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El sobreesfuerzo de Isco

El mediapunta del Madrid no imaginó que se convertiría en titular indiscutible cuando se propuso sacrificarse en defensa durante las dos semanas de lesión de Bale en octubre

Diego Torres
Isco celebra un gol en un patido de Liga.
Isco celebra un gol en un patido de Liga.AFP (J. Guerrero)

Las chanzas que inspiró Isco entre sus compañeros dieron mucho que hablar en Valdebebas. Los jugadores del Madrid se reían. Lo llamaban “la estrategia de Isco”. El malagueño se propuso aprovechar la baja que sufrió Gareth Bale antes de viajar al campo del Levante, el 18 de octubre, para hacer un esfuerzo supremo que demostrara a la afición que merecía la titularidad. Una exhibición de derroche físico en apenas dos o tres partidos, sin más pretensiones que la reivindicación popular, pues nadie en el vestuario imaginaba que acabaría convirtiéndose en un hombre insustituible. Isco tampoco. Isco creyó que al regreso de Bale, él volvería al banquillo. Se equivocó. Dos meses y medio después, el mediapunta solo dejó de jugar cuando lo suspendieron frente al Celta por recibir una doble amarilla en La Rosaleda. Hoy en Mestalla (17.00 horas, Digital+ y GolT) ejercerá un papel fundamental siempre y cuando siga haciendo sobreesfuerzos para adaptarse a las necesidades del mediocampo.

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“Por características físicas”, explica el entrenador, Carlo Ancelotti, “los demás jugadores tienen más condiciones que Isco para jugar en el centro del campo. Si tengo que compararlos, James tiene más condiciones para el trabajo defensivo. Isco ha tenido que hacer un esfuerzo mayor para adaptarse, y lo ha hecho muy bien. La clave del éxito en este equipo es que todos los jugadores tengan esa mentalidad para el trabajo defensivo. Sin esa lucha es más complicado que demostremos toda la calidad que tenemos en la plantilla. Nos pasó en el amistoso contra el Milan la semana pasada...”.

Ancelotti no deja de advertir que sin la máxima tensión defensiva el Madrid no resistirá el contraste con los grandes rivales. Algunos futbolistas apuntan que sin Modric, cuya recuperación se anuncia para febrero, esta realidad se recrudece. “Modric es el mejor volante”, dicen.

Hasta la reaparición de Modric, en la zona ancha del campo convivirán Kroos, James e Isco como trío principal. El malagueño de 22 años, que por razones biológicas es el eslabón más débil, ha equilibrado la balanza a base de pundonor. Promedia 5,4 balones robados por partido esta temporada. Más que James (5,1).

La llamada estrategia de Isco, un plan de carácter coyuntural para quedar en el recuerdo de la gente como un futbolista valioso, debe prolongarse sine die. De forma rutinaria. Isco, futbolista creativo cuyas cualidades le convierten en un mediapunta natural, tiene que correr como un mediocentro si quiere estar a la altura de las exigencias. Más de lo que nunca pensó que correría.

Isco se sacrificó más porque todos tienen más condiciones que él”, dice Ancelotti

Los compañeros dan fe de que Isco vive una especie de dulce suplicio. El reconocimiento le está costando litros de sudor. Tanto que, cuando va con la selección, sus colegas detectan que allí recobra el aliento. Con España, Isco vuelve a ser él mismo. En la selección sub 21 (eliminada de los Juegos de Río) estaban Saúl y Sergi Roberto para ejercer de mediocentros y él se dedicó a dar el toque de calidad. En la selección absoluta igual: el trabajo sucio corresponde a Busquets, Koke, o Bruno. Tras la victoria (3-0) contra Bielorrusia, el seleccionador, Vicente del Bosque, apuntó lo que le pareció una actuación algo frívola: “Isco se ha enredado en jugar muy fino...”.

Nació para dar el último toque a la jugada. Nunca había corrido tanto

La estrategia de Isco preveía sacrificios circunstanciales. Concretamente, cuando Bale alegó un problema muscular en el glúteo durante el viaje a Valencia del 18 de octubre. En principio, la dolencia no le mantendría fuera de competición más de dos semanas. Todos sabían —Isco el que más— que cuando el galés se recuperase volvería al equipo inicial. Pero ocurrieron dos imprevistos. Primero, que Bale permaneció más de dos semanas fuera de la competición y que Isco fue titular contra el Levante, el Liverpool, el Barcelona y el Granada, algunos de los mejores partidos que ha jugado el Madrid en los últimos años. Segundo, que Modric se lesionó de gravedad.

Desde entonces, Isco se ha transformado en un futbolista más solvente. La hinchada le ha elevado a la condición de ídolo. Y el Madrid parece depender de la prolongación hasta mayo de un plan de esfuerzo concebido para dos semanas de octubre.

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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