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Gala León pide la mediación del CSD

La seleccionadora de la Copa Davis envía una carta a Miguel Cardenal

Juan José Mateo
Gala León, durante su presentación como seleccionadora.
Gala León, durante su presentación como seleccionadora. Laura León

El Consejo Superior de Deportes recibió ayer una carta de Gala León, directora deportiva de la Federación de Tenis y seleccionadora, pidiendo una reunión con Miguel Cardenal, el secretario de Estado para el Deporte. En la misiva, enviada el jueves, la capitana hace referencia al encuentro que mantuvo la semana pasada con los tenistas —que se oponen mayoritariamente a su nombramiento— y explicita su voluntad de comentar “de primera mano cuál es el Plan Deportivo previsto para el próximo año con la finalidad de subir al equipo a Primera División, donde nos corresponde por potencial deportivo”. Fuentes del CSD confirmaron la recepción de la carta, pero no que la reunión se vaya a producir próximamente, ya que “sigue vigente el estupor por recibirla una vez que Gala anunció primero su intención en la prensa”. Del mismo modo, una persona del entorno de los jugadores ya ha hecho las primeras gestiones para solicitar la mediación del organismo en el conflicto, que dura ya más de un mes. Es el mejor reflejo de que la tensión en el tenis español aumenta cada día.

Djokovic: "Ser padre es ser el número uno"

J. J. M.

En el Masters 1.000 de ParÍs-Bercy, la lucha por el trono del tenis. A los 33 años, el suizo Roger Federer puede dejar la capital francesa como número uno mundial: para eso necesita, entre otras combinaciones, ganar el torneo y que el serbio Novak Djokovic no pase de semifinales. Visto que el suizo viene de celebrar el título de Basilea, su quinta victoria de la temporada, el objetivo no es imposible. Menos aún si se tiene en cuenta el momento vital que atraviesa Nole. El campeón de siete grandes acaba de ser padre de Stefan. Su vida ha cambiado.

“Desde la temporada que viene, intentaremos estar siempre juntos”, apuntó Djokovic sobre su esposa y su hijo. “No será fácil, con este estilo de vida, pero si es posible intentaré estar con mi niño y mi esposa cada día”, abundó. “Por supuesto, son mi prioridad”, siguió. “Ser padre es ser el número uno. Hemos esperado este hijo nueve meses, se ha hecho largo. Pero no me ha distraído de mi carrera y de mi tenis. Estaba impaciente por ser padre, por vivir este momento feliz juntos. Afortunadamente estaba allí cuando nació y no me ha cambiado el programa”.

A los 27 años, Djokovic le ha pedido consejo a Federer, de 33, sobre cómo mantener el filo competitivo cuando en la vida ya hay otros intereses. El suizo, que tiene dos parejas de gemelos, ha logrado equilibrar esas dos facetas de su vida con la maestría que ha distinguido siempre su carrera. Por eso este año ha alcanzado una final del Grand Slam (Wimbledon), ha celebrado dos Masters 1.000 y puede acabar en el trono: poco en comparación con su currículo colosal, mucho si fuera cualquier otro tenista del mundo. “Reconozco que la vida de un tenista no es sencilla con un niño, hay muchos viajes, muchos hoteles, no es fácil tener una rutina”, señaló Djokovic; “pero si Roger lo logra yo también puedo intentarlo”.

Esta es la situación. El CSD observa “con preocupación” la deriva de la Federación de Tenis, en la que ve “un conflicto permanente” que en los últimos años ha implicado a jugadores y jugadoras, enfrentados con los directivos. La Federación, por su parte, se dice abierta a cualquier reunión propuesta por el CSD, recuerda que este le ha felicitado por la “transparencia” de su gestión, aboga por afrontar el problema actual con prudencia y ve “fundamental” la reunión entre León y Cardenal. Esta, sin embargo, es un síntoma de los problemas. No se recuerda que ninguno de los predecesores de León tuviera que acudir al máximo organismo deportivo para explicar su proyecto.

Fuentes federativas contaron que la seleccionadora no tiene programado en su agenda un viaje al torneo de París-Bercy, que se celebra esta semana y donde los tenistas, con la ausencia de Rafael Nadal, baja, tienen previsto volver a reunirse para decidir si hacen pública la propuesta que le trasladaron a la extenista en Valencia: que dimita como seleccionadora, elija a su sustituto y continúe como directora deportiva. La distancia que separa a jugadores y capitana es la misma que media entre dos polos opuestos. En la reunión de Valencia nadie se anduvo con paños calientes. Según fuentes conocedoras de la conversación, cuando León escuchó que le proponían seguir solo como directora deportiva planteó inmediatamente y sin tapujos la pregunta clave: “¿Me estáis pidiendo que dimita?”.

Desde que León ocupó la dirección deportiva, en julio, la Federación ha visto cómo la selección masculina descendía y cómo estallaba un conflicto con los jugadores, pero no solo eso. En las últimas semanas, la institución que preside José Luis Escañuela ha anunciado que organizará un torneo femenino y otro masculino. Esa es una vieja reivindicación de algunos de los jugadores españoles, que vieron con estupor cómo una Federación que se financia básicamente a través de los ingresos que genera la Copa Davis desaprovechaba los años de éxitos y bonanza y no invertía, por ejemplo, en el Torneo de Madrid, para cuando vinieran las vacas flacas.

Ahora, en 2015, la española organizará, según fuentes de la institución, lo que quiere publicitar como el Wimbledon del sur, un torneo sobre hierba de categoría challenger que se disputará en verano en Cádiz con el patrocinio de la Diputación y un coste, aseguran, “exiguo” para las arcas federativas, como el sueldo de León. La exjugadora solo cobra un sueldo como directora deportiva, mientras que en su faceta de capitana ha firmado un acuerdo de bonus por objetivos: si España gana la primera eliminatoria de la Davis (en julio y contra el ganador del Rusia-Dinamarca); si se asciende...

Mientras llega ese día, León sigue gestionando su tensa relación con la mayoría de jugadores. Aunque sigue sin haber hablado con Rafael Nadal, campeón de 14 grandes, el pasado fin de semana, según fuentes federativas, lo hizo por primera vez con Garbiñe Muguruza, a los 21 años una de las tenistas más prometedoras del mundo, que acaba de decidir que representará a España (el país de su padre) y no a Venezuela (el de su madre). La tenista disputa estos días el último torneo de 2014. Con el otoño, llegan las vacaciones de los jugadores. Sin embargo, el conflicto no se frena. Con la temporada a un paso de terminar, ya ha llegado hasta los despachos del Gobierno.

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Sobre la firma

Juan José Mateo
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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