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El Sporting sueña y hunde al Granada

Los de Alcaraz caen en un estrepitoso segundo tiempo cuando ganaban 0-1 ante el empuje de los asturianos, que tienen ahora la salvación a cinco puntos

Ochoa detiene el remate de Víctor.
Ochoa detiene el remate de Víctor. Alberto Morante (EFE)

Victoria clave del Sporting, lograda ante un rival directo, el Granada, al que deja muy tocado. Un triunfo justo, que llegó de forma inesperada porque el Granada mandaba en el marcador sin merecerlo y en seis minutos fue barrido por los asturianos. En esos seis minutos, el equipo andaluz demostró por qué tiene pie y medio en Segunda. Su descomposición fue absoluta, recibiendo un gol tras otro sin explicación, con sus futbolistas sobrepasados, sin capacidad de reacción. El Sporting mereció siempre mucho más que el Granada, que, sin embargo, había encontrado petróleo en un gol de Ingason al inicio de la segunda mitad. Incapaz de mantener esa ventaja de oro, los de Alcaraz se arrodillaron para ser aplastados por el Sporting. La entrada de Traoré y el partidazo de Burgui resultaron esenciales para que los asturianos estén ahora a cinco puntos de la salvación cuando restan 10 jornadas. El Granada lo tiene crudo. En vísperas de recibir al Barcelona después del parón, la salvación le queda ya a siete puntos. Ochoa, que hasta paró un penalti, le salvó de la goleada.

Hay diversas maneras de evitar un descenso. Hay quien muere con las botas puestas, caso del Sporting. Y hay quien pretende sobrevivir ofreciendo un ejercicio de pragmatismo continuo, a veces excesivo. Sin duda, es el caso del Granada de Lucas Alcaraz. En El Molinón se jugó una final y como suele ocurrir en las finales hubo mucha tensión y, por momentos, una gran cantidad de imprecisiones. El Sporting peleó con lo que tiene, con un magnífico Burgui, por ejemplo, con Víctor activo y Carmona dejándose el alma. El Granada fue a lo suyo. A dejar la portería a cero como principal premisa, con una defensa con tres centrales, con dos pivotes defensivos, sin un delantero nato. El rácano planteamiento de Alcaraz pudo salir bien de inicio si Mariño, sustituto del sancionado Cuéllar, no anda listo en un gran disparo de Pereira. También si el colegiado Estrada Fernández no anula por una falta un remate de Ingason que se coló en la meta del Sporting. El Granada duró 10 minutos. Realmente, a Alcaraz lo salvó la soberbia actuación de Ochoa, estupendo hasta en cuatro intervenciones frente a la avalancha en ataque de un Sporting desatado. Incluso el palo devolvió un remate de Víctor previo toque magistral del mexicano, protagonista en definitiva de su ultradefensivo equipo.

Castigado por su falta de pegada y las paradas de Ochoa, el conjunto de Rubi se la tenía que jugar en la segunda mitad. Había querido más y había sido más valiente, pero el fútbol, sin goles, no entiende de justicia. Así, sin merecerlo, Ingason acertó a rematar en el área un buen pase de Pereira. El Granada, con todo a favor, se derrumbó como un castillo de naipes. Empató Traoré a pase de Burgui, eléctrico, en una jugada donde crujió toda la defensa andaluza. En seis minutos, Babin machacó a su exequipo y todavía Carmona, en un gran contragolpe, hizo el tercero. Alcaraz asistía perplejo en la banda a la descomposición de su equipo, salvado de la goleada por Ochoa, que le detuvo un penalti a Traoré. Preocupantes las sensaciones del Granada, al que solo una proeza le mantendrá en Primera. Algo más fácil lo tiene el Sporting, que sigue soñando.

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