La cruz del Barça son los laterales

Adriano Correia causó baja ayer, horas antes del partido de la Supercopa contra el Athletic, por una pubalgia cuyo alcance es una incógnita de acuerdo con el parte médico facilitado por el Barcelona. Aunque las lesiones han sido una constante en su carrera como futbolista azulgrana, el cuerpo técnico le tiene por un jugador fiable, adaptable a varias posiciones —puede actuar en las dos bandas como lateral o también de volante—, y como tal necesario para el equipo, al punto que el club tiene previsto ofrecerle la renovación de un contrato que expira en junio de 2017.

Así se indicó desde la junta barcelonista como respuesta a la oferta que Adriano ha recibido del Roma. El jugador se desdijo de sus planes iniciales, que pasaban por aceptar la propuesta del calcio, después de conversar con Luis Enrique durante la gira por Estados Unidos. El técnico le convenció de que puede tener más protagonismo que la temporada pasada por su polivalencia en un plantel condicionado por la vulnerabilidad de los laterales: Jordi Alba está también lesionado, al igual que Douglas, mientras que Alves es especialmente irregular, capaz de protagonizar excelentes actuaciones o partidos malos como el de la ida en San Mamés.

Adriano se desdijo de sus planes iniciales, que pasaban por aceptar la propuesta del calcio, después de conversar con Luis Enrique durante la gira por Estados Unidos

El fichaje de Aleix Vidal, que no podrá jugar hasta enero, se explica en parte por su capacidad para actuar también por la banda derecha, incluso como zaguero, puesto que ya ocupó en el Sevilla. Luis Enrique incluso ha utilizado para el puesto durante la pretemporada a un interior como Sergi Roberto.

Las alternativas

Alves es de todas maneras tan indiscutible en un flanco como Jordi Alba en el otro. El problema del internacional catalán también son las lesiones, aunque para cubrir su plaza están Mathieu y Vermaelen, centrales zurdos que pueden actuar en la banda izquierda. La opción de Grimaldo, futbolista del filial, no parece ser de momento muy interesante para Luis Enrique.

Fichado en 2010 del Sevilla, Adriano firmará próximamente su segundo contrato con el Barça cuando está a punto de cumplir los 31 años. El lateral brasileño ha disputado un total de 171 partidos con el Barcelona, ha marcado 16 goles y dado 19 asistencias. En ninguna de las competiciones jugó más del 50% de los minutos posibles, ya sea por su condición de suplente o por lesión: en la Liga ha actuado el 42% del tiempo posible durante cinco temporadas; en la Supercopa, el 46%; y en la Champions, el 35%. Su participación ha menguado con el tiempo y el curso pasado fue la menos productiva, circunstancia que le llevó a plantearse la salida del Camp Nou.