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Luis Enrique: “Menos mal que solo hay un Pep”

Luis Enrique admite cansancio por la preparación y la disputa del encuentro ante su amigo Guardiola, que elogia la eficacia goleadora de Messi

Juan I. Irigoyen
David Silva derriba a Piqué.
David Silva derriba a Piqué. Albert Gea (REUTERS)

El duelo entre el Barça y el Manchester City, que se vislumbraba como un partido de colección, para rebobinarlo una y otra vez, terminó condicionado por los accidentes. Tres lesionados (Jordi Alba y Piqué en el conjunto azulgrana; y Zabaleta, en los Blues), dos expulsados (el portero del City, Bravo, y Mathieu del Barça) y un penalti marrado por Neymar. Luis Enrique, antes de que el reloj marcase los 40 minutos de juego, tuvo que improvisar en la defensa. Sin Piqué ni Alba, el asturiano alineó una zaga con Mascherano, Umtiti, Mathieu y Digne, tan inédita como curiosa, con tres franceses y dos centrales zurdos.

El comunicado médico del Barcelona informó de que Piqué sufrió un esguince en el tobillo derecho, mientras que Jordi Alba se resintió en el bíceps femoral de la pierna derecha, una lesión de la que había recibido el alta en la mañana de ayer. “Ha sucedido de todo en este partido”, se arrancó el técnico Luis Enrique; “lesiones, jugadores en posiciones nuevas… aunque todos ellos han estado a un altísimo nivel. Mascherano estuvo espectacular de lateral, Samuel de central derecho, Lucas tuvo que entrar de golpe…”. El entrenador asturiano se mostró especialmente satisfecho con la actuación de su zaga, castigada por el infortunio, imbatida por segundo partido consecutivo. “El éxito defensivo de un equipo es de todos los jugadores y como bloque hoy lo hemos realizado. Estos jugadores priorizan el beneficio colectivo al individual”, aseguró.

Estos jugadores priorizan el beneficio colectivo al individual Luis Enrique, técnico del Barcelona

“Hemos intentado concienciarnos de que nuestro equipo es muy bueno con el balón, pero que también tenemos que serlo sin él”, analizó Luis Enrique. Guardiola, por su parte, se marchó del Camp Nou resignado aunque extrajo cosas positivas. “En general hemos estado bien. Es la percepción que tengo sabiendo de dónde venimos y de que hace poco que nos conocemos”, explicó el entrenador del City. Aseguró Guardiola que la expulsión de Bravo, en el minuto 53, cambió el partido. “Siempre es difícil jugar contra el Barça con 11 jugadores y con 10 todavía más. Hasta ese momento el partido estaba abierto. Hemos creado algunas oportunidades, hemos llegado muchas veces al área contraria y creado oportunidades para marcar. Ellos las han tenido y te castigan, pero nosotros también las hemos tenido. El Barça te hace mucho daño arriba porque sus tres delanteros son de altísimo nivel”, convino el técnico catalán.

“El resultado dice que hay bastante diferencia, pero el partido no ha sido nada fácil. Ellos nos han disputado la posesión del balón (57% para el Barcelona), pero por ciertos momentos fue un partido intenso y la diferencia estuvo en nuestra eficacia”, sumó Iniesta. El Barcelona intentó 11 remates, cinco fueron a portería, cuatro terminaron en gol. Y Messi se marchó, una vez más, con la pelota a su casa. El 10 sumó su hat-trick número 37 con la camiseta del Barcelona. “Cuando lo conocí ya hacía estas cosas y hoy las sigue haciendo. Tuve la suerte de verlo alguna que otra vez en vivo”, elogió Guardiola al rosarino.

“Es la totalidad del fútbol”

Luis Enrique fue un paso más allá. “Leo es la totalidad del fútbol”, lo piropeó el asturiano, que contra el City jugó su primer partido completo tras superar su lesión en el aductor de la pierna derecha. “Hay que entender que su cuerpo no pueda aguantar siempre todo. Es muy complicado que nos sorprenda más de lo que ya lo hizo, pero en cada partido se las ingenia para seguir sorprendiéndonos. Ojalá se quede para siempre aquí”, intervino Rakitic. Iniesta se sumó al brindis por el 10: “Nos aprovechamos de tener a Leo. Cuando el equipo está enchufado, todo es más fácil”. Y remató Luis Enrique. “Si algo se puede esperar de Messi es esto, da igual los partidos que haya podido faltar. No nos dejamos de sorprender. No por los goles, por la presión y por todo, es un referente sin toda duda”, concluyó el técnico, que no veía la hora de irse a dormir. “Estoy un poco cansado, no solo por la preparación del partido sino por lo que significa jugar contra Pep. Menos mal que hay un solo Guardiola”.

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Sobre la firma

Juan I. Irigoyen
Redactor especializado en el FC Barcelona y fútbol sudamericano. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Ha cubierto Mundial de fútbol, Copa América y Champions Femenina. Es licenciado en ADE, MBA en la Universidad Católica Argentina y Máster de Periodismo BCN-NY en la Universitat de Barcelona, en la que es profesor de Periodismo Deportivo.

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