Un currante sin complejos

Tomeu Llompart (Inca, 1944) transmite optimismo y confianza. El Mallorca se juega hoy (20.00, Canal +) la permanencia, en el estadio Bernabéu, ante un Madrid que aún busca el título, pero el nuevo técnico del equipo balear asegura que no teme ni al escenario ni al ilustre finalista de la Champions.

Hombre de club, sencillo y extravertido, con un discurso directo, Llompart ha acaparado esta semana el protagonismo en Mallorca tras la destitución, el pasado lunes, del croata Sergio Kresic. Ahora afronta su debú en un banquillo de la Primera División sin complejos. Veterano, sabe lo que es jugar en el campo madridista, ya que, como futbolista, militó once temporadas en el mejor Elche de la historia y se enfrentó muchas vaces a los Amancio, Pirri y Santillana. Quienes le conocen aseguran que es un currante del fútbol y una buena persona.

Llompart es un entrenador desconocido, sin solera en el fútbol de la élite, pero un buen conocedor del juego. De hecho, fue el que certificó el ascenso del Mallorca en la temporada 1996-97, después de que Víctor Múñoz, el actual preparador del Villareal, fuera destituido de forma incomprensible por el entonces presidente, Bartolomé Bertrán, cuando eran los líderes de la categoría de plata. Llompart y su fiel colaborador, Pepe Bonet, se erigieron entonces en los culminadores del éxito en una promoción en la que se enfrentaron al Albacete.

Antes de eso Llompart había sido ayudante de Llorenç Serra Ferrer y, más tarde, ya en Primera, colaboró con Héctor Cúper. Cinco años después, la directiva del Mallorca, presidida desde hace dos cursos por Mateo Alemany, ha vuelto a confiar en la pareja de técnicos del filial para buscar el milagro de la permanencia.

El triunfo del pasado año

El cambio de entrenador ha reactivado el entorno y también el propio vestuario. Llompart, en sólo cinco días, ha transmitido más confianza al mallorquinismo que los anteriores técnicos, el alemán Bernd Krauss y Kresic. Su discurso ha calado. Tiene las ideas claras, no disfraza la realidad y aplica el sentido común. Así, no se ha cansado de hablar de la lógica preocupación que existe en el seno del club, pero asegurando que su equipo está mentalizado para ganar en Madrid y repetir el éxito de la pasada campaña, cuando el Mallorca se fue de Chamartín con una victoria con goles de Ibagaza y Carlitos. Fue la última derrota del Madrid en su estadio.

La jornada se presenta clave para el Mallorca, antepenúltimo, con 39 puntos. Una derrota en Madrid, combinada con un empate de Osasuna (41) y sendas victorias del Villarreal (40) y Las Palmas (39), le situarían en Segunda a falta de la última jornada. Ante estas circunstancias, Llompart ha prohibido los transistores.

Madrid: César; Salgado, Hierro, Helguera, R. Carlos; Makelele, Solari; Figo, Guti, Raúl y Morientes.

Mallorca: Leo Franco; Olaizola, Nadal, Siviero, Soler; Novo, Engonga, Marcos, Ibagaza; Luque y Eto'o.