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La Juventus sigue en caída libre

El campeón cae en Nápoles (2-1) y solo suma 5 puntos de 18 posibles Higuaín se reivindica con un golazo

Insigne celebra un gol del Nápoles.
Insigne celebra un gol del Nápoles.Salvatore Laporta (AP)

La Juventus, próximo rival del Sevilla en la Liga de Campeones, aumentó su crisis con una derrota por 2-1 ante el Nápoles, en San Paolo, donde el argentino Gonzalo Higuaín se reivindicó con un buen gol, en la semana en la que el Tata Martino decidió dejarle fuera de la selección albiceleste, reemplazado por el juventino Paulo Dybala.

"La madre de todos los partidos", como calificó el encuentro Aurelio de Laurentiis, presidente del Nápoles, se decidió por dos fogonazos de los atacantes locales; el dúo formado por Lorenzo Insigne e Higuaín, que se bastaron para desnudar las carencias de un campeón venido a menos, que en seis partidos de Liga no ha sido capaz de sumar más que cinco puntos. Porque, por mucho que el técnico Massimiliano Allegri se encargue de recordar que el Juventus fue campeón con 15 empates, en el primer título de su último ciclo triunfal, la "Vecchia Signora" no da síntomas de mejora.

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En San Paolo, Allegri dejó fuera del once inicial a Alvaro Morata y formó con Buffon; Padoin, Bonucci, Chiellini, Evra; Lemina, Hernanes, Pogba, Pereyra; Dybala y Zaza. Fue Simone Zaza el que tuvo la primera ocasión, desbaratada por el español Pepe Reina al cuarto de hora, pero el Juventus no dio la impresión de controlar el juego. De hecho, tuvo más posesión el Nápoles, que se adelantó en el minuto 26, en una jugada en la que Insigne robó el balón junto al área rival, hizo una pared con Higuaín y batió con un gran disparo a Buffon.

Primer motivo de satisfacción para Higuaín, que carga con la culpa de los últimos reveses de la Albiceleste y ha sido desplazado de la selección esta misma semana en favor del joven Dybala. El "Pipita", que pronto tendría como compañero de ataque al belga Dries Mertens, sustituto del lesionado Insigne, culminaría su actuación con un gran gol en el segundo tiempo, en una jugada que partió de un balón perdido en ataque por Dybala. Higuaín recorrió 25 metros y culminó su cabalgada con un disparo cruzado que batió a Buffon (m.62). Sustituido en el minuto 83, el delantero del Nápoles recibió la ovación de todo el estadio, convertido en el héroe local, en la que parecía su semana más difícil. Sólo cuando tuvo todo perdido, dio muestras de peligro el Juventus, que recortó la desventaja con un tanto de Lemina apenas un minuto después y se volcó sobre el campo rival, pero sin acierto ni ideas para evitar su sorprendente tercera derrota en seis partidos.

En el otro partido de la Serie A disputado este sábado, el Roma, uno de los rivales del Barcelona en la Liga de Campeones, goleó con comodidad al modesto Carpi (5-1), que aún no conoce la victoria en su debut en la máxima categoría. El conjunto de Rudi García, que también ha tenido un arranque irregular tras ceder dos empates y una derrota, acabó con cualquier duda en siete minutos (del 24 al 31), apoyado por la escasa tensión defensiva del Carpi, el penúltimo clasificado que aún no conoce la victoria en su debut en la categoría.

El griego Kostas Manolas, que el jueves se marcó en propia meta el gol del triunfo del Sampdoria (2-1), se resarció al abrir el marcador en el minuto 24 desde el centro del área, libre de marca. Cuatro minutos después, el bosnio Miralem Pjanic ejecutó con acierto un libre directo y, en el 31, prácticamente sentenció el partido el marfileño Gervinho, que empaló el balón tras un rechazar el meta del Carpi un duro disparo de Maicon. Pese a que el conjunto visitante reaccionó por medio del exromanista Marco Borriello (m.34), no peligró el triunfo del subcampeón italiano que, tras el descanso y ya con Francesco Totti en el campo, amplió la ventaja con un gol del egipcio Mohamed Salah (m.51) y otro de Lucas Digne (m.68). Totti, que fabricó la jugada del cuarto tanto romanista, no estuvo más que diez minutos sobre el terreno de juego, tras sustituir a Edin Dzeko, se marchó con lesionado en el 56. Vapuleado, los visitantes no aprovecharon ni el penalti que dispuso en el último cuarto de hora; lo detuvo Morgan De Santis, que adivinó el lanzamiento y posterior remate del brasileño Ryder Matos. Con la victoria, el Roma se encarama de forma provisional al tercer puesto.

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