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El Real Madrid estrena el vértigo

La derrota en el clásico ha cambiado el panorama del último mes de competición de los blancos, que, con dos competiciones abiertas, tienen hoy su primera final en Riazor

Eleonora Giovio
Zidane en el entrenamiento de este martes en Valdebebas.
Zidane en el entrenamiento de este martes en Valdebebas.Zipi (EFE)

Podía el Madrid haber sentenciado la Liga el domingo en casa contra el Barcelona. Una victoria habría puesto a los blancos seis puntos por delante de los azulgrana con un partido menos y, sobre todo, habría permitido gestionar de manera diferente el camino en la Champions. Le espera a Zidane un hueso muy duro de roer en las semifinales. Ganar el clásico y aparcarla Liga le habría ahorrado llegar con esa competición abierta al doble duelo contra el Atlético (2 y 10 de mayo).

El conjunto blanco tiene ahora que encarar dos tramos finales de temporada de máxima exigencia. Aunque siga dependiendo de sí mismo en la competición nacional y aunque vaya en su ADN crecerse ante las adversidades, no se puede permitir tropiezos —el Barça no tiene desgaste europeo ya que cayó en cuartos de final— ni tener dudas si no quiere dejar escapar los dos títulos a los que aspira.

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Este miércoles noche en Riazor (21.30, beIN LaLiga) empieza de nuevo la Liga y el Madrid medirá sus pulsaciones contra el Deportivo. Lo hará con una defensa en cuadro (Sergio Ramos está sancionado, Pepe sigue recuperándose de la fractura de dos costillas y Varane regresa después de un mes parado por una recaída muscular) y sin Gareth Bale, que sufre una rotura en el sóleo y se despide casi de la temporada. Tampoco estarán Cristiano Ronaldo ni Kroos, a los que el técnico ha decidido dar descanso.

La derrota del domingo fue la más dura para Zidane en sus 16 meses en el banquillo. Por el rival, por cómo se produjo y por no haber podido cerrar la Liga con unas cuantas jornadas de antelación para centrarse en la Champions. El técnico francés no se cansó de repetir antes del clásico que el duelo contra el Barça era un partido más, que en ningún caso sentenciaría la competición y que al Madrid le quedaban siete finales y que iría a por ellas. Sin embargo, seis puntos de ventaja con un partido por recuperar (contra el Celta, probablemente el 17 de mayo) eran un bagaje suficiente como para excluir a los azulgrana de la lucha por el título.

“No he tenido dudas”

¿Cómo ha gestionado las horas posteriores a esa derrota?, le preguntaron ayer a Zidane. “Era el partido que era mejor no perder, pero al final son tres puntos los que perdimos y hoy tenemos otros tres y pensamos en eso. Cada uno puede opinar de todo lo que se dice: ahora el Barça va a ganar la Liga y el Madrid no vale nada. Yo sé perfectamente que no es así. Lo que les digo a mis jugadores es que no vamos a cambiar nada de lo que estamos haciendo y que seguimos con lo nuestro: trabajar y seguir adelante”, contestó.

Acostumbrado a la montaña rusa en la que está subido desde principios de temporada, Zidane no ha vivido tranquilo ni un partido. Contra el Bayern de Múnich tuvo sobresaltos que le obligaron a ir a la prórroga; el Leganés le marcó dos goles en cuatro minutos; en Gijón tuvo que remontar, igual que contra el Kashima en el Mundial de Clubes. En Nápoles empezó perdiendo… Pero su equipo siempre supo reaccionar. De ahí que Zidane luciera ayer la tranquilidad y la sonrisa de siempre. “No he tenido ninguna duda después de la derrota en el clásico, no dudo de nada porque tampoco sé qué va a pasar; lo que tengo claro es lo que hacemos en el día a día y lo estamos haciendo muy bien”, explicó ayer el técnico, al que le quedan seis partidos para conseguir una Liga que el Madrid no gana desde 2012.

¿Siente la presión de estar obligado a ganar la Liga?, le preguntaron al técnico. “No me siento obligado a nada, salvo a hacer el máximo: es mi obligación, nuestra obligación. No puedes especular en el futbol, la realidad es el día a día. Y nosotros tenemos nuestro destino en nuestra mano, no dependemos de nadie”, respondió Zidane. El destino se despejará o nublará en función de lo que ocurra esta noche contra el Deportivo en Riazor.

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Sobre la firma

Eleonora Giovio
Es redactora de deportes, especializada en polideportivo, temas sociales y de abusos. Ha cubierto, entre otras cosas, dos Juegos Olímpicos. Ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS; ha sido colaboradora de Onda Cero y TVE. Es licenciada en Ciencias Internacionales y Diplomáticas por la Universidad de Bolonia y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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