La última oportunidad de Dunga

Argentina y Perú. Dos partidos que van a definir la situación del seleccionador Dunga al mando de la tambaleante selección brasileña, quinta en las eliminatorias y fuera de la zona de clasificación directa para el Mundial de 2018. En caso de victorias y fútbol convincente, el seleccionador puede mantenerse en el cargo al menos hasta marzo de 2016, cuando se disputarán las próximas rondas de clasificación para el Mundial. Sin embargo, los malos resultados pueden sellar el despido del seleccionador y la sustitución de toda la comisión técnica de Brasil.

Mientras el actual entrenador de la selección brasileña vive días de tensión, Tite, el del Corinthians, principal candidato a ocupar el cargo en 2016, se divide entre la celebración del probable título del campeonato brasileño y preguntas sobre su futuro al frente de la selección. El martes habló una vez más de la posibilidad de asumir el mando de la selección nacional poco después del final del Brasileirão, en diciembre. "Hoy no dejo el Corinthians por nada. Vivo un momento muy especial aquí, tenemos mucha cosa por delante. Hemos trabajado duro para llegar a este momento y no hay nada más importante que eso. Tengo tres años más de contrato por delante".

Quien conoce a Tite sabe que él jamás negociaría con la Confederación Brasileña de Fútbol mientras Dunga esté empleado. Sin embargo, en los bastidores, la sustitución es muy probable. Los dos próximos partidos de Brasil en las eliminatorias son las últimas cartas de Dunga para mantenerse en el cargo.

En Brasil, la impresión es que hay muchas razones para apostar por una victoria sobre Argentina. Dunga tiene hoy, en su opinión, al mejor jugador del mundo a su disposición. Neymar está de vuelta al equipo en el partido contra la albiceleste y solo asume esta condición de número uno del planeta gracias a la ausencia de Messi, lesionado, que le deja el puesto destacado al delantero brasileño tanto en el Barcelona como en el clásico del sudamericano. Por si no bastase la ausencia de Messi, Argentina tampoco podrá contar con otros grandes jugadores: Agüero, Tevez, Zabaleta y Garay fueron descartados por lesión y Pastore, uno de los jugadores destacados del PSG, corre el riesgo de quedarse fuera. Además, hace tiempo que el fútbol argentino no vivía una fase tan complicada. Bajo el mando de Tata Martino, el equipo logró apenas un punto en los dos primeros partidos de las eliminatorias. Fue derrotado por 2 a 0 por Ecuador en Buenos Aires y empató 0-0 con Paraguay en Asunción. Entra en campo este jueves presionado y debilitado, sin sus principales delanteros.

Sería difícil imaginar un escenario más favorable a una victoria de Brasil en casa de su rival, ¿verdad? Pues no. Por lo menos en opinión de Dunga, Brasil tiene motivos de sobra para preocuparse. "Argentina juega en casa, tiene otros jugadores que juegan en los mejores clubes de Europa, es el subcampeón mundial, tiene un trabajo de 10 años prácticamente con la misma base de jugadores, por lo que es un equipo muy fuerte". ¿Pero la ausencia de Messi no representa una pérdida significativa de poder del equipo? "No hay favoritismo de una o de otra, los dos equipos tienen jugadores de repuesto". El mediocampista Elias, sin embargo, no está de acuerdo con el seleccionador: "Messi es un jugador insustituible".

Es natural que en estos momentos el discurso de Dunga opte por la precaución y desvíe muy lejos el favoritismo de Brasil. El seleccionador ha convivido a diario con preguntas sobre su probable despido. En la rueda de prensa que ofreció este miércoles por la mañana, Dunga respondió al menos dos veces a preguntas sobre la sustitución del mando del equipo a finales de año. Más tranquilo que de costumbre, trató de reducir al mínimo el malestar causado por la mala impresión de su trabajo y la convivencia con el fantasma de Tite. "Todo eso no pasa de especulación, no tengo más que decir. Comenzar un trabajo en la selección es difícil para todo el mundo. Después de dos partidos, las personas que ya quieren que se solucionen los viejos problemas, pero no es así. Hablamos de trabajo a largo plazo. Los aficionados tienen que entender que los jugadores llegaron el lunes, algunos el martes, entrenamos el miércoles y vamos a jugar el jueves. Así que ha aumentado la dificultad".

A pesar de usar la falta de tiempo como justificación para un posible tropiezo, Dunga sabe que por el lado argentino la programación ha sido exactamente la misma. Algunos jugadores de ambos equipos salieron juntos de Europa, por lo tanto él y Tata Martino se enfrentan a las mismas dificultades en cuanto a la logística de los entrenamientos. Para empeorar un poco la situación del brasileño, una derrota en Buenos Aires sería la primera suya al mando de la selección frente al mayor rival. En su primer paso por el cargo, Dunga estuvo al mando de la canarinha en el clásico cinco veces, con cuatro victorias y un empate.

Para hacerles la vida difícil a los argentinos, Dunga no ha dado a conocer la alineación del equipo que entrará en campo en Buenos Aires. Ha cerrado los entrenamientos y no ha permitido a la prensa seguir la configuración del equipo. La principal duda es quién saldrá para que entre Neymar. Douglas Costa, jugador destacado del Bayern de Múnich, Ricardo Oliveira, máximo goleador del Campeonato Brasileño, y Oscar son los principales candidatos. En la portería, Cássio, Alisson y Jefferson aún compiten por la vacante. Lo único seguro es que Neymar estará en el campo. El seleccionador sabe bien que de los pies del delantero del Barcelona deben de salir las mejores jugadas de Brasil. En estos momentos, el éxito del equipo en las eliminatorias depende de Neymar .Y, probablemente, también el empleo de Dunga al mando de la selección brasileña.