_
_
_
_
_

El lento regreso de Valdivia

El 'Mago', odiado o amado, vuelve a competir en la Copa América tras un paso más que discreto por el Mundial de Brasil

Jorge Valdivia, durante el partido contra México
Jorge Valdivia, durante el partido contra MéxicoM. BERNETTI (AFP)

Como suele pasar con los dieces puros, Jorge Valdivia genera pasiones contrapuestas. Puede ser abroncado por sus compañeros por no hacer coberturas (como en el primer tiempo) o levantado en hombros (como hubiese pasado si el árbitro no le anula el golazo que hubiese significado el 4-3 y la clasificación chilena). Desde el último Mundial, cuando Jorge Sampaoli decidió quitarlo de los partidos importantes, tiene una deuda consigo mismo. No pudo brillar en un torneo jugado precisamente en Brasil, país donde juega y donde también produce arrebatos de entusiasmo y exasperación: frágil muscularmente, le cuesta completar temporadas completas y alcanzar el punto de forma que le permita decidir partidos con su recurso predilecto, el último pase.

A sus 31 años, recompuesta la relación con el seleccionador y menos dado a distracciones festivas, el ‘Mago’ trabaja para reivindicarse en su casa después de haber estado parado en el Palmeiras entre diciembre y abril por un desgarro muscular. En el entorno de la selección chilena esperan que el enganche alcance su mejor forma a finales del torneo: necesita encuentros completos, aseguran, para “estar verdaderamente fino”. Precisamente eso, “fineza”, es lo que confesó haberle faltado el día del debut contra Ecuador, cuando desapareció del juego tras veinte minutos iniciales primorosos. En aquel partido acabó siendo sustituido por Matías Fernández, que se autoexpulsó en 25 minutos y no estaba disponible ayer para darle refresco en un partido vertiginoso.

Valdivia mostró durante el encuentro señales claras de incomodidad en un partido de ida y vuelta constante, que sin embargo irían paradójicamente descendiendo a medida que se acumulaban los kilómetros en sus piernas. Perdió la mayoría de sus duelos individuales, no pudo acompañar algunos contraataques fulgurantes de Alexis o Vidal y perdió un gol cantado por medio metro. Sin embargo, logró aguantar todo el partido, marcó un golazo que debió subir al marcador y fue, a la postre, el jugador que más pases buenos dio del partido (51). Su entrenador respaldó la labor realizada a pesar de los problemas colectivos del equipo: “Valdivia jugó un gran partido, a gran nivel. Hizo un gran gol que le anularon injustamente. La verdad es que fue un jugador muy valioso”, dijo en rueda de prensa tras destacar al decisivo Vidal (“está mucho mejor que en Mundial”).

“Valdivia jugó un gran partido, a gran nivel. Hizo un gran gol que le anularon injustamente. La verdad es que fue un jugador muy valioso”, dijo su entrenador, Sampaoli

Sólo hace unos días, Alexis Sánchez afirmó que “nunca había visto así” a su compañero Jorge. “A veces hace más trabajos que los que tiene que hacer. Lo queremos fresco, para el último pase”, añadió el ídolo chileno, quien incluso rebautizó cómicamente a Valdivia como “perro nuevo”: “Se parece a mí. Corre para allá y para acá”. Como es habitual, no hay consenso sobre el ‘Mago’. A los diez minutos de partido, en la tribuna de prensa, un grupo de periodistas argentinos y chilenos concluían que “sencillamente no está para jugar”. Al final del partido le daban el beneficio de la duda tras un meritorio partido en el que logró dosificar sus energías y pudo haber sido determinante. Con Vidal en pleno crecimiento y el ‘matador’ Vargas en plena recuperación, ninguna noticia mejor habría para Chile que el pleno restablecimiento de un jugador por el que, cuando está fino, merece la pena pagar una entrada.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_