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Hortelano y Beitia, las dos grandes bazas en los Europeos de Atletismo

Arranca en Ámsterdam la 23ª edición de los campeonatos, que se disputará entre el 6 y el 10 de julio, sin marcha ni maratón por ser año olímpico

Ruth Beitia en una imagen de archivo.
Ruth Beitia en una imagen de archivo. Javier Carrion (EFE)

Bruno Hortelano y Ruth Beitia son las dos grandes bazas del atletismo español en los Campeonatos Europeos que arrancan este miércoles en Ámsterdam. Bruno, la cara joven que representa la nueva generación de atletas internacionales españoles, un chaval de 24 años nacido en Australia y educado en los Estados Unidos, donde entrena y está acostumbrado a competir con los velocistas más rápidos y crueles en la pista, es el actual plusmarquista español de 100 y 200 metros lisos y aspira a medalla en una disciplina en la que España queda tradicionalmente fuera de la élite mundial. Por eso es tan importante su hazaña; el solo hecho de que un atleta español aspire a una medalla en 100 en unos Europeos es ya algo inédito, pero es que, si consigue uno de los tres metales, será un hito histórico en el atletismo español.

Pese a que su especialidad es el 200m, Bruno Hortelano ha decidido doblar en Ámsterdam después de batir recientemente el récord nacional de los 100 metros, desbancando al veterano Ángel David Rodríguez. Lo hizo el 23 de junio, dos veces, la noche de San Juan, en el mitin celebrado en el madrileño estadio de Moratalaz. En una misma noche, paró el crono en 10,08s y 10,06: dos marcas decisivas para convencerlo del doblete y que lo sitúan cuarto en el ranking europeo de la prueba en 2016.

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“Tiene gracia, siempre he hecho el 100 para mejorar la velocidad en el 200 y ahora tengo mejor marca en 100”, comentaba el atleta en el hotel donde está concentrado con la selección con la misma tranquilidad con la que acelera en la pista. “Aunque mi prueba sigue siendo el 200. Mi marca de 20,48s en Río la hice cuando aún estaba cargando, no se puede comparar con los 10,06 del 100m. De hecho, en 200 me veo para hacer 20,36s”. Su primera competición será el jueves, con las eliminatorias del 200, ya que en el 100, los 12 primeros del ranking europeo pasan directamente a semifinales y él está cuarto. Su objetivo: “Salir a ganar en las dos". De los rivales no quiere ni hablar: “Solo quiero ejecutar bien en cada fase de la carrera, salida potente y buena transición, aunque tengo que aprender a meter la cabeza al final”. Dice que su punto fuerte es la relajación muscular con la que sale a correr, la soltura con la que lo vemos correr.

El momento más dulce

La otra gran baza es Ruth Beitia, la imagen de la experiencia, la veterana saltadora de altura que a sus 37 años saborea su momento más dulce con 61 internacionalidades a sus espaldas, dos títulos europeos y la primera española en conquistar una Diamond League. Ella lo sabe, lo afirma con soberanía tomándose un café mientras habla con la prensa y lo disfruta en cada competición. “Voy muy tranquila mañana [en referencia a este miércoles] a la calificación. No siento presiones innecesarias. Cada día es una oportunidad. Tras el punto de inflexión de 2012 [cuando decidió retirarse para luego volver] me pudo el gusanillo… Disfruto compitiendo y estaré ahí hasta que el cuerpo diga”.

Llega tranquila a la calificación pero sin una marca que le sirva de referencia esta temporada en pista al aire libre. Para pasar a la final tiene que superar 1,92 metros, esta temporada ha saltado 1,93 m, lejos de su mejor marca (2,02 m) y con ese mismo registro hay 14 atletas en el ranking europeo. “Todas son rivales, si algo he aprendido es que no se puede menospreciar a nadie. En caso de empate, un nulo más puede ser decisivo”. Respecto a si volverá a superar los 2,00 metros –una barrera psicológica porque en altura, tras hora y media de competición, el listón está cada vez más alto– asegura que las marcas no le importan, que lo que quiere es ganar: “A las competiciones se viene a por las medallas". Si gana en Ámsterdam, habrá conseguido su tercer título europeo consecutivo al aire libre, tras Helsinki y Zúrich. Y antes de que acabe su carrera, le queda un sueño por cumplir: “Me gustaría conseguir una medalla olímpica. Río serán mis últimos Juegos".

La segunda selección más numerosa

La selección de Ramón Cid, la segunda más numerosa en unos Europeos con 78 atletas –47 hombres y 31 mujeres tras la baja por lesión en pértiga de Naroa Agirre– también llega con buenas opciones a medalla o puesto de finalista en medio fondo y fondo, en las pruebas tradicionalmente fuertes del atletismo español: con Kevin López, Daniel Andújar y Álvaro de Arriba por debajo de 1m 46s en el 800; con Ilías Fifa (13m 11s), Adel Mechaal (13m 15s) y Carlos Mayo (13m 34s) en el 5.000.; Toni Abadía con 28m 07s en el 10.000 y con un fuerte equipo en la media maratón, con Javier Guerra, Jesús España y Carles Castillejo, que podrían dar alguna sorpresa en una carrera táctica.

En el plano internacional, Ámsterdam será una cita especial para Dafne Schippers. La holandesa, que este invierno igualaba el récord nacional de Nelli Cooman en el 60m con 7,00s y que recientemente corría los 200m en Oslo en 21,93s consiguiendo la mejor marca mundial de la temporada, correrá en casa. Tampoco faltará el espectáculo en la pértiga del recordmann mundial, el francés Renaud Lavillenie, que pese a empezar lesionado este invierno, ha vuelto a superar esta temporada los 6 metros de altura y afirma que llega en muy buen estado de forma y que está entrando al cajetín más rápido y con más fuerza. Ha estado saltando entre 5,80 y 5,90 en entrenamiento, lo que en competición, podrían ser entre 10 y 15 centímetros más.

La ausencia de los rusos

La gran ausencia serán los atletas rusos en pruebas tan destacadas con los 110 metros vallas, que tienen prácticamente asegurada los franceses Bascou y Martinot-Lagarde, a falta también del español Orlando Ortega, que no ha cumplido aún los 3 años de sanción de la IAAF. La organización de los europeos, en colaboración con la IAAF, está haciendo todo lo posible por limpiar la imagen del deporte tras las críticas por el escándalo del dopaje sistemático en Rusia. De los más de 80 atletas rusos que han solicitado poder participar bajo bandera neutral tras la suspensión de su federación por parte de la IAAF, solo una, Yuliya Stepanova, podrá participar. La atleta que destapó el escándalo del dopaje sistemático en Rusia en 2014 correrá el 800 como independiente.

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