Peñaranda alivia al Granada frente al Levante

Peñaranda, un chaval venezolano de 18 años, el futbolista más joven en debutar en el Granada en Primera, al que en las últimas jornadas Sandoval ha dado carrete en el Granada, anotó dos goles al principio y al final de la segunda mitad que valieron una importante victoria al conjunto nazarí y que hunde al Levante. El efecto Rubi se está diluyendo. No encontró el conjunto granota el hilo al encuentro, sin profundidad en el juego, falto de fútbol y pegada. Su amor propio no fue suficiente ante un Granada discontinuo, que aprovechó sus momentos y que ha encontrado en Peñaranda una joya con gran potencial futuro. Sus dos primeros goles en Primera valieron sus lágrimas de emoción.

Convencido ambos equipos que la victoria tenía más valor que los tres puntos en juego, el Granada afrontó el partido con decisión, sin especulación alguna, con jugadores de buen pie, rebasando de inicio a un Levante con una imagen desconocida desde que Rubi llegó al banquillo de Orriols, sin encontrar el esférico, dedicándose en un principio a contener las intenciones del conjunto nazarí. Hasta pasado el cuarto de hora el ataque del Levante no había visto de cerca la cara de Andrés Fernández.

A los 20 minutos, Rubí se vio obligado a realizar un cambio, retirando a Pedro López, dañado en su brazo izquierdo. Sin defensas específicos en el banquillo, el técnico catalán reforzó el centro del campo, superado hasta esos instantes por el Granada sin traducir su juego en ocasiones, con la entrada de Verza, removiendo varias piezas en el tablero. Lerma se retrasó al lateral, Morales y Rubén García intercambiaron las bandas y Camarasa adelantó su posición. El internacional sub-21 tuvo la primera ocasión del Levante tras un disparo a dejada de Deyverson que atrapó Andrés Fernández.

Equilibrado el centro del campo, el Levante se soltó tímidamente en ataque, inquietando a la zaga del Granada. El conjunto de Sandoval fue dando pasos atrás, perdiendo la cara al área de Rubén.

Al poco de comenzar el segundo acto, el Levante, lanzado al ataque, se encontró con un contragolpe letal. Un córner a favor del conjunto granota terminó en gol del Granada, tras un largo envío al espacio al que acudió Peñaranda. El delantero venezolano de 18 años tuvo calidad para pinchar el esférico y darle continuidad, y potencia para ganar en carrera a los defensores azulgranas y batir a Rubén cruzando el esférico a su salida.

Reaccionó Rubi al gol del Granada dando entrada a Roger en punta acompañando a Deyverson. Y encontró el Levante el empate a balón parado, tras una falta botada por Verza, un especialista, que situó el esférico en la cabeza de Simao que cruzó el esférico evitando a Andrés Fernández. El Granada, viendo las orejas al lobo, se replegó no despreciando el empate que el Levante, con más pasión que destreza, no quería ni supo mantener. Peñaranda, dos minutos del final, daba una victoria al Granada que asoma la cabeza y hunde al Levante.