_
_
_
_
_

Benítez proclama la permuta total

El entrenador del Madrid, que impulsa el intercambio continuo de posiciones entre sus cuatro atacantes para “confundir” al rival, sorprende a sus propios jugadores

Diego Torres
Benítez, durante el entrenamiento del lunes.
Benítez, durante el entrenamiento del lunes.Sergio Barrenechea (EFE)

Atribulado porque desde el club le imponían sacar a Bale de la banda derecha y ante la evidencia de que Cristiano no quería ceder su puesto en la izquierda, Rafa Benítez concibió una solución de compromiso. El entrenador del Madrid resolvió situar a Bale en la mediapunta —en teoría, la posición donde más incómodo se encontraría— pero fomentó lo que él denomina “permutas”. Así, el técnico recibió a sus atacantes en julio adoctrinándoles con la nueva idea. Se trataba de realizar un continuo intercambio de posiciones entre los dos extremos, el punta y el mediapunta, en una circulación que, de paso, sacaría a Bale de la jaula del medio del campo para llevarlo a las bandas donde, eventualmente, le resultaría más fácil encontrar espacios para correr. Argumentó que de ese modo confundirían al rival. Pero en la plantilla no faltaron suspicaces que intuyeron que el invento perseguía el desahogo de Bale y la satisfacción de sus valedores en la junta.

Más información
“No puedo decir que Cristiano sea el mejor”
El Madrid, una defensa de récord
Cristiano recupera el gol a lo grande

“Cuando me hice cargo del equipo entendí que arriba había muchísimo talento y que debíamos jugar al ataque”, explicó ayer Benítez, después del último entrenamiento antes de recibir al Shaktar en el Bernabéu (20:45 horas, Antena3). “No podíamos encasillar a los jugadores en un sistema y quitarles la libertad. Conseguir cierto equilibrio entre ellos no es fácil porque cada uno quiere desarrollar sus cualidades en una zona del campo. Pero cuando interpretan bien lo que tienen que hacer es un equipo demoledor. Y terminan en posiciones que no son las de partida. No le puedo quitar a Bale la posibilidad de correr a la espalda de la defensa, o a Cristiano la de ir hacia adentro, o a Isco de recortar hacia el medio y tirar una pared, o a Benzema la de moverse en profundidad. Intento que lo coordinen lo más posible entre ellos”.

En la plantilla creen que todo gira en torno a la idea de sacar a Bale del atolladero del medio

El atasco que exhibió el Madrid durante la pretemporada fue, según algunos jugadores, producto del intento de hacer “permutas” generalizadas. Quienes conocían a Benítez de otras etapas aseguraban que el técnico jamás había practicado esta solución y advertían de que jugadores como Bale y Cristiano carecían de la ductilidad necesaria para saltar de las bandas a posiciones interiores. El equipo se quedó sin marcar en cuatro de los diez amistosos de pretemporada y después de empatar (0-0) en Gijón hubo futbolistas que trasladaron su preocupación a Benítez. Las permutas creaban tanta confusión en los contrarios como en los propios.

Ángel Cappa, que fue entrenador del Madrid, establece una analogía con el teatro. “Las permutas no son nada nuevo ”, dice; “el primer gol de Raúl en Primera es un intercambio de posición con Zamorano, que corre hacia el banderín de córner. Estos movimientos requieren improvisación, pero para eso hay que ensayar mucho. Los actores solo improvisan bien cuando se saben el guión de memoria, y no todos pueden ser buenos actores. El más indicado para permutar en el Madrid es Benzema”.

Solo la aparición de Benzema y James, en la segunda jornada de Liga, disipó el desconcierto en el ataque madridista. En los dos encuentros que ha disputado el Madrid desde entonces, contra el Betis y el Espanyol, el equipo metió 11 goles. De paso, Bale hizo viajes a la zona donde le ponía Ancelotti, la banda derecha, desde donde dio una de las asistencias a Cristiano.

"La clave de los movimientos sin balón es Benzema", observan Sarabia, Milla y Cappa. 

“La clave es Benzema”, opina Manu Sarabia, que fue mediapunta del Athletic, es entrenador, y asistió como comentarista al último partido de Cornellà. “Porque la movilidad no es moverse porque sí”, prosigue. “A veces el mejor movimiento es quedarte parado. Cambiar de posición dos jugadores es fácil. A partir de ahí, todo se va complicando. Necesitas futbolistas inteligentes y no todos los jugadores dominan el espacio para jugar en el medio, en donde los espacios se reducen y los rivales te pueden venir desde 360 grados”.

Luis Milla, el entrenador del Lugo, coincide con Sarabia: “Los movimientos sin balón ayudan a desequilibrar al rival, pero para hacerlos dependes de las condiciones de tus jugadores. Los atacantes del Madrid se mueven a partir de la referencia de Benzema”.

Rafa Benítez coincide. Piensa como Sarabia, Cappa, Milla o Carlo Ancelotti. Lejos del ruido de la hinchada, los profesionales concuerdan en lo esencial. En la orquesta de las permutas el director es Karim Benzema. Esta noche el Shaktar pondrá a prueba el invento.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_