_
_
_
_
_

Luis Suárez, el 9 no engaña

El uruguayo, pichichi de la Liga con 15 goles, solo ha marcado en uno de los 10 partidos que el Barça no ha ganado en esta temporada

Jordi Quixano
Luis Suárez celebra un gol ante el Eibar.
Luis Suárez celebra un gol ante el Eibar.VINCENT WEST (REUTERS)

La noche ya era cerrada y el frío golpeaba a los huesos tras el encuentro de Ipurua, donde el Barça sometió al Eibar con un nuevo recital de fútbol de Messi y también de puntería de Luis Suárez, que sumó otro tanto para compartir con el 10 el pichichi liguero, ambos con 15 redes. Tras la ducha, pasaron como rayos entre los micros y las grabadoras de los periodistas que aguardaban en la zona mixta, y salieron a la calle con el abrigo desabrochado y el pelo un tanto mojado, como si los cuatro grados no fueran con ellos, como si nada.

Cuchicheaban, sin embargo, algo gracioso porque rieron por lo bajo hasta subirse al autobús. Una amistad sobre el tapete y fuera de él —hasta el punto de que sus mujeres comparten un negocio de zapatos— que explica la ferocidad ofensiva del Barça (suma dos goles más que en la temporada del triplete), aliñada por el tercer mosquetero: Neymar. Así, el 9 de Barça aúna a los dieces de Brasil y Argentina, pegamento para el equipo y, sobre todo, diluyente para todos los rivales. Como la Real, que hoy (21.15, beIN, LaLiga) visita el Camp Nou en la vuelta de los cuartos de la Copa (0-1 en Anoeta).

Más información
Luis Enrique: “No encuentro jugadores del nivel de Busquets”
El tambor de Neymar silencia a la Real
El Barcelona renueva a Luis Suárez hasta 2021

En el vestuario lo tienen claro. “No me gustaría enfrentarme a él porque va con todo, es intenso a más no poder y le cuesta admitir la derrota”, explica un peso pesado de la plantilla. Desde las oficinas de la ciudad deportiva añaden: “Es un tipo que nació con el gol, un delantero vital para cualquier partido y sobre todo para los grandes”. Los números así lo explican porque si Suárez no emboca el equipo se resiente. En esta temporada, por ejemplo, el Barça no ha ganado en 10 encuentros (seis empates y cuatro derrotas) y en todos ellos menos en uno [en las tablas a uno con el Madrid] se quedó con el contador a cero, por más que se perdiera dos; uno por sanción y el otro, en la Copa ante el Hércules, para descansar.

La fiabilidad de Suárez es demoledora y así lo leyó Messi, que le entregó la posición del 9 con la aquiescencia de Luis Enrique, un gesto que le negó a Ibrahimovic y Villa, entre otros. “Leo es muy listo y pocos quieren ganar tanto como él. Entendió que así seríamos más fuertes y acertó”, cuentan desde el vestuario. Y el uruguayo responde con honradez, solidaridad y sobre todo goles porque es el actual Bota de Oro después de que firmara 59 dianas en el curso anterior. “Fueron unos números muy buenos que a mí mismo me sorprendieron. Mejorarlos será difícil, pero estoy en el mejor equipo del mundo”, reflexiona el ariete.

Y aunque no va al vertiginoso ritmo del año pasado, quizá porque ha bajado del 50 al 44% los remates que van a portería, sus 19 tantos (15 en la Liga, uno en la Copa, dos en la Champions y otro en la Supercopa) le sitúan solo por detrás de Messi (28) y por delante de Arda (12) y Neymar (9), cifras que cogen relieve porque no lanza penas máximas ni faltas. “Es el mejor 9 del planeta. Quizá alguno marca tantos goles, quizá se encuentra otro que presione del mismo modo e incluso quizá los hay que entienden el juego tan bien como él”, explican desde la ciudad deportiva; “pero no existe nadie que lo haga todo a la vez y que lo haga siempre”. Y, generoso como es, Suárez lleva nueve asistencias, solo por detrás de Neymar, destacado con 15.

Es el mejor 9 del planeta. No existe nadie que lo haga todo a la vez y que lo haga siempre

Dicen en el Barça que a Luis le encanta el pique sano y chinchar, sobre todo cuando se junta con Piqué. “Pero cuando juega, se acabaron las bromas”, expone uno de sus compañeros. Bien lo sabe Luis Enrique, que le ha dado más minutos (2.224) que a nadie, perseguido por Messi (2.194) y Busquets (2.163). Recién cumplidos los 30 años —los festejó con los compañeros de equipo en un restaurante de Castelldefels—, renovó hace poco hasta 2021 (lo máximo que le permitía la ley al Barça). “Mejorarle el contrato era lógico. Se ha ganado a la gente y a sus compañeros. Cuando juega no miente y lo da todo”, aclaran desde la cúpula azulgrana. Ahora, lleva siete goles en los últimos seis partidos ligueros. Una amenaza para la Real, que sabe que parte de su éxito pasará por negarle el gol a Suárez. Ya se sabe que el 9, como el algodón, no engaña.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_