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“La tuvo más Mathieu que Messi”

Blanc dice que el cambio táctico de Luis Enrique trastocó más al Barça que al PSG

Luis Enrique da órdenes a Mascherano durante el encuentro.
Luis Enrique da órdenes a Mascherano durante el encuentro. LLUIS GENE (AFP)

Dani Alves no pudo jugar porque estaba sancionado por acumulación de amarillas y Luis Enrique dio un paso adelante. Mandó a la grada a Douglas, el brasileño fichado este verano que ha jugado 70 minutos contra el Málaga y un partido copero en Huesca, y ahí se sentó junto al canterano Montoya, ninguneado hasta el límite, hasta el punto de que su representante ya ha hablado con el club para buscarle una salida en diciembre. Podía apostar por Adriano, teóricamente un lateral zurdo pero hábil por la derecha. Sin embargo, Luis Enrique revolucionó la alineación; dio entrada a Pedro, para sorpresa general, al lado de Neymar, Messi y Luis Suárez, y lo mandó a jugar de extremo, y sacrificó a un defensa, para sorpresa del respetable.

“Lo supimos una hora antes”, desveló Bartra. “Todo lo que sea sorprender es bueno. Lo ensayamos cuando pudimos”, se justificó Luis Enrique. “Hemos ensayado toda la semana lo que íbamos a hacer, pero no quién iba a jugar”, aclaró Iniesta. “Sabíamos que íbamos a jugar con tres en la salida del balón”, añadió Mathieu antes de reconocer que durante el partido no se sintió cómodo porque fue una papeleta marcar a Lucas: “Ya sabía que iba a ser complicado, pero creo que he ayudado al equipo”.

“Hemos ensayado toda la semana lo que íbamos a hacer, pero no quién iba a jugar”, aclaró Iniesta

“Los jugadores ya saben que todo lo que se filtre no es interesante. Todo lo que sorprenda es mejor; nada más dar la alineación, Blanc ya hacía gestos de que salíamos a jugar con una que línea de tres. Siempre es interesante”, expuso el técnico barcelonista que, siguiendo la corriente de lo que implantó en Nicosia cuando el Barcelona tenía la pelota pero a la brava —“se trataba de correr mucho y todos para defender”, dijo Luis Enrique—, el técnico asturiano decidió apostar abiertamente por renunciar a jugar con laterales. Si contra el Apoel los adelantó hasta juntarlos con los dos volantes, ante el PSG definitivamente los borró del mapa y, con Piqué como eje, mandó a Mathieu a la izquierda y a Bartra a la derecha.

“Buscábamos tener más posibilidades de tener más espacios, mejor salida de balón por delante de la defensa con Mascherano y Busquets, fijar sus defensas con nuestra delantera, ser más efectivos en todas las fases del juego”, explicó Blanc, técnico del PSG. “Yo interpreto el fútbol siempre desde un prisma ofensivo; entendíamos que era la mejor forma con los jugadores que teníamos. Da igual con cuatro o cinco con perfil ofensivo; se corren riesgos pero se aceptan”.

Hace demasiado que no se le recuerda a Bartra un partido malo, juegue donde juegue y al lado de quien juegue, y si hubo un tiempo que su presencia en la plantilla generaba dudas, con Luis Enrique parece haber crecido en presencia y en prestaciones. Nadie recuperó más balones que él (14) sin necesidad de cometer una falta en todo el partido y fue el jugador que más acciones de ataque (104) inició para el Barcelona. “Bartra ha jugado un gran partido, como central y como lateral en fase defensiva. Lo quité porque tenía calambres”, dijo el técnico asturiano. “A mí me tocaba darle amplitud al campo al no estar Alves; siempre intento estar concentrado y darle al entrenador lo que me pide y estoy contento porque no era fácil”, admitió Bartra.

“No es el sistema, son los jugadores los que hacían las diferencias”, dijo Blanc. “No nos ha trastocado nuestros planes, sinceramente creo que les ha trastornado más a ellos que a nosotros”, razonó el técnico del PSG. “Tuvo más la pelota Mathieu que Messi. Lo peligroso del Barcelona no es su defensa de tres, son Neymar, Messi y Suárez”.

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