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“Este césped es inaceptable”

La federación protestó a la UEFA, que se negó a regar el campo porque Italia no quiso

Gdansk (Polonia) -
Balotelli, sobre el césped del estadio de Gdansk.
Balotelli, sobre el césped del estadio de Gdansk. Alex Grimm (Getty Images)

Vicente del Bosque tenía muy claro que a Italia había que discutirle el balón porque aprendió de la experiencia del último duelo, el 11 de agosto del año pasado, en el partido amistoso jugado en Bari. Aquel día, con un delantero alto, Llorente, la selección transalpina bailó a España jugándole con su arma favorita: el pase, el control de la pelota. Por eso, después de dos semanas debatiendo si el delantero debía ser Torres o mejor Negredo, el técnico sorprendió renunciando al referente en el ataque para llenar el centro del campo. Por eso lo pobló de pequeños y por la zona del 9 mandó al 10, Cesc Fàbregas, que se alternó con Silva en las funciones de falso punta. Mirando a España, parecía que había desmontado un futbolín porque todos los italianos eran mucho más altos, pero, a falta de centímetros, le sobraba talento al once. España tocó como siempre (677 pases, 100 mal; 65% de posesión) y remató más (19 por 10 de Italia) pero el tiqui-taca murió en el pasto.

Sabía Del Bosque que Italia le complicaría la vida, pero no contaba con otro enemigo, el césped. El campo estaba mejor para hacer un picnic que para jugar como pretendía hacerlo España. En la víspera, al término del entrenamiento en el Arena de Gdansk, la delegación federativa presentó una queja oficial a la UEFA por el estado del campo, reseco. Pero ayer, media hora antes del partido, supo que la UEFA no iba a regarlo: Italia no quería. España protestó antes, durante —al final de la primera parte Grande se fue a por el cuarto árbitro y Piqué tras él— y después del partido.

“Es penoso e inaceptable. Perjudica el control, el pase y el regate”, dice Xavi

Iniesta fue el primero en quejarse: “Estaba sequísimo y dificultaba la circulación. A veces pedimos cosas y ver el campo en estas circunstancias es un auténtico desastre. Para el espectador, un campo en buenas condiciones es mejor. La UEFA no lo ha querido regar. No podemos salir nosotros a regar”. Cesc, autor del gol, ahondó en el tema: “No sabes qué hacer, si quejarte o quedar por tonto. Nos ha perjudicado. El pase no llega o llega tarde. Nos falta toque, la pelota no circula. A ver si la UEFA cambia la mentalidad. Estamos en 2012. Ya toca regar los campos”. “Ya no es por nosotros, es por el espectador. Este campo condiciona el buen juego”, concluyó el autor del gol. “En un campo así es muy complicado jugar”, aseguró Casillas. El más contundente fue Xavi: “Es penoso e inaceptable. No se puede jugar si no lo riegan. Está seco. Hay que mojar el campo para ver buen fútbol. Perjudica el control, el pase, el regate. No os dais cuenta, pero es una pena. Por el bien del fútbol, que rieguen. La verdad es que, si dura cinco minutos más el partido, metemos el segundo”.

España llevaba 14 victorias seguidas en encuentros oficiales desde que perdió contra Suiza en el Mundial (0-1). De haber ganado ayer, habría conseguido el récord de triunfos consecutivos en el fútbol europeo, superando a Francia, de 2002 a 2004, y Holanda, entre 2008 y 2010. Del Bosque tuvo una buena idea, pero se quedó en el pésimo césped.

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