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Lopetegui tira por la vía Cruyff

El seleccionador experimenta ante Liechtenstein con una fórmula muy propia de su maestro, comenzando por la introducción de Nolito y el empleo de una zaga de tres

Diego Torres
Los jugadores de España celebran el octavo gol a Liechtenstein.
Los jugadores de España celebran el octavo gol a Liechtenstein.MIGUEL RIOPA (AFP)

Manuel Agudo, Nolito, cumplirá 30 años en octubre. La edad a la que los futbolistas suelen comenzar a dar signos de agotamiento. La edad del desengaño con una profesión que en el máximo nivel puede ser tan alucinante como pesada, pero que en él se manifiesta como una oportunidad de comenzar a gozar del oficio. Nolito, uno de esos genios a quienes la fortuna ha bendecido tarde, no dejó de reír mientras abandonaba el estadio Reino de León, el lunes por la noche, ataviado con una camiseta estampada con una imagen florida de la Inmaculada Concepción. Quizás no lo supiera. Pero acababa de introducir a La Roja en la versión más extrema de la vía Cruyff.

Johan Cruyff construía los equipos comenzando por los extremos y Julen Lopetegui, el nuevo seleccionador, reconstruyó la fórmula de España comenzando por cambiar a Thiago por Nolito en el descanso del encuentro de debut de la ronda de la clasificación mundialista. Un interior por un extremo regateador. Cinco atacantes asaltando el área. Y un defensa menos. Porque Sergi Roberto, que durante la primera parte fue lateral derecho, se situó en el carril del ocho, liberado por Thiago. Atrás, Piqué comandó una defensa de tres. Puro cruyffismo.

Hasta ahí, España le ganó 1-0 a Liechtenstein. En los 45 minutos restantes le metió siete goles más. La goleada (8-0) fue la mayor paliza que infligió la selección en el presente siglo a un rival europeo. Pero, sobre todo, sirvió para confirmar la validez de una propuesta táctica que puede ser de gran utilidad en la serie de diez partidos que el equipo deberá disputar contra Italia, Albania, Macedonia, Israel y Liechtenstein, cinco rivales que se defenderán de un modo similar.

“¡Hace mucha calor, pero en España se está bien!”, dijo Nolito, mostrando los dientes, cuando le preguntaron qué tal lo había pasado. “Intento jugar como yo siempre juego”, aclaró, por si había dudas. “Yo siempre soy yo; juegue con quien juegue. Juego como sé, como lo siento. Con cualquier entrenador. Con Guardiola o Julen”.

Mayores goleadas de España

España, 13; Bulgaria, 0. (1933)

España, 12; Malta, 1. (1983)

España, 10; Haití, 0. (2013)

España, 9; Portugal, 0. (1934)

España, 9; Albania. (1990)

España, 9; Austria, 0. (1999)

España, 9; S.Marino, 0. (1999)

España, 8; Francia, 1. (1929)

España, 8; Chipre, 0. (1999)

España, 8; Liechtenstein, 0. (2016)

Ante la cerrazón de Liechtenstein, Nolito y Vitolo ensancharon el campo y estiraron a sus marcadores hasta abrir grietas. El 2-0 se produjo tras un pase de Nolito a Sergi Roberto en un tic-tac demoledor. El sanluqueño daría otros dos pases de gol: a Silva y a Morata. “En el descanso, Julen me pidió lo que me piden todos los entrenadores: ¡que juegue como yo sé!”, insistió Nolito, a punto de soltar la carcajada. Cuando los técnicos le llaman siempre es porque buscan lo mismo: alguien que invente un desborde.

“El segundo gol ha podido hacer caer a los de Liechtenstein en el desánimo”, dijo Lopetegui. “El cambio táctico es algo que hemos trabajado estos días. Teníamos la capacidad de jugar de varias maneras. Ellos habían corrido mucho y era un buen momento para meter a los dos extremos y más gente por dentro. Sergi nos da riqueza táctica. Su cambio del lateral al interior nos ha permitido jugar de esa manera y ha habido connotaciones ofensivas diferentes”.

Thiago y Pauritsch

Hasta Thiago, el sustituido, admitió con satisfacción resignada que su sacrificio estuvo justificado. “El cambio fue un acierto”, dijo. “Hemos encontrado buenas sensaciones. Somos un grupo joven, un grupo renovado en relación con la Eurocopa. Si tenemos que hacer un balance, esta primera concentración con Lopetegui ha sido fantástica, tanto en los entrenos como en la convivencia”.

René Pauritsch, el seleccionador de Liechtenstein, dijo que su equipo había mostrado dos caras. Como Jano. Y que la desgraciada modificación se activó con la incursión en la cancha de un diablo de piel cetrina y barba negra. “La entrada de Nolito nos cambió todos los esquemas”, lamentó. “Ya no pudimos controlar el partido”.

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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