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Japón desafía la frontera entre el fútbol y el rugby

La arriesgada apuesta del cuadro nipón, derrotado ante Escocia, aplica algunos planteamientos de Guardiola

Partido entre Escocia y Japón este miércoles.
Partido entre Escocia y Japón este miércoles.C.Hughes (AP)

Cuando Eddie Jones termine su etapa al mando de la selección japonesa a la conclusión del Mundial podrá analizar la importancia que tuvo su charla con Pep Guardiola en diciembre de 2014. La creencia del australiano en que los conceptos del fútbol son aplicables al rugby, sobre todo la exigencia de mover el balón al espacio, le llevaron a consultar al entrenador del Bayern de Múnich. "Sus equipos juegan el pase de juego más fantástico que hayamos visto jamás y los principios son exactamente iguales", dijo entonces. El experimento que les valió una página en la historia tras vencer el sábado a un doble campeón del mundo como Sudáfrica no pudo este miércoles con la mayor frescura escocesa, pero su innovación supone un desafío a los cánones.

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Antes de visitar Múnich para observar los entrenamientos de Guardiola, Japón venía de caer ante Rumanía y Georgia en la partidos amistosos de noviembre y sus expectativas para el Mundial, donde no conocían la victoria desde 1991, no eran halagüeñas. Solo Jones sabe qué aprendió de la experiencia, pero hay aspectos en su juego que recuerdan al planteamiento del técnico español.

Pese a su buen rendimiento puntual de su delantera, la clave para Japón no viene tanto por la fuerza sino por su habilidad para ocupar el espacio y explotar así su velocidad. Es ahí donde triunfó contra Sudáfrica, con una última jugada muy larga en la que el oval partió de fijar al rival en el lado derecho para terminar posando junto a la banda izquierda. Otra de las claves que busca Jones es reducir el tempo entre cada fase, la acción desde que el balón es liberado del ruck hasta que el jugador es placado, con el objetivo de que el rival no tenga la opción de colocarse y que el tempo del partido sea alto. El cuadro nipón no digiere bien los momentos en que no tiene el balón y acaba cometiendo faltas de disciplina para recuperarlo que le cuestan puntos.

Australia vence a una dura Fiyi

L.J.G.

Un omnipresnete David Pocock llevó a Australia a la victoria contra Fiyi (28-13) en el primer partido de su equipo en el Mundial de Inglaterra, disputado en el Millenium Stadium de Cardiff. El flanker se erigió protagonista del juego desde la tercera línea y anotó los dos primeros ensayos, en torno la media hora de juego, ampliando irremediablemente las diferencias entre ambos equipos.

La marca de Sikope Kepu pareció cerrar el encuentro para los Wallabies tras la reanudación (25-3), pero Fiyi controló la segunda mitad, recortó ventajas con el ensayo de Ben Volavola y jugó el tramo final del partido con superioridad numérica por la tarjeta amarilla que vio Tevita Kuridrani. Las faltas de disciplina condenaron a con demasiadas penalizaciones a una valiente Fiyi, el primer equipo del torneo en sumar dos derrotas.

Australia, que lucha por los dos puestos para cuartos con Inglaterra y Gales, prefirió asegurar la victoria con una patada de su apertura Bernard Foley, la única anotación de su equipo en los últimos 36 minutos, que buscar el cuarto ensayo. Encerrados en su línea de 22 metros durante el tramo final, los Wallabies no tuvieron opción de volver a marcar y se quedaron sin el punto bonus que sí consiguió Inglaterra ante el cuadro oceánico en el choque inaugural. El equipo de Michael Cheika buscará el domingo su segunda victoria ante Uruguay.

Como todo plan innovador tiene aristas, Escocia ha hecho que los japoneses pagaran este miércoles su atrevimiento, y su cansancio, en lo que acabo siendo una contundente derrota (45-10). El planteamiento nipón es tremendamente arriesgado, buscando que la jugada continúe, aunque para ello sea necesario asumir cualquier riesgo. Escocia se limitó a ponerse el corsé táctico y aprovechó los errores de Japón, sin apoyos defensivos ni físicos apenas cuatro días después de su hazaña, contra un XV del Cardo que debutaba en el torneo.

Los Cerezos Valientes sorprendieron al mundo con su triunfo sobre Sudáfrica, pero en las semanas previas el grupo era muy consciente de sus posibilidades. En el rugby, deporte en el que avance de status solo se entiende en el largo plazo, hablar de ganar tres partidos sonaba temerario. Esa confianza en sí mismos les lleva a una romántica anarquía, siendo los jugadores quienes toman decisiones importantes en el campo con la imprevisible lógica de las emociones, como buscar el ensayo y sacrificar una patada a palos en inferioridad numérica.

Los nipones dominaron la posesión y recorrieron más metros que Escocia durante gran parte del partido, forzando un marcador igualado (12-10) al descanso. Luego las piernas dijeron basta y el equipo europeo se marchó a la caseta con el punto bonus de los cuatro ensayos que complica la clasificación para cuartos de este revolucionario XV nipón.

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