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El Espanyol apuesta por Sergio González

El entrenador del filial blanquiazul durante cinco meses toma el testigo de Javier Aguirre

Juan I. Irigoyen
Sergio González, en un partido de la Copa Catalunya.
Sergio González, en un partido de la Copa Catalunya.CARLOS MIRA

Sergio González (L'Hospitalet, 1976) será el nuevo entrenador del Espanyol. El técnico catalán se hará cargo del banquillo del primer equipo que ha dejado libre Javier Aguirre. Aunque todavía sin experiencia en la Primera División, la temporada recién concluida dejó una muy buena imagen de la labor de Sergio en el filial blanquiazul.

Desde el área deportiva del club tenían claro el perfil de entrenador que necesitaba el Espanyol. Querían un técnico que mire a la cantera y, sobre todo, que no ahogue las delicadas cuentas corrientes del club. La idea era que el sueldo del técnico sea de alrededor de 600.000 euros. Así, los nombres que esgrimían en Sant Adrià oscilaban entre Ziganda, Gaizka Garitano, Javi Gracia, Mendilibar y Sergio González. Sin embargo, ni los directivos de Cornellà, ni los máximos accionistas coincidían con la idea del área deportiva. Querían un entrenador con más experiencia y renombre, como Paulo Sousa, Pepe Mel o Paco Jémez. Su idea era que el nuevo técnico ayudara a incentivar a la afición cada vez más despegada emocionalmente de un equipo que se desplomó en la recta final del campeonato.

El pulso lo ganó el área deportiva. Y el consenso se firmó con Sergio González. Aunque en la pugna quedó un hombre en el camino, Iñaki Pérez de Arrilucea, consejero responsable del área deportiva, que renunció a su cargo, quizás cansado de las constantes fricciones que mantuvo con los máximos mandatarios. La versión del club es que la dimisión de Iñaki Pérez de produjo por motivos personales.

Tiene las ideas muy claras. Es un entrenador moderno. Sabe perfectamente que lo táctico y lo físico es fundamental en el fútbol de hoy" Gerard López

Sergio es un hombre de la casa. Querido por la afición, dejó un gran recuerdo en su etapa como jugador y, en las vitrinas del club, la tercera Copa del Rey en 2000. Aterrizó en el Espanyol B en la temporada 1995-1996. Con la camiseta del primer equipo jugó 157 partidos, entre 1997 y 2001, y fue miembro de una extraordinaria generación de la cantera, junto a Capdevila, Morales, De Lucas y Tamudo. Aunque debutó con Camacho, se consolidó con Paco Flores. Se marchó al Deportivo, entre lágrimas, en 2001 a cambio de 17 millones de euros. Una vez en Galicia, se encontró su mejor nivel de juego, y Camacho, entonces seleccionador, lo llevó al Mundial de Corea y Japón.

Esta temporada Sergio González se estrenó como primer entrenador en el Espanyol B en enero de 2014. Hasta entonces segundo de Manolo Márquez en el filial, se hizo cargo de un equipo que marchaba en la decimosexta posición y que peleaba por evitar la promoción para evitar el descenso en Segunda B. Con Sergio, el equipo se transformó y concluyó en la octava plaza con solo dos derrotas en las últimas 17 jornadas. Cercano a los jugadores, invoca un trato justo en el vestuario. “Es muy buen gestor del grupo”, cuentan desde el entorno del nuevo técnico del primer equipo. Cuando terminó la temporada, con el objetivo de la salvación cumplido, Sergio se llevó a toda la plantilla del filial de vacaciones un fin de semana a Ibiza. La cuenta estaba a su cargo. “Sergio ha realizado un gran trabajo en el filial esta temporada. En cuatro meses ha podido rescatar al equipo de una situación comprometida”, asegura Capdevila, uno de sus grandes amigos.

El criterio del área deportiva y los límites económicos decantan la elección del club

“Es una persona muy afable y positiva. Se gana el respeto de la gente con su buen trato”, cuenta Raúl Longhi, con quien Sergio González trabajó en el filial cuando todavía estaba haciendo las prácticas como entrenador. “Cuando se acercó a ayudarnos en el filial del Espanyol enseguida notamos que es muy inquieto y, sobre todo, que tenía una gran predisposición para aprender”, agrega el exentrenador del Espanyol B. “Hicimos el curso en Las Rozas para entrenador”, suma Gerard López, seleccionador catalán; “allí hicimos un juramento que más allá de los colores de cada uno, siempre íbamos a contar el uno con el otro. Por eso no dudé en llamarlo como segundo entrenador en la selección catalana. Es un tipo súper profesional, muy serio y que llega al primer equipo del Espanyol con mucha ilusión. Además, se crió en la casa y conoce perfectamente el club”, reitera Gerard.

“Es un gran reto para él”, dice Capdevila. “Tiene las ideas muy claras. Es un entrenador moderno. Sabe perfectamente que lo táctico y lo físico es fundamental en el fútbol de hoy. Puede variar el sistema de juego, 4-4-2 ó 4-2-3-1, pero su idea es que el equipo sea un bloque, todos atacan, todos defienden”, concluye Gerard López.

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Sobre la firma

Juan I. Irigoyen
Redactor especializado en el FC Barcelona y fútbol sudamericano. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Ha cubierto Mundial de fútbol, Copa América y Champions Femenina. Es licenciado en ADE, MBA en la Universidad Católica Argentina y Máster de Periodismo BCN-NY en la Universitat de Barcelona, en la que es profesor de Periodismo Deportivo.

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