_
_
_
_
_

“Un pase bueno lleva mensaje”

El exjugador teoriza sobre la filosofía Ajax antes de medirse al Barça en la Champions

Jordi Quixano
Frank de Boer, entrenador del Ajax.
Frank de Boer, entrenador del Ajax.David Ramos (Getty)

Nada más acabar el encuentro del pasado sábado, el técnico Frank de Boer (Hoorn, Holanda; 44 años) sonreía satisfecho porque le había funcionado la táctica para superar al Dordrecht, que planteó una defensa al hombre por todo el campo. Acostumbrado a hablar de fútbol —muchos días debate en la mesa del comedor del club junto a exjugadores como el director de mercadotécnica Van der Sar, el director deportivo Marc Overmars, el director de la cantera Wim Jonk, el asistente técnico Bergkamp o el entrenador del filial Jaap Stam—, se toma su tiempo para explicar sus ideas y la filosofía Ajax antes de medirse mañana con el Barça en la Champions.

Pregunta. ¿Es normal que un técnico debata con otros sobre las tácticas de su equipo?

Respuesta. Claro. Me gustan esas reuniones. Yo soy el jefe y tomo la decisión final de cómo vamos a jugar, pero siempre escucho a los demás. Y cuando pienso: ‘Vale, yo puedo utilizar esto’, pues lo utilizamos. Si viene Denis y me da una idea y me gusta, se puede probar, ¿por qué no? No me hiere el orgullo. Soy capaz de entrenar a un equipo, pero no soy el genio que ha inventado el fútbol. Por eso estoy abierto a nuevas ideas. El fútbol es evolución.

P. Aunque juegan muy parecido a lo que practicaban Rinus Michels y Stefan Kovacs en la década de los 70, ¿no?

R. Sí, pero es fútbol moderno. Y es nuestra idea. Queremos dominar el partido y el balón, y eso se debe hacer con cabeza, habilidad y táctica, no con fuerza.

P. ¿Habla también con Cruyff?

R. De vez en cuando. Piensa que Klaassen puede ser Busquets. Pero yo le digo que si juega ahí atrás, restamos su penetración. Y en los últimos partidos ha dado siete asistencias de gol… Es importante dominar el centro del campo.

P. ¿Por eso siempre busca superioridad en esa zona, como poner a un lateral de mediocentro en la salida del balón?

Al Barça le tuvimos demasiado respeto. Puedes cometer fallos, pero con confianza”

R. Sí, porque con eso abrimos una línea directa al extremo y el que marca al lateral no sabe qué hacer. Eso se lo vi hacer al Bayern de Guardiola y al principio pensaba: ‘¿Dónde está Alaba? Ah sí, cerca de Ribéry en el centro del campo…’. Y me di cuenta de que eso es muy difícil de entender para el extremo que le marca. En otras ocasiones metemos a un lateral al medio cuando el balón está en el otro lado. Son soluciones de salida del balón ante la presión rival. Así, si un día no va una, ok, probamos otra.

P. ¿Tiene más referencias?

R. Siempre me fijo en los buenos días de los buenos equipos.

P. Además de en la salida de balón, ¿en qué pone especial acento?

No soy el genio que ha inventado el fútbol. Por eso estoy abierto a nuevas ideas”

R. En jugar con la cabeza y los pies. El pase bueno lleva mensaje. Y eso es lo que tienen que entender, que con el pase se dan soluciones al compañero como facilitarle el control orientado o restarle un rival. El problema es que quiero eso 90 minutos y no sólo diez. Tenemos que imitar al Barcelona, que lo pasa bien y con ritmo, pam-pam-pam, para después meter velocidad y lograr el uno contra uno. Mis jugadores saben hacerlo porque lo consiguen en los entrenamientos. Ahora quiero verlo en los partidos.

P. ¿Le falta mucho a su equipo?

R. No. En otros años me sentaba en el despacho y pensaba: ‘Estamos jugando como quiero y ellos también creen en esto’. Y ahora me da la sensación de que estamos llegando a ese punto. Estoy contento; tenemos un equipo muy joven pero las piezas del puzle van encajando. Como ante el Dordrecht.

P. ¿Por qué lo dice?

R. Porque el público quería el balón rápido arriba y se ponía nerviosa cuando Cillessen lo retenía antes de pasarlo. Pero nos marcaban al hombre y teníamos que esperar a que su central subiera a coger el medio. Y cuando jugaban así, teníamos a tres delanteros con tres defensas. Pase largo, peinada y ocasión. Esa es la manera en que hay que jugar cuando un equipo rival te hacer un uno contra uno.

Para mí lo importante es jugar con nuestra filosofía. Si perdemos así, no pasa nada”

P. ¿Y sabe por qué perdieron con el Barcelona?

R. Tuvimos demasiado respeto. Contra ellos hay que presionar cuando se puede y hacerlo con confianza porque así puedes ser mejor con el balón. Puedes hacer un fallo, de hecho tienes que hacer fallos porque tomas riesgos, pero con confianza. Y si tienes miedo, no funciona; firmamos el papel y volvemos al vestuario.

P. ¿Pudo dormir tras la derrota?

R. Pues dormí mal porque no fue mi Ajax. Para mí lo importante es jugar con nuestra filosofía. Y si perdemos así, no pasa nada porque al final de la temporada tendremos más puntos. Seguro.

P. ¿Está preparado para dar el salto a otra liga?

R. Depende del club que venga. Por ejemplo, el Tottenham para mí fue interesante [se especuló con su traspaso en verano] porque pensé que podía entrenarlo. Es como lo que hace Koeman con el Southampton y como hizo el año pasado el Liverpool, que de repente vio que Agger y Skrtel jugaban desde atrás. Creo que esto es lo que puedo hacer en Inglaterra.

P. Y si se fuera, ¿cómo le gustaría que le recordaran en el Ajax?

R. Que la gente piense que soy honesto. Soy un entrenador producto de la filosofía del Ajax que se ha preocupado por subir a jugadores de la academia.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_