se vio 6-7 y 0-2 abajo sin que el número 30 hiciera nada del otro mundo. Soplaba el viento. Se levantaba la arena persiguiendo los ojos de los tenistas. Nadal bailaba con sus fantasmas: que el encuentro siempre se escribió con su raqueta quedó reflejado en el 12-1 final que le propinó a su contrario. Cuando el mallorquín levantó los brazos, liberado de las cadenas de la ansiedad, la realidad había rebatido sus palabras.

“Estos partidos son los que te hacen fuerte, los que te dan el físico que uno necesita, ese sufrimiento, la mentalidad de saber que aunque las cosas estén complicadas las puedes sacar adelante”, dijo el español tras sufrir durante 3h 18m para tumbar a Simon en su debut italiano. “Estoy orgulloso”.

Frente a Youzhny, sin embargo, el español cometió el mismo pecado: gestionó mal las ventajas conquistadas y no fue capaz de dominar una de sus especialidades, los peloteos sobre el segundo saque (solo ganó un 29%). Le pesaron los precedentes. Nadal vivió con angustia sus dos sorprendentes derrotas en cuartos de Montecarlo y Barcelona. Aunque la progresión es positiva, el Nadal que juega sobre arcilla en 2014 palidece en la comparación con el que compitió en años anteriores. Falta solidez en la propuesta. Los momentos brillantes se entrelazan con los grises. La claridad en el patrón de juego (el drive por encima de todo) se mezcla con partituras confusas (un revés cortado que no molesta). Los fantasmas revolotean alrededor de su cabeza, y hoy sus oídos escuchan esas malas ideas, cuando antes eran sordos a los siseos del miedo.

A nadie podría sorprenderle que el español gane Roma y Roland Garros, que empieza en nueve días. Volteó situaciones peores, ya tiene un título al que agarrase (Madrid) y el amor por la competición sigue intacto. La incógnita no está en la técnica ni en el cuerpo, sino en si mantiene el espíritu irredento que le llevó a la gloria. Para empezar, Nadal superó a Nadal en octavos, porque Youzhny solo fue un espectador. Ahora, y frente a Murray (13-5 en el cara a cara), es probable que mejore: el nombre del contrario obliga a estar alerta desde el inicio, y la ronda abre la puerta que acerca al campeón a luchar verdaderamente por el título.

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Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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