Curry y los Warriors van de récord
Golden State suma su décimo triunfo seguido con 46 puntos de su base ante los Wolves (116-129), mermados por la baja de Ricky Rubio
No bajan de 100, no paran de ganar y no dejan pasar un partido sin dar espectáculo. Así volvieron a hacerlo en Minnesota. Los Golden State Warriors sumaron su décima victoria (116-129) y superaron el mejor arranque de su historia. La anterior, con los nueve primeros partidos de la temporada ganados, se remonta a 1960, cuando el equipo se llamaba Philadelphia Warriors y lo lideraba Wilt Chamberlain.
El mejor inicio de temporada absoluto en la NBA lo comparten, con 15 victorias seguidas, los Houston Rockets de Hakeem Olajuwon, Otis Thorpe y Vernon Maxwell, y los Washington Capitols, en los albores de la Liga, en 1948. Los seis próximos rivales de los Warriors son Brooklyn, Toronto, Clippers, Chicago, Denver y Lakers.
MINNESOTA, 116; GOLDEN STATE, 129
Minnesota Wolves: LaVine (13), Wiggins (19), Prince (6), Garnett (0), Towns (17) –equipo inicial-; Bjelica (8), Kevin Martin (15), Miller (11), Dieng (11) y Muhammad (16).
Golden State Warriors: Curry (46), Klay Thompson (15), Barnes (14), Draymond Green (23), Ezeli (10) –equipo inicial-; Bogut (4), Iguodala (3), Clark (6), Livingston (8) y McAdoo (0).
Parciales: 27-40, 36-35, 24-22 y 29-32.
Target Center de Mineápolis. 16.130 espectadores.
Otros resultados
Miami, 92; Utah, 91 (Bosh 25 y Favors 25)
Próximos partidos
Indiana-Minnesota, Orlando-Utah, Boston-Atlanta, Nueva York-Cleveland, Toronto-Nueva Orleans, Chicago-Charlotte, Memphis-Portland, Oklahoma-Philadelphia, Dallas-Lakers, Denver-Houston, Sacramento-Brooklyn.
Poco antes del partido, los Wolves descartaron el concurso de Ricky Rubio. El base español volvió a sentir molestias en la rodilla izquierda que ya le impidieron jugar también contra el anterior encuentro contra Charlotte. No se pudo disfrutar del esperado mano a mano entre Ricky y Stephen Curry. LaVine fue quien tuvo que encargarse del marcaje del base de los Warriors. Fue una pesadilla para los Wolves. Anotó 21 puntos en el primer cuarto y concluyó con 46, con 8 de 13 en triples, además de 5 rebotes y 4 asistencias en 37 minutos de juego. Draymond Green, con 23 puntos, 8 rebotes y 12 asistencias completó igualmente una espléndida actuación.
Poco pudieron hacer los Wolves. Sin Ricky Rubio su porcentaje de victorias pasa del 44 al 23%. El base español se ha perdido a causa de las lesiones 112 de los 320 partidos de su equipo desde que se estrenó en la NBA en la temporada 2011-2012. Andrew Wiggins, sin embargo, superó los problemas que tenía en la rodilla derecha, y pudo jugar ante los Warriors. Fue el máximo anotador de su equipo con 19 puntos. Fueron los suplentes de los Wolves –Muhammad, Dieng, Miller y Kevin Martin- los que consiguieron reducir hasta siete puntos en alguna ocasión la enorme brecha que lograron los Warriors, que llegó a ser de hasta 21 puntos.
Karl-Anthony Towns volvió a demostrar su enorme futuro y consiguió otro doble doble: 17 puntos y 11 rebotes. Suma seis en sus ocho primeros en la NBA. En los últimos 30 años solo tres novatos consiguieron mejores marcas en este sentido: Shaquille O’Neal, David Robinson y Dikembe Mutombo. Los Wolves han perdido los cuatro partidos que han disputado esta temporada en casa. Lo compensan, en parte, con sus buenos resultados cuando juegan lejos del Target Center.