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13 días para volver a romperse

Lorenzo sufre otro accidente tras machacarse para llegar en plena forma a Alemania Vuelve a Barcelona a operarse y se perderá la carrera

Nadia Tronchoni
Jorge Lorenzo, del equipo Yamaha, en el momento de la caída.
Jorge Lorenzo, del equipo Yamaha, en el momento de la caída.

“Me sorprendí a mí mismo por cómo piloté en Assen, pero también por la rápida recuperación. Estoy mucho mejor de lo que esperaba”, declaraba Jorge Lorenzo desde el circuito de Sachsenring. Un día después, tras una caída a 145 kilómetros por hora, recogía sus bártulos e iniciaba el camino de vuelta a España, donde hoy será intervenido por segunda vez en 15 días de una fractura en la clavícula izquierda. La prioridad es su salud, no correrá en Alemania.

Fue osado al plantarse en la parrilla hace dos sábados, solo un día después de ser operado de una fractura desplazada, con los puntos frescos, la herida caliente, y el dolor solo soportable gracias a los analgésicos. Pero como aprobó el examen (terminó quinto) se envalentonó todavía más. Y en esos trece días que pasaron desde que asombró al mundo en Assen con una carrera épica en la que estudió los límites de su propio cuerpo, Lorenzo trabajó sin descanso para llegar en las mejores condiciones al circuito germano.

Sabía que este sería un trazado duro para él, por las dos fuertes frenadas que preceden a la recta de meta, las dos a la izquierda, y porque tiene una sucesión de hasta siete curvas también a la izquierda que exigen un esfuerzo mayor para esa zona del cuerpo. Así que se hizo acompañar de profesionales las 24 horas del día. Lorenzo trabajó con su preparador físico habitual, Antonio Cascini, y con el osteópata y fisioterapeuta que le acompaña en los circuitos, Claudio Scribano, y su socio, Pietro Tamburo. Sin ellos tres, sin la colaboración de los médicos que le operaron y el doctor Michele Zasa, de la clínica móvil del Mundial, no hubiera sido posible estar de vuelta en Holanda ni llegar a Alemania. Pero el hombre no lo controla todo. Hay factores que ni siquiera un campeón como Lorenzo domina.

Y así, después de realizar ejercicios de rehabilitación por la mañana y por la tarde, en la piscina y en el gimnasio; después de dedicar, mínimo, el doble de horas de las habituales, que son tres; después de experimentar con máquinas especiales —un crioláser para suministrar los fármacos con mayor rapidez y precisión, directos al hueso o al edema, en función de las necesidades del paciente; o un aparato de magnetoterapia, entre otros— para agilizar el proceso de recuperación, mejorar el drenaje y la vascularización en la zona afectada; después de masajes y lecciones de reeducación postural para que el cuerpo no se acostumbre a la lesión, Lorenzo volvió a tropezar. La operación había sido un éxito, ya le habían quitado los puntos, la herida cicatrizaba bien, y los médicos creían que ni siquiera necesitaría infiltrarse para correr: “Ya no tiene dolor”, corroboraba Scribano. Voluntad, esfuerzo y resultados. Todo eran mensajes positivos. Hasta que se volvió a dar con sus huesos contra el asfalto.

Fue, quizás, algo temerario. Volvió a la pista como si estuviera totalmente sano. “El riesgo existe ya sin lesión; e incrementa cuando uno corre lesionado”, había dicho el jueves. Pero el viernes se subió a su moto y firmó el mejor tiempo de la primera sesión libre. Y por la tarde, erre que erre: en dos vueltas ya iba al frente, se superó en la tercera, y pensaba seguir bajando en la cuarta cuando algo escapó a su control: salía de la última de aquellas siete curvas a la izquierda, iniciaba la temida bajada de Sachsenring, cuando el neumático trasero lo lanzó por los aires. Es posible que en aquel preciso instante dijera adiós al título que ha perseguido desde que el Mundial se estrenó en Catar. El mismo equipo del Hospital General de Catalunya que le operó hace dos semanas, dirigido por Joaquín Rodríguez, le intervendrá este sábado. Deberán extraerle la placa que fijaba esa clavícula izquierda, que se ha doblado y ha perforado ligeramente el hueso. Y de vuelta a empezar. Esta vez, eso sí, no parece que vaya a permitirse más heroicidades: “Me recuperaré y volveré tan pronto como sea posible”, señalaba en un comunicado el propio Lorenzo. La semana que viene se celebra el GP de EE UU, pero pocos le esperan.

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Sobre la firma

Nadia Tronchoni
Redactora jefa de la sección de Deportes y experta en motociclismo. Ha estado en cinco Rally Dakar y le apasionan el fútbol y la política. Se inició en la radio y empezó a escribir en el diario La Razón. Es Licenciada en Periodismo por la Universidad de Valencia, Máster en Fútbol en la UV y Executive Master en Marketing Digital por el IEBS.

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