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El Madrid crece por dentro

Los de Laso, liderados por sus pívots Bourousis y Ayón (24 puntos y 20 rebotes entre ambos) superan con solvencia al Gran Canaria

Faustino Sáez
Llull entra a canasta ante Kuric
Llull entra a canasta ante Kuric Fernando Alvarado (EFE)

En la cuarta temporada de Laso, tras seis títulos y 10 finales de las 13 posibles en el camino, la evolución del Madrid, entre otras cosas, pasa por la progresividad y el equilibrio. Analístas acreditados y aficionados de paisano constataron que la paradójica enseñanza que dejó la temporada pasada fue que el conjunto blanco debió de ganar menos partidos para ganar más títulos. Que debió desgastarse menos y seleccionar mejor sus esfuerzos. Que en los cuatro primeros meses de curso coleccionó récords para el álbum, pero en los dos últimos no abrió las vitrinas. En nueve meses de competición, el Madrid disputó 80 partidos con un balance de 68 victorias y 12 derrotas (11 de ellas en los últimos tres meses del curso), logró 24 triunfos por más de 20 puntos (11 de ellos por más de 30), y alcanzó 11 veces la frontera de los 100 puntos. Llevó a sus aficionados a abrazar el síndrome de Stendhal antes de sucumbir al estrés postraumático y terminó abocado al diván. Esta temporada, por reestructuración y hoja de ruta, el equipo parece dispuesto a tomarse las cosas con más calma. Con menos mística y más pragmatismo, diversificando el foco. Mucho por fuera, pero bastante más por dentro. Algo está cambiando.

R. Madrid, 70-Gran Canaria, 57

Real Madrid (17+21+16+16): Sergio Rodríguez (7), Llull (5), Maciulis (2), Ayón (10) y Bourousis (14) -cinco inicial-, Mejri (9), Campazzo (2), Carroll (5), Reyes (1), Nocioni (8), Rivers (7) y Yusta (-).

Herbalife Gran Canaria (16+27+2+12): Bellas (13), Kuric (-), Newley (8), Kendall (4), Summers (8) -cinco inicial-, Tavares (4), Urtasun (7), Oliver (3), Báez (4), O' Leary (6) y Paulí (-).

Árbitros: Benjamín Jiménez, Calatrava y Sánchez. Sin eliminados.

Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid: 8.858 espectadores.

En el primer partido de Liga, en el Madrid se lucieron los pívots. Bourousis (14 puntos, siete rebotes y 22 de valoración) y Ayón (10 puntos, 13 rebotes y 19 de valoración) lideraron al conjunto de Laso que, tras un primer tiempo de apreturas y rodaje, superó sin dificultades al Gran Canaria de Aíto. Mientras Laso encuentra las proporciones de la mezcla, el estreno liguero sirvió para descubrir su primer quinteto: Sergio Rodríguez, Llull, Maciulis, Bourousis y Ayón; para evidenciar la mayor vocación interior de los blancos con Ayón midiendo su nueva parcela; y para refrendar el efervescente estado de forma de Llull y Bourousis bajo la estela del Mundial y el impulso de la Supercopa y para que el Palacio abrazara el carisma del menudo base argentino Facundo Campazzo (1,79m). Faltaron a la cita ante el Gran Canaria Rudy Fernández, con una sobrecarga muscular en los isquiotibiales de la pierna derecha, y Marcus Slaughter, por la rotación de extracomunitarios (Ayón y Campazzo ocuparon las dos licencias que permite la norma). Pese a tener una plantilla de 13 fichas esta temporada, Laso tuvo que sustituir a Rudy con el canterano Santiago Yusta, que ya debutó el año pasado, por la obligación de contar con un mínimo de cuatro jugadores nacionales. Con la salida en verano de Dani Díez, el Madrid los tiene justos (Sergio, Llull, Rudy y Reyes) por eso tiró del júnior de 17 años.

Faltaron a la cita Rudy Fernández, con una sobrecarga muscular y Marcus Slaughter, por la rotación de extracomunitarios

Así transcurría la mañana, entre cábalas y probaturas, con Campazzo y Nocioni anunciando la conexión argentina, con Mejri y Tavares cortocircuitándose en su duelo de gigantismo, con el Chapu ensayando de tres (compartiendo cinco junto a Felipe y Mejri), con el Madrid estirando su secuencia de cambios y con el Gran Canaria penalizando su inconsistencia inicial con la vibrante dirección de Bellas y los puntos de Urtasun y Summers. Desde el segundo cuarto, los de Aíto asumieron la iniciativa y opositaron a la victoria con orden y aplicación en defensa y una paciente selección de tiro en ataque. Del 17-16 del primer parcial se pasó al 21-30 a favor de los visitantes, que después equilibraron los blancos con las primeras dianas de Carroll (32-32). Pero, dominando el rebote y los porcentajes, los amarillos se marcharon con ventaja al descanso (38-43, m. 20).

A la vuelta de la caseta, con Campazzo ejerciendo de agitador y Ayón y Bourousis hinchándose a rescatar balones bajo los aros (cogieron 20 rebotes de los 44 del equipo), y Rivers y Llull apretando las tuercas, el Madrid retomó su plan fundacional de defensa, rebote y contraataque. Nadie secundó a Bellas, se apagó el Gran Canaria (14 puntos en los últimos 20 minutos) y los de Laso se pusieron por delante en el marcador con solvencia gracias a una exhibición defensiva en el tercer cuarto, que concluyó con el contundente parcial de 16-2. La pelea por el rebote en ese tramo reflejó una estadística de 21 capturas a favor de los blancos (13 de ellas en defensa) por 9 de los amarillos. Ya no perdieron el mando los locales, que con sus pívots al frente gestionaron la renta en una tranquila maniobra de aterrizaje.

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Sobre la firma

Faustino Sáez
Es redactor de deportes del diario EL PAÍS, especializado en baloncesto. Además del seguimiento de ACB y Euroliga, ha cubierto in situ Copas, Final Four, Europeos y Mundiales con las selecciones masculina y femenina. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS.

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