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Mateu frustra a Iraizoz

El árbitro anula en el descuento un gol del meta del Athletic a un Málaga con nueve jugadores.

Rafael Pineda
Mateu Lahoz anula el gol de Iraizoz mientras los jugadores del Athletic lo celebran.
Mateu Lahoz anula el gol de Iraizoz mientras los jugadores del Athletic lo celebran. Gogo Lobato (AFP)

En realidad, hubo dos partidos en La Rosaleda. Uno, de 89 minutos, donde al Athletic le faltó fútbol para batirse ante un Málaga intenso, veloz y listo. Un equipo con las ideas claras, con dos puñales por banda y un repliegue de primera para desesperar al Athletic. El segundo partido, que se jugó en siete minutos frenéticos, condensó una barbaridad de acontecimientos: dos justas expulsiones del Málaga, un tanto anulado al portero Iraizoz de forma inexplicable y un penalti de Kameni a Aduriz que Mateu Lahoz, el árbitro, no vio, aunque hubo fuera de juego previo de Guillermo. De buenas a primeras, La Rosaleda fue un volcán.

No se entiende por qué el colegiado anuló el gol que pudo suponer el empate del Athletic. Un monumental remate del portero Iraizoz a la desesperada y con el Málaga asfixiado. El conjunto vasco, superado a lo largo de todo el encuentro, se marchó derrotado después de un carrusel de emociones en siete minutos de infarto.

MÁLAGA; 1-ATHLETIC; 0

Málaga: Kameni; Rosales, Sergio Sánchez, Weligton, Antunes; Camacho, Darder (Recio, m. 84); Horta, Luis Alberto (Duda, m. 73), Juanmi (Samu, m. 63); y Santa Cruz. No utilizados: Ochoa; Boka, Angeleri y Samu Castillejo.

Athletic: Iraizoz; Iraola, Gurpegi (San José, m. 60), Laporte, Balenziaga; Iturraspe, Rico, Beñat (Ibai Gómez, m. 46); Susaeta (Guillermo, m. 83), Aduriz y Muniain. No utilizados: Herrerín; De Marcos, Morán y Unai.

Gol: 1-0. M. 35. Luis Alberto.

Árbitro: Mateu Lahoz. Expulsó con roja directa a Duda (m. 88) y Antunes (m. 91). Amonestó a Iraizoz, Gurpegi, Camacho, Laporte, Samu y Horta.

La Rosaleda. Unos 22.000 espectadores.

El descuento fue una locura: dos rojas al Málaga y un gol  mal anulado a Iraizoz

Antes del caos y del espectáculo de Mateu, el partido que sirvió para inaugurar la Liga estaba definido por un error que aprovechó Santa Cruz y acabó en penalti convertido en el rechace por Luis Alberto. Tiene mucho mérito lo que hace el Málaga. Condenado en el aspecto económico por el destierro al que está sometido por su propietario, el equipo andaluz se reinventa cada temporada. Desde el banquillo, con Javi Gracia. En el césped, con un equipo renovado, sin pilares como el portero Caballero o el lateral Jesús Gámez, pero con jugadores jóvenes con hambre.

El equipo andaluz evitó el cara a cara y le tendió una trampa al Athletic. Robo y salida muy rápida al contragolpe, con dos jugadores muy veloces, Horta y Juanmi, cortando el aliento a los vascos. Fue el Athletic el que gozó de la primera ocasión del partido. Un fantástico pase de Muniain a Aduriz dejó solo al delantero centro, que chocó con la gran salida de Kameni. El camerunés le ha ganado el pulso, por el momento, al mexicano Ochoa.

El Málaga respondió con un contragolpe fulgurante, donde Beñat salvó el gol de Juanmi. Tras dos avisos del veloz Horta, el partido se definió en una jugada de astucia de Santa Cruz. El paraguayo se adelantó a una cesión a Iraizoz y el meta le hizo penalti. Luis Alberto anotó tras despejar el meta vasco. La Liga no admite concesiones. Un error en defensa dinamitó las opciones vascas.

Cansado de las pérdidas de Beñat, Valverde lo mandó a la ducha para darle el mando del Athletic a Muniain. Echará de menos el Athletic a Ander Herrera, su faro. Lo intentó siempre el conjunto vasco, encontrando peligro sobre todo a balón parado. Rico tuvo el empate en su cabeza mientras el partido insistía en su perfil. Un Málaga metido atrás y saliendo como un rayo al contragolpe, gracias al vivo Horta y el toque de Luis Alberto. Una táctica ante la que el Athletic sufrió mucho.

Con el encuentro definido, Duda empujó a Muniain en el último minuto. Roja clara, como la de Antunes dos minutos después. Lo que vino a continuación fue una locura. El Málaga se defendió como pudo y fue superado por el feroz salto de Iraizoz. Mateu anuló el gol y el Athletic sintió una profunda frustración.

"Veo un golazo"

El entrenador del Athletic, Ernesto Valverde, se mostró bastante elegante a la conclusión del encuentro ante el Málaga. Lógicamente, la actuación del colegiado Mateu Lahoz en un descuento de infarto privó al conjunto vasco de un punto. El colegiado anuló un gol del portero Iraizoz por un presunto fuera de juego de Laporte. “Cada uno lo ve desde el prisma que le toca, aunque es difícil que un portero meta un gol como Gorka y se le anule. No quiero hablar demasiado del árbitro, habrá tomado sus decisiones, en algunas se habrá equivocado y en otras habrá acertado”. “En el gol de Iraizoz habrá visto una falta, de alguien de algo, es la sensación que tenemos”, pero repito que no debemos hablar mucho más del asunto. Por su parte, Javi Gracia, nuevo preparador del Málaga, demostró una enorme deportividad al analizar la jugada polémica del encuentro. “Veo un golazo, más propio de un delantero que de un portero. Sí veo al juez de línea de inmediato con el banderín levantado, pero no sé”, indicó el técnico. Con respecto al encuentro, Gracia alabó el esfuerzo de sus jugadores. “Defensivamente, el equipo ha tenido buen comportamiento. Estoy contento por el desarrollo del partido, ya que hemos jugado en inferiodidad con dos jugadores, hemos peleado y la afición se ha entregado”, finalizó.

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