Hamilton vuelve a ser el más rápido

Las cosas no cambian en la fórmula 1 y tampoco en Mercedes. Ninguna escudería consigue hacer sombra a los monoplazas plateados, que se mueven por el Mundial como Pedro por su casa. En Hungría, la escudería situó sus dos bólidos en la primera línea de la parrilla por sexta vez consecutiva y octava en lo que se lleva de año. Y mantuvo a distancia al Ferrari de Vettel, tercero a siete décimas del líder, y el Red Bull de Ricciardo, cuarto, con mucho mejor ritmo en este circuito que exige una buena aerodinámica. Sin embargo, en Mercedes, Nico Rosberg no logra romper la hegemonía de Lewis Hamilton, que volvió a marcar el mejor tiempo y es el piloto en activo que lleva más pole positions -47, por 45 de Vettel-.

En una carrera donde adelantar resulta francamente difícil, partir desde el primer puesto de la parrilla supone una ventaja enorme. Hamilton afronta una carrera en la que podría aumentar aún más la distancia de 17 puntos que ahora mismo le separa de su compañero de equipo en la lucha por el título mundial. El resto de escuderías, incluyendo Ferrari, parecen relegadas a un papel absolutamente secundario en esta guerra que mantienen los dos pilotos de Mercedes.

A pesar de las buenas expectativas que había despertado en las sesiones de entrenamientos libres, McLaren volvió a decepcionar. Después de haberse clasificado en octavo lugar el viernes, Fernando Alonso comentó que había que estar a la espera de comprobar qué hacían algunos equipos que estaban escondiendo cartas. Y el asturiano no se equivocó. McLaren mejoró, eso es cierto. Pero fundamentalmente en el aspecto de fiabilidad, porque al menos pudieron concluir las sesiones entrenamientos sin problemas… aunque el español sufrió una avería en el motor en la segunda tanda de la clasificación y tuvo que llegar a su taller empujando el coche con la ayuda de los comisarios. Así que la mejora anunciada en la unidad de potencia de Honda no fue suficiente para convertir el McLaren en un coche competitivo.

Alonso entró por pelos en la Q2, a casi dos segundos del líder, Hamilton. Y Jenson Button no logró salvar la Q1 y se encalló en la primera tanda. Partirá desde la 16ª posición. El español ni siquiera consiguió marcar un tiempo en la segunda tanda, antes de sufrir una avería. En el taller sus mecánicos intentaron resolver el problema para que su piloto pudiera regresar a la pista, pero no lo consiguieron. Alonso saldrá desde la 15ª posición. “El coche ya se había parado dos veces antes en aquella vuelta, y en la tercera ya no volvió a ponerse en marcha. Me dijeron que era un problema en la unidad de potencia, pero hay que analizarlo bien para saber exactamente qué es”, señaló el español. “Creo que habría podido situarme entre el 12º y el 13º lugar, pero tampoco más. En cualquier caso el problema nos llegó en el peor momento, porque la clasificación es crucial en este gran premio, por la dificultad que hay para adelantar. Haremos lo que podamos en la carrera”.

Por su parte, Carlos Sainz entró también en la Q2, pero su Toro Rosso no le permitió colocarse entre los 10 últimos. Partirá desde la 12ª posición. “Creo que habíamos hecho un buen fin de semana hasta ahora y hoy el coche repondía de forma muy distinta”, señaló el piloto madrileño. “La pista estaba diferente y eso cambió mis referencias. No logré encontrar un buen ritmo y eso me perjudicó. Más que la temperatura, lo peor fue el viento que te llegaba de forma muy distinta según las curvas. La carrera será difícil. Pero todas lo son”. En cambio, Max Verstappen, su compañero de equipo le superó en una décima y saldrá desde el noveno lugar. Roberto Merhi volvió a superar a su compañero, Stevens, y concluyó el penúltimo.