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Entre la tristeza por Cruyff y la suplencia de Iker

La muerte del mito holandés toca el ánimo de la selección española en Údine

Ladislao J. Moñino
Del Bosque tropieza durante el Italia-España.
Del Bosque tropieza durante el Italia-España.GIUSEPPE CACACE (AFP)

Vicente del Bosque había terminado la charla táctica y sus jugadores empezaban a desfilar hacia las habitaciones del céntrico hotel Astoria de Údine cuando empezó a correr el boca a boca del fallecimiento de Johan Cruyff. La noticia afligió al grupo. Los jugadores del Barcelona fueron los más consternados, según un miembro de la expedición, pero el que más y el que menos de los internacionales sintió la muerte de esa figura revolucionaria que propagó la llamada desorganización organizada del ambicioso fútbol total que encumbró a la escuela holandesa. La mayoría de ellos, incluso los que no han pasado por La Masía, están cultivados en los rondos que instauró Cruyff y en el juego de posición que desde hace años se predica en las categorías inferiores de la selección.

Del Bosque inició su comparecencia recordando a Cruyff, al que no se le incluyó en el minuto de ilencio guardado pr las victimas de los atentados de Bruselas y del accidente de autobús de Tarragona.  El selecciondor admite que el estilo con el que España ha dominado el fútbol mundial en los últimos años mantiene un cordón umbilical incuestionable con el pensamiento futbolístico del holandés. “Estoy impresionado por la pérdida de una persona que ha dado mucho al futbol español como jugador y entrenador. Como futbolista fue singular y significó mucho para el Barcelona como representante de la escuela holandesa. Fue especial, no se regía por los cánones por los que todo el mundo nos regimos, trasladó a sus futbolistas lo que él fue como jugador”.

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“Mi padre siempre me habla maravillas de él. Como entrenador cambió la historia del club y somos lo que somos en gran parte gracias a él. Quiero agradecerle todo eso a Johan”, declaró en Sefutbol Gerard Piqué. En el mismo canal, con los ojos llorosos, Angel María Villar también expresó sus condolencias. La casualiad hizo que el fallecimiento de Cruyff se haya dado un 24 de marzo, el mísmo día 42 años después de la bofetada que Villar le propinó en San Mamés.

“Noticia triste para el mundo del fútbol. Mi pésame para su familia y amigos”, tuiteó Casillas el día que Del Bosque decidió dejarle en el banquillo en un partido que por el rival y por la presencia de Buffon en la portería contraria parecía destinado para él. Antes de tomar la decisión el cuerpo técnico ya preveía que las interpretaciones apuntarían a que De Gea a dos meses de la Eurocopa cobraba ventaja.

“Los dos son buenos, no entremos ahora si uno mejor que otro”, dijo Del Bosque. “Hoy Italia ha sido un poco mejor, hemos tenido cosas que debemos mejorar y otras buenas, Aduriz ha hecho lo que tenía que hacer y se adaptará bien. La actuación de David también es de esas cosas buenas”.

Sin embargo, la realidad también dice que sobre el pasto del estadio Del Bosque alineó a gran parte del grueso del que será su once titular en Francia. No hace mucho, era impensable que Casillas no hubiera sido titular. Desde el banquillo contempló la estremecedora ovación que se llevó Buffon de los tifosi cuando fue hacia su portería. En el banco, Casillas también debió interiorizar que su suplencia no es más que la constatación de que tiene un competidor que si hasta hace poco le echaba el aliento en la nuca anoche le sopló el flequillo por delante.

Antes de ser fusilado de cerca por Insigne, De Gea fue exigido abajo en tres ocasiones y lució esa larga carrocería que no le ralentiza sus movimientos a ras de hierba. Lució colocación en las tres intervenciones, pero en la que le hizo Florenzi con un disparo cruzado, exhibió técnica en la estirada y muñeca dura. Por arriba, desbarató una vaselina de Insigne con una manopla prodigiosa que terminó por confirmar que el debate en la portería está más abierto que nunca.

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Sobre la firma

Ladislao J. Moñino
Cubre la información del Atlético de Madrid y de la selección española. En EL PAÍS desde 2012, antes trabajó en Dinamic Multimedia (PcFútbol), As y Público y para Canal+ como comentarista de fútbol internacional. Colaborador de RAC1 y diversas revistas internacionales. Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Europea.

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